Lucha libre de dos a tres caídas

Lilia Rabiela Garcíacano.

Primera Caída. Campañas dignas: Aunque a veces me resisto a hablar de política hay situaciones que suceden en la vida diaria que no podemos dejar de lado, y una de ellas es que a querer o no el ambiente de efervescencia que se ha desatado en Coahuila por las elecciones del próximo 3 de julio nos envuelve a todos los ciudadanos desde tiempo atrás con la campaña “No al hermano”, yo agregaría también “No al compadre”, “No al corrupto”, “No al abusivo”, “No al que quiere el puesto para fines personales”, etc., etc., y ahora con panistas y priistas en cada esquina buscando obtener la atención del ciudadano y entregando miles de panfletos y calcomanías que no hacen sino engrosar las bolsas de basura de todos los que las recibimos.

La verdad es que en medio de este ambiente y de la inseguridad que ronda a nuestro querido Coahuila, lo único que muchos, muchísimos ciudadanos exigimos es que haya campañas dignas, pues ya estamos hartos de las declaraciones en las que se ha denostado, descalificado y en ocasiones burlado incluso de los rivales, porque lo único que se logra es confirmar aquello de que quien no tiene nada bueno que decir de sí mismo, ni nada propositivo, se dedica a buscar la paja en el ojo ajeno sin ver la mega viga que trae en el suyo y así tratar de descalificar al contendiente.

Por otra parte en mi diario andar he observado como el compadre candidato ha elegido tener como sus promotores a grupos de pandilleros de mal aspecto, que además se ha reportado vía twitter que han hecho de las suyas arrebatando bolsos, celulares y objetos que los automovilistas llevan consigo en sus vehículos. Estas gentes causan temor y desconfianza y ahora ya nadie quiere bajar sus ventanillas para recibir publicidad ni nada, además de que contrataron como parte de sus huestes también a niños, violando así la Ley Federal del Trabajo, pero claro qué van a saber de eso si el Secretario Federal del ramo, miembro de su mismo partido, ya demostró muchas veces su ineptitud, hay nomás está el caso de los pocitos de carbón. Pero en fin, me pregunto como muchos si sus padres están al tanto de este “trabajo de sus hijos”, y si la ciudadanía tiene esta percepción de la indignidad en que han caído algunos candidatos, qué podemos esperar el día de la elección.

Segunda caída. Conecte su cerebro a la realidad: Hace unos días leí con asombro en los diarios, tratando de buscar mis lentes para ver si no había leído mal, la siguiente declaración:

“Hoy, el salario mínimo alcanza para más”: Cordero. El secretario de Hacienda señala que el control de la inflación y la estabilidad de precios ha permitido que en la actualidad con un salario mínimo se compren muchas más cosas que en el pasado”

Definitivamente este personaje ni de niño ni ahora de grande ha pisado una tienda, un supermercado o una gasolinera, como no sea a lo mejor para inaugurarlas porque lo que es pagar una cuenta seguro nunca lo ha hecho, atreverse a este tipo de declaraciones sólo es por dos cosas: o porque se es demasiado imbécil e ignorante o demasiado cínico, usted con cuál se queda, este asunto no amerita más comentario de mi parte, su boca lo ha dicho todo, ja…

Tercera caída: Esperemos a que pasen las elecciones de Coahuila para ver quién pierde la lucha libre si el guapito o el brother…