México les ama señores políticos
Apolinar Rodríguez Rocha.
Hablar de sociología, nos obliga a escudriñar desde la subcultura más encumbrada de la élite económica a los más inhóspitos lugares, donde se localice ser humano alguno; el estudio de la sociedad nos lleva a observar los fenómenos sociales, para prevenir problemas y patologías, viendo a cada uno como eslabón de una cadena interminable de realidades sociales, subsecuentes en el tiempo y ubicadas en la geografía, en el entorno de cada ser humano, donde se observa al individuo como engrane de una inmensa maquinaria social de producción; necesaria mas no indispensable en una dinámica incesante; sin embargo, la permanencia más o menos duradera de cada individuo, reclama cierto tipo, calidad, cantidad y grado de seguridad; las seguridades más elementales son indispensables para mantener el buen orden social, a falta de ellas el ser humano se convierte en uno más de las fieras del bosque.
Hemos de fijar en este instante, algunos matices determinantes del cauce construido que guían la historia de México:
Han sobrevenido, en el plano internacional, uno tras otro, en espacio subsecuente de diez años, grandes tumultos que han terminado con imperios y emporios; háblese de Grecia, Afganistán, Chile, Irak, Kuwait, Panamá, Brasil, Colombia; grandes masas civiles se han rebelado contra los sistemas de gobierno, generando represiones militares a los civiles, luchas sangrientas que con la ayuda internacional han logrado el fin de gobiernos ilegítimos.
¿Qué sucede en México? la inconformidad social, se ha esparcido por doquier. Los síntomas del acabose o del empezase, son muchos ya:
- En forma general los funcionarios públicos del país, municipales, estatales, federales de todo partido político, han caído en la corrupción, en el tráfico de influencias, en el nepotismo, en la impunidad, en la eternización del poder, en el pillaje de los dineros públicos, en el ostracismo.
- La estructura y las instituciones ha devenido en obsoletas por débiles y corruptas, perdiendo la credibilidad ciudadana.
- Los gobernados, cansados de todos esto, se han visto obligados a:
Subemplearse en el crimen organizado o en actividades formales o informales, no pagar impuestos; incumplir con sus obligaciones fiscales, civiles y mercantiles buscando la sobrevivencia. Un millón de reos dan testimonio de lo dicho.
Le sirven de marco: El robo de agua, tierra, petróleo, minerales, oro, plata, y sistemas de comunicación, en monopolios adjudicados por los gobernantes, vía concesión, por largos periodos de tiempo a precios de risa. La impunidad de los delincuentes de cuello blanco. La explotación inmisericorde a través del fisco, por los gobernantes, de la población económicamente activa. La eternización en el poder (negando oportunidad a los demás)
Una nula calidad de vida digna para el ser humano, niños, niñas, jóvenes, adultos, mujeres, hombres, ancianos, que o se han visto pecho a tierra por las continuas balaceras, o encamado en un hospital o esperando atención medica y medicación (que son insuficientes para tantos), por el sin número de enfermedades, crónicas, gravísimas, incapacitantes, recluido a una silla en el rincón de algún hogar, con mejorales y aspirinas. ¡México les ama señores funcionarios¡
Esta vez la sociedad entera se duele. Hartos... ¿tal ves de ver sufrir a una pequeña niña de cinco años? que encontrándose tranquila en su hogar, en compañía de su madre, hubo de presenciar como soldados del Ejército Mexicano, se enfrentaban desde su techo a ráfagas de metralla con secuestradores, para introducirse violentamente a su hogar y encañonarlas, para salir sin más y dejarlas a su suerte; acciones de estupidez; los soldados tal vez piensan que la única forma de matar es con sus balas; seis meses la niña sufrió... su apetito no llegó mas... su cuerpo se empezó a secar... el sueño no llegó mas... si intentaba dormir despertaba gritando... hubo de alimentársele a través de sonda, y sometérsele a todo método humano para que sobreviviera; el daño psicológico y trauma sufrido fue fatal... descanse en paz. Ni un peso, pago el ejército... ni el gobierno para ayudar a esa niña.
Le pregunto yo señor(a) “servidor público” ¿cree usted acaso que esa familia y los que le han visto padecer, aman ahora a México?
