La gripe aviar es vista como una
oportunidad
¿Se acuerdan del FOBAPROA? Pues el gobierno ya armó el FOBAPOLLO para recatar avicultores *Peña Nieto Rescata a avicultores con el hambre de los jodidos, como se hizo con los bancos y Mexicana de Aviación *Nuestro gobierno es un remedo de gobierno; los ciudadanos tenemos la culpa porque no sabemos elegir ni exigir.
Augusto Hugo Peña Delgadillo.
El año pasado hubo casos de gripe aviar en varias partes de la república; Sonora, Guanajuato y Jalisco; los avicultores se alarmaron y echaron a andar ideas para afrontar su crisis. Hablaron con el gobierno para pedir ayuda; la presidencia de la república, llamó a los secretarios de economía y de hacienda para respaldar al sector avícola; se dieron a la tarea de resolver el problema; y lo hicieron; platicaron con los avicultores para saber cuántas aves hay que sacrificar y cuál, el monto de la pérdida... Se hicieron los estimados y los funcionarios pidieron dos días de plazo para llegar a un acuerdo que sirviera de ayuda. En menos de 40 horas resolvieron el problema.
Se aseguraron que las aves afectadas se sacrificaran para controlar la pandemia; Cuantificaron las pérdidas, y Subieron el precio del huevo y la carne un 77% y así recuperaron las pérdidas. ¡Qué bribones!... Resolvieron el problema de los avicultores; se acordaron del FOBAPROA, lo calcaron e hicieron un FOBAPOLLO, pasando a cuchillo a los jodidos; resolvieron el problema con el salario de la gente. Hace dos años el huevo valía en promedio un peso la pieza; hoy un huevo cuesta más del doble, y los avicultores, felices; aprendieron que de cada tragedia nace una oportunidad. ¡Claro!... ¿a costa de quién?... de los pobres... ¿por qué?... porque los políticos no saben gobernar.
Para el gobierno de México y los empresarios, los problemas son simples, los resuelven de la manera más atroz. Siempre con cargo al erario o al bolsillo de la gente. Hay sequía y los agricultores pierden en sus cosechas y los granos suben. ¿Quién paga por el problema? Los consumidores. Pondré un ejemplo: Hace días quemaron intencionalmente tres madererías y una bodega de pinturas en Torreón y Gómez Palacio. Este problema es de inseguridad y también de economía para los empresarios. ¿Acaso por ello los precios de la madera y las pinturas subirán y el costo lo pagarán los consumidores? No, entonces, con la pandemia de la gripe aviar ¿por qué los consumidores tienen que pagar el costo de la crisis financiera de los avicultores? El huevo y el pollo, son los alimentos con proteínas, más baratos en el mercado, y al encarecerlos con saña y maña, el gobierno se contradice en la lucha contra la desnutrición y el hambre. De ahí, que al gobierno nuevo, el de Peña Nieto, no hay que creerle nada, y de plano, ni tomarlo en serio, la incongruencia con la que actúa, nos da el derecho de dudar de todos sus discursos.
La guerra contra el crimen organizado es una catástrofe para 116 millones de mexicanos; el combate a la hambruna y desnutrición ¿acaso será con cargo a los que menos tienen? Ya es hora que el gobierno se arme de vergüenza y sea congruente; que deje de lado el cinismo que le ha caracterizado; las crisis no se resuelven con incongruencias, falta de inteligencia y mala fe. ¿Hasta cuándo tendremos un gobierno que sepa gobernar, que entienda que la política es un arte y una ciencia, y no oportunidad de negocios para que unos cuantos se enriquezcan?
Muestra de la inconsistencia, falta de tino y de vergüenza del gobierno, digo yo, es la declaración del director de PEMEX, quien dijo, luego de la explosión del edificio B2, aledaño a la Torre de Petróleos Mexicanos “La tragedia, la veo como una oportunidad para que PEMEX salga fortalecido” ¡Cretino!... decir que con la muerte de una cuarentena de personas, más de cien heridos, y la pérdida de miles de millones de pesos en daños materiales ¿PEMEX saldrá fortalecido por esta “oportunidad?. ¿Qué le pasa a Peña Nieto… qué se creen los políticos y funcionarios públicos… que los mexicanos somos estúpidos? Bueno así las cosas, y así la incongruencia de nuestras autoridades. ¿Qué le vamos a hacer?... ya vamos en el año 31, gobernados por los peores. O, ¿usted qué opina apreciable lector?
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