El movimiento yosoy132
Juan Antonio Estrada Soto.
Al calor inicial de las campañas políticas para la Presidencia de la República, y ante la muy alta probabilidad de que el PRI y su candidato accedieran a la más alta investidura política del país, como así sucedió, surgió un movimiento que al principio le dieron la connotación de estudiantil porque se inició en la Universidad Iberoamericana de la ciudad de México, ante la visita que realizó en su momento Enrique Peña Nieto, a quien en términos generales terminaron por repudiar.
Lo que muy pocos conocen es que el origen de este asunto de la Ibero se debió a lo que aun ahora se está discutiéndose: que la educación debe de dejar de ser laica para darle un sesgo religioso, porque recordemos que el origen de la universidad de marras es precisamente católico, ya que sus principales beneficiarios y directivos son jesuitas, una orden religiosa que hasta hace muy poco era poderosa en la curia vaticana, y cercana a los Papas hasta antes de Benedicto XVI.
En su pasada visita a nuestro país, que por cierto se restringió a una región tradicional y preponderantemente católica, el bajío mexicano; allí donde en los años veintes iniciaron un levantamiento armado de carácter religioso que se denominó guerra cristera. Le hicieron creer al Papa Joseph Ratzinger, que la modificación a la Constitución Mexicana era un hecho para darle entrada a la educación católica, y que como colofón, su visita al Bajío sería muy apropiado a eso.
Ante esta circunstancia, y al ver que los bonos panistas estaban a la baja y era muy posible, como fue, que los priistas llegaran al poder presidencial, y con esto se desvaneciera esta situación, ya que tradicionalmente los miembros del PRI se identifican con la política liberal que desde los tiempos del Benemérito de las Américas, don Benito Juárez, pusiera estos asuntos en claro y dejara que la educación en el país fuera laica.
Ante esta situación, se fortaleció la percepción de que un movimiento estudiantil de estas características descarrilaría la llegada de los priistas a la Presidencia de la República, con el apoyo incondicional de las izquierdas, que vieron en esto una mina de oro ya que se pensó que su candidato Andrés Manuel López Obrador pudiera repuntar en la medida de que este grupo creciera, no solamente en el Distrito Federal, su bastión, sino en todos los Estados de la República.
Pero ésto nada más estaban en su mente, ya que en la ciudadanía que iba a decidir la elección no permeó esta forma de pensar, con los resultados ya conocidos, que está llevando al movimiento del yosoy132 a los niveles iniciales, porque con la terminación del proceso electoral se les acabaron sus argumentos, y por lo tanto se tiene conciencia de que este movimiento que tuvo origen estudiantil y que ahora se sabe que está penetrado por los grupos más radicales de la izquierda mexicana no tuvo los resultados esperados, y a la postre terminara como empezó, siendo un movimiento electorero. Por eso amigo lector, el yosoy132 no tenía más futuro que lo meramente electoral, tal y como lo dejamos asentado en una pasada entrega. ¿No cree usted?
|