O prefiere escuchar, el gobierno, el amor que le profesa: la familia que ha visto a una mujer de sus integrantes acribillada a mansalva en pleno día, en medio de la calle la Fragua en Saltillo a su hija, hermana, madre, tía y que ningún representante de gobierno alguno, se presentara a ofrecer su ayuda o apoyo moral o económico, ni siquiera una disculpa, mientras luchaba por su vida, destrozada de medio cuerpo.... vida que al final ya no está. México les ama señores gobernantes. O tal vez, el amor patrio que yace ahora en los corazones de la familia Galindo, familia acribillada en Saltillo. ¡México les ama señores funcionarios públicos¡
O de las familias de desaparecidos; mas las de los heridos y lisiados; mas las de los inocentes encarcelados, o tal vez las de los Coahuilenses y otros Estados que han sido víctimas impunes del saqueo de sus dineros públicos, y endeudamiento público por sus gobernantes; o tal vez el de los miles de profesionistas que tras 16 años de estudio, salen graduados de las aulas sólo para encontrarse con que no hay plazas para ellos y son reducidos al subempleo privados de prestaciones sociales.
¿Serán mejor? los poemas de amor que les profesan, los campesinos y agricultores, cuando parados en sus parcelas, polvorientas o en sus corrales, ven morir entre mugidos y balidos a sus reses y caprinos, ante los escasez de alimentos y agua para ganado, que gobierno alguno se ha visto aplicado a atender.
Tal vez son más agradables para el gobernante los gritos de “pago justo” que a pecho abierto exigen como indemnizaciones los policías despedidos, y estigmatizados por el sistema por no aprobar las pruebas de confianza.
O prefiera escuchar los miles de lamentos de los huérfanos y viudas de soldados, policías, ministerios públicos y otros. Que se han visto expuestos al desamparo por una lucha que no les pertenece. Tal vez eso les llene de esperanza de recibir de ellos amor a México.
O les agrade escuchar los reclamos de las viudas de Pasta de Conchos, o los ofendidos y víctimas de la explosión de Celemania, Nadadores, Coahuila, o de la guardería ABC... o los reclamos de los ambientalistas desde el Golfo de México al Océano pacífico, desde las selvas, bosques, valles, o manglares. Todos ellos producto de la explotación voraz de los sectores capitalistas, consentida, tolerada e incluso ordenada por funcionarios públicos, para que se realicen con especulación económica y comercial actividades de alto riesgo, comercialización de alimentos no seguros (cancerígenos y tóxicos) y sustancias peligrosas y nocivas e incluso actividades delictivas, sin la menor vigilancia Estatal. (Los funcionarios, están de asueto, jugando golf, vacacionando en alguna playa, almorzando, comiendo, cenando, etc.)
Preferirán escuchar a las familias de Ramos Arizpe, Coahuila, autóctonas o no; que se han visto víctimas de la voracidad capitalista, al hacinamiento urbano mal planeado, convirtiéndose en una década, de pueblo agricultor en destino de migración nacional e internacional, explotación inmobiliaria, sufriendo los problemas de inseguridad y organización (sin debida planeación) propios de urbes de tránsito y/o destino migratorio; La sobrexplotación de las familias de Ramos Arizpe, que los ha obligado a hombres y mujeres a abandonar su vida hogareña, para recluirse en maquiladoras, mientras aumenta en forma desmedida el número de familias disfuncionales, de menores embarazadas, y su hijos rebeldes sin control, alcohólicos y drogadictos, violencia humana de toda especie, semillero seguro de delincuentes.
Etc... del pueblo que clama atención.
¿Si eso... es el gobierno qué ofertan...? seguramente los individuos seguirán prefiriendo el suicidio que significa pertenecer al vicio, al crimen organizado y el desorganizado, al suicidio directo y la disfuncionalidad familiar, como sucede en número cada vez más alarmantes.
“La inseguridad social fruto de la violencia estructural es ahora el flagelo a vencer, pues lógicamente, nadie está interesado en servir a una sociedad que nada ofrece; ni en obedecer a un gobernante que no brinda seguridad, sino que al contrario le explota y roba”
¿Tal vez es tiempo que los políticos dejen de pensar que ganar una elección, es ganar el concurso de señorita México y ver cumplidos sueños de princesas y cuentos de hadas?
¡Si Usted se postuló, es porque seguro viene a trabajar. Sino.... si es flojo... aún es tiempo que renuncie... no vaya a ser que le exijan trabajar y sacrificarse por la patria!
“Ciudadanos no se queden en casa el primero de julio 2012, acuda a votar... por Usted... por su familia... por México” “Y después de la elección, no se quede en casa exíjales a los electos audiencia, informes, trabajo, cuentas y resultados”
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