Isidro y la cultura

José Luis Carrillo Hernández.

Ya ganó el PAN, ganó Isidro López Villarreal, ahora qué expectativas tiene la sociedad de que los compromisos o promesas de campaña aterricen en un verdadero beneficio social y no en una pobre acción, como la triste e intranscendente propuesta cultural de la administración de Jericó Abramo Masso, que tuvo en los colaboradores del Instituto Municipal de Cultura sus más fieles intérpretes, pues durante cuatro años se la pasaron organizando festivalitos y acciones del estilo de fin de cursos y graduación, no dieron para más, o acaso La calle cobra vida orgullo del alcalde, es una idea propia, cuando primero surgió en la ciudad de México de afiliación perredista.

Acaso ha mantenido un activo programa de contenidos culturales variados y de calidad, cuando lo único que hizo fue utilizar a muchos artistas locales para que le amenizaran toda la calle y que pasaran el sombrero, dicho de otra manera los pusieron a mendigar con un desfile interminable de gente de casi todos los sectores reunidos los domingos tras costosísima campaña de publicidad pagada por la presidencia municipal.

Hoy son contados los artistas que se prestan a este juego, pues La calle cobra vidaes un desfile de chundos, raperos, cholos y despistados con todas las chamaquitas que los acompañan que no le echan monedas al sombrero. Eso dejó de ser un paseo familiar.

La incertidumbre de todos los sectores es natural, pues el alcalde electo aun no da luces respecto a quienes ocuparán los principales puestos, mucho menos quien ocupará la dirección del deslucido Instituto Municipal de Cultura, no es de dudar que el grupito de los artistas indignados y politizados anden por ahí tras sabroso hueso de médula azul, pues hay que recordar que éstos fueron apadrinados por los diputados panistas para darle entrada a su ley de cultura que finalmente aprobada y tras pantomima electoral para elegir consejo, fue derrumbada tras amparo interpuesto por el Actor Alejandro Esparza que por cierto militó en las filas del PAN cuando fungió como secretario particular del entonces alcalde interino Bibiano Berlanga.

No sería de sorprender que alguno de estos personajes de la farándula local se convirtiera en titular de este Instituto, pues muchos de ellos o casi todos están acostumbrado a vivir del presupuesto, cuando hay que ser priistas su corazón es rojo, pero ahora son de sangre azul. Puro camaleón y cangrejos de la misma cubeta que están peleando entre sí por allegarse la simpatía y la gracia de los gobernantes en turno, pues saben a nómina y se sufre mucho vivir fuera del presupuesto, o como dice los priistas eso es un error, desafortunadamente, la escuela de corrupción y componenda que implantó el PRI es la escuela que adoptan los panistas, pues pertenecen a la misma cepa patógena el PRIAN.

Sin embargo en campaña poco o nada escuchamos a Isidro López hablar de arte y cultura, es mas no conocimos propuesta o proyecto alguno, lo que nos hace suponer que esta área de la administración municipal no está en sus prioridades, corriendo el riesgo de convertirla en granero de aplausos para el lucimiento del futuro alcalde, pues se dice que ya es precandidato a la gubernatura, seguro que para esto no se escatimarán recursos y aunque no sabemos qué tanta cultura tenga el próximo alcalde, nos daremos cuenta cuando exponga sus opiniones y tome decisiones.

Isidro habló de hacer valer la voz de la ciudadanía para que ésta decida la aplicación de los recursos en su área, entonces por qué no hacer lo mismo con los creadores, intérpretes y deportistas, con los niños, jóvenes y padres, si al próximo alcalde le late su corazoncito para el handicap Coahuila 2017 tiene una oportunidad de oro, hacer de la consulta una cultura participativa que involucre a toda la ciudadanía, y que por sectores se decida y supervise la correcta aplicación de los recursos, así como lo propuso en campaña y que no sea un puñado de oportunistas y vividores de la política y la burocracia la que decida quién y cómo se embolsan el presupuesto.