Coahuila ante sus retos a futuro

Luis Fernando Hernández González.

“La democracia social es una condición para alcanzar la igualdad entre los hombres, al superar la persona su individualismo y hacer suyos los valores colectivos”.
Jesús Reyes Heroles.

La actitud de esfuerzo y trabajo no cambia en los ciudadanos de Coahuila después de las elecciones, sus resultados para la mayoría de las personas en este compromiso cívico pasa a ser una etapa realizada, al incorporarse a sus actividades ordinarias que es de permanente entrega para la superación de sus motivaciones de orden personal y familiar, así es la actitud emprendedora y decidida de las personas que habitan estas tierras norteñas.

Queda bajo la agenda de trabajo en estos días, particularmente de las autoridades electorales y de los propios partidos políticos participantes, el analizar y verificar la autenticidad de resultados, así como aquellos criterios y comportamientos que provocan rasgos de inconsistencia en el aprecio de candidatos y organizaciones, que bajo su valoración razonada fueron causas negativas de influencia para los resultados finales.

En Coahuila, después de un considerable desplante territorial realizado por una militancia afiliada al Partido Revolucionario Institucional, sus esfuerzos no se vieron concretados con el éxito, situación provocada por factores que tienen su origen en la simulación y el engaño de quienes teniendo una responsabilidad no la cumplieron a cabalidad, generando con ello una carencia de compromiso en la precisión de objetivos y metas por obtener como resultado final.

Al constatarse en la arena de los hechos una carencia de congruencia, lealtad y compromiso político, en cuadros y segmentos que debiendo ser identificados con esta organización política, dieron muestra de una ausencia física de activismo político, agregando a ello la inmoral cooptación engañosa de quienes fueron objeto, como se habla en la región centro del estado, sitio en donde se puso en práctica la $educción de activistas sociales por parte del Partido de Acción Nacional, generando con ello el desgano y la apatía en los líderes sociales identificados con las causas populares que enarbola el mismo PRI.

La movilidad electoral como mecanismo dialéctico, se pulsa bajo distintas condiciones, primero: con el espaldarazo que los electores dan a Enrique Peña Nieto, para que éste se constituya en el próximo Presidente de la República, segundo: imponiéndose en la contienda electoral a Josefina Vázquez Mota, representante del partido político en el poder federal, la misma que pasa al tercer lugar por abajo de Andrés Manuel López Obrador, y tercero: que este señor con doce años de ejercicio promocional a lo largo y ancho de México, sólo logra obtener el segundo lugar en este proceso.

Ante tal situación, surge necesariamente la revisión de resultados, comportamientos y de personas, compromisos y lealtades, de congruencia y eficiencia en cada una de las tareas realizadas, al ser indispensable cualificar y cuantificar saldos de cada uno de los dispositivos en los que se trabajó, para así de esta manera evaluar fuerza, presencia y realidad de uno a uno de los compromisos asignados y de esta forma configurar los nuevos patrones de actividad y profundizar en el sentir de la población en cuanto a su realidad y esperanza a futuro.

La ciudadanía se ha manifestado en su expresión al votar, corresponde a partidos y ciudadanos, en fin a todos como miembros de una comunidad, encontrar en cada una de las tareas bajo nuestra responsabilidad, el indagar y dar respuesta concreta a estas expresiones de procedimiento social.

Porque como usted bien lo sabe amigo lector, son al fin los ciudadanos los mandantes de una soberanía popular, la que se manifiesta y cobra sentido su expresión de actitud con sus ecos en las urnas, en donde se demanda de parte de los ciudadanos un amplio acercamiento con la autoridad a todos sus niveles sea este municipal, estatal y nacional, en donde la palabra y el sentir de la población sea escuchada en forma abierta y sin cortapisas de toda una realidad.

En donde esta medida práctica postelectoral, sea la única fórmula válida de conjunción dentro del quehacer social y comunitario entre partido y autoridad, entre el ciudadano y el servidor público social, prestos a cumplir con responsabilidad, en donde el trabajo esté impregnado por un amplio bienestar popular.

A los ciudadanos y a Coahuila nada les puede detener en su esfuerzo, por continuar adelante luchando por su porvenir, pues bien se sabe que en toda actividad éstas se rigen por la conciliación, conjunción y concertación de acuerdos, bases fundamentales para la construcción de un futuro.