“Estoy en mi elemento”

Eloy Dewey Castilla.

Aquel que es, hace y está participando en lo que más le gusta, le llena, le apasiona, le da vigor a su vida, es que está en su elemento.

Es aquel que dice que le pagan por hacer lo que le gusta.

Desde la revolución industrial, el sistema educativo está formando niños y jóvenes para que ocupen un lugar en la sociedad y se integren en las diversas actividades que se ofrecen en el mercado de trabajo.

No niego que hay un trabajo preparatorio para que el joven encuentre su vocación, pero es muy distinto elegir una carrera a que la misma le llene en plenitud para que esté en su elemento.

Su entorno familiar y de grupo poco ayudan para que el joven siga su sueño en lo que le apasiona.

Talentos que nunca encontraron la oportunidad para hacer y desarrollarse en su elemento. Sí están trabajando pero no en lo que su elemento les dicta. Están inconformes, frustrados y anhelando haber hecho lo que les dictaba su elemento.

Quien supo y tuvo la gallardía de salirse del ambiente de conformidad a pesar de las críticas y limitaciones en su momento, seguramente está disfrutando su vida a plenitud y con felicidad.

Cuesta trabajo y requiere de mucha determinación para seguir un sueño, su elemento. Pone a prueba a una persona para hacer lo que le gusta y no estar en el “montón” que simplemente se dedica a ser lo que todo mundo hace y es comúnmente aceptado por todos.

Es mejor elegir que juego jugar que estar jugando un juego impuesto que inhibe el elemento.

Es parte de la vida… y de la felicidad.