Minuto a minuto...
El poder del voto.
Juan Antonio Estrada Soto.
Acaba de terminar una jornada electoral muy
importante que nos deja lecturas muy claras de cómo
los ciudadanos premian o castigan a los gobernantes,
ya sea federales, estatales o municipales.
De acuerdo a los resultados conocidos de las
12 gubernaturas en juego, el PRI se alzó con la victoria
en 9 de ellas y las otras 3 habrá que ver qué partido en
particular se adjudica la victoria, porque recordemos
que en los estados de Oaxaca, Sinaloa y Puebla, se
aliaron fuerzas políticas tan encontradas como el PAN
y el PRD, así que esto será la manzana de la discordia
para estos partidos políticos, porque el año que entra
se pondrán en competencia dos estados muy
importantes como son Coahuila y el Estado de México,
como un preámbulo a la madre de todas elecciones
que son las federales del 2012.
Regresando a lo que acaba de suceder en las
elecciones recientes, unos y otros protagonistas deben
de estar preocupados por los resultados, porque en
ambos bandos se dieron alternancias, ya que los
priistas perdieron Puebla, Oaxaca y Sinaloa, pero los
otros perdieron Aguascalientes, Zacatecas y Tlaxcala,
o sea que estas fuerzas políticas tendrán que hacer
una reflexión muy seria de los acontecimientos, para
comprender los mensajes que les envían los ciudadanos sobre estas cuestiones políticas.
Tendrán que hacer un recuento de los daños para que se corrijan los errores cometidos en la
designación de sus candidatos, para que las diferencias que se tengan por las contiendas internas no
lleguen a perjudicar las elecciones.
Uno de los mensajes de estas últimas votaciones es que los malos gobiernos tienen como
consecuencia que los partidos pierdan el poder por la vía de los sufragios emitidos como castigo, por
estar alejados de la problemática que aqueja a los pobladores de esos estados y se preocupan más por
hacerse ricos y hacer prósperos a los funcionarios más cercanos, dejando de lado las promesas que
hicieron para sacar de la pobreza a la mayoría de sus gobernados.
El próximo año se pondrán en juego las gubernaturas del Estado de México y de Coahuila. La
primera tendrá repercusión directa en el proceso electoral del 2012, ya que el objetivo a derribar será
Enrique Peña Nieto, que es quien, por mucho, se perfila como el candidato natural a la Presidencia de
la República por parte de los priistas y será el blanco de los panistas, perredistas y compañía, quienes ya
están amenazando en coaligarse nuevamente, envalentonados por los resultados que obtuvieron en este
proceso, y buscarán maximizar los errores que se cometan para utilizarlos como bandera política, y será
el 2011 la fecha crucial para saber si el PRI regresa a Los Pinos o seguirán más gobiernos panistas.
Los priistas antes de pensar en Los Pinos deberán superar el escollo que se presentará el año que
viene y que los pondrá a prueba en lo referente a la fortaleza y cohesión que presenten ante el electorado,
y que deje la lectura de que la unidad de todos los grupos tiene como prioridad fortalecer a su candidato
y sacar la elección sin dudas, para que los otros partidos no la impugnen.
Por lo que respecta a nuestro estado, sin menospreciarlo, será una elección más tranquila porque
no repercutirá en el plano nacional más allá de que la percepción de la ciudadanía en el país es que el
PRI mantiene una racha ganadora de frente a los sucesos del 2012, pero este proceso lo abordaremos
más adelante, así que amigo lector los tiempos políticos por venir serán muy interesantes y de suma
importancia para saber que le espera al país en los siguientes años, ya que el horno no está para
bollos…¿no cree usted? |