SORIANA; un ejemplo del éxito nacional

Augusto Hugo Peña Delgadillo.

En cada rincón de México, había, hay y habrá gente exitosa, brillante y ejemplar que dejan una huella a seguir a quienes les suceden. En la Laguna, el fenómeno no es la excepción. Comentaré sobre dos hombres exitosos, don Armando y don Francisco Martín Borque, miembros de una familia española. Se dedicaron al negocio de la ropa y telas. En agosto de 1962, los conocí, eran en la comarca y en la ciudad de Chihuahua, los principales comerciantes del ramo. En octubre de ese año, don Armando y don Paco, modernizaron el negocio. Optaron por convertir las Sorianas -en Chihuahua y Torreón- en tiendas de autoservicio. Quitaron mostradores y adaptaron las tiendas al Método MMM (Métodos Mercantiles Modernos), un sistema novedoso que tiende a aumentar la venta per capita clientelar, bajando los costos. En suma, vender y ganar más por cada metro cuadrado de tienda, con menor esfuerzo, creando un sinnúmero de islas pequeñas de pérdidas en un mar de utilidades. Es un sistema simple de ofertas que aprovecha las tendencias de la gente.

Posteriormente abrieron dos tiendas más. Una en Chihuahua (La Soriana II) por la calle Libertad, y otra en Torreón (Pryca) por la avenida Hidalgo. PRYCA es precio y calidad. En eso basaron su éxito pero también en otros dos renglones; puntualidad en pagos y comprar lo mejor a menor precio. Una década después, tomaron la decisión de extenderse a supermercados con venta de pan, medicinas, tortillas, leche, verduras y frutas, carne, pescado, mariscos, vinos y licores, línea electrónica, discos, telas, ropa, blancos, artículos para el hogar y otros productos.

La empresa The National Cash Register Co., promotora de los MMM y ofertante de sistemas de control, incidió y en los hermanos Martín Borque, como antes lo hizo con Ángel Lozada y sus socios, señor del Cerro y Pepe González Nova. Fueron los pioneros en México de este tipo de negocios. Así nació la tienda GIGANTE. Ya el comprador no tenía que ir a panaderías, carnicerías, verdulerías, lecherías, boticas etc., en un solo espacio encontrarían todos los productos. La tienda primera de GIGANTE se inauguró en Mixcoac en Noviembre de 1962. Siguieron los Arango con (Aurrerá socios de Walmart) y Carlos González (Comercial Mexicana); luego, Antonio Chedraue (Chedraue); Polo Mares en Chihuahua con Futurama, hoy Al Super; Alfredo Arteaga Lira, en Rosita, Coahuila, con MERCO, y otros de menor jerarquía, desperdigados por todo México.

Por fin, hace cuatro décadas, don Armando y don Paco, se lanzaron, impulsados por un peruano, experto en MMM. La luz primera del emporio SORIANA, brilló en la tienda de la avenida Hidalgo y Ramos Arizpe. Hoy tienen más de 500, y muchos negocios afines SORIANA. La empresa obtiene ganancias por miles de millones de pesos al año. Lo anterior, me obliga a cuestionar la actitud de Ricardo Martín Bringas y o de sus directores, por haber unido sus acciones a los peores mexicanos, humanamente hablando, dentro del empresariado nacional.

Me refiero a los miembros del CCE y Coparmex, Claudio X. González de Kimberley Clark; Alberto y Alejandro Bailleres de PEÑOLES y a Germán Larrea Mota Velazco de Grupo Minero México, entre otros. Todos ellos, coludidos al PAN y PRI en fraudes electorales (2006 y 2012). Ojalá que el Grupo Soriana, no se convierta en un lastre social. A don Armando y a don Paco, nos les hubiera parecido decente ni inteligente, que uno de sus vástagos, por unos cuantos pesos extras de ganancia, traicionara sus principios y menos aún, la confianza de la clientela que les favorece. Son gente pobre y de clase media, por ello, sería bueno que Ricardo Martín Bringas rectifique, y no incurra de nuevo en actos que afecten a la ciudadanía y al prestigio ganado por don Armando y don Paco. O, ¿usted qué opina apreciable lector?