Catálogo de guerra
Rufino Rodríguez Garza.
La Escuela de Ciencias Sociales de la UAdeC, el Archivo General del Estado de Coahuila (AGEC), la Secretaría de Cultura, la Coordinación de Bibliotecas y la Coordinación de Difusión y Patrimonio Cultural han publicado un voluminoso libro que trata de las referencias a la guerra contra los nativos, que en el proceso de colonización se registraron en los diferentes archivos del estado. Sobra decir que la mayoría de los documentos tratan de ataques de los indios a ranchos y haciendas de los españoles. En ningún momento se rescata algún hecho amable o favorable a los indios de Coahuila.
El libro en cuestión lleva por nombre: “Catálogo de fuentes para la historia de la guerra y cultura indias en Coahuila”. Lo firma como coordinador el Lic. Lucas Martínez Sánchez, y como presentador el Dr. Carlos Manuel Valdés, fundador y primer director de la escuela de Ciencias Sociales. El trabajo de revisión y selección lo realizó el Maestro en Ciencias Francisco Javier Rodríguez Gutiérrez, y la colaboración de los pasantes de la carrera de historia y primera generación Ernesto Terry Carrillo y Dulce Niño García.
Este catálogo es un “instrumento de trabajo y no una obra destinada a la lectura” (Valdés Dávila). El mismo autor nos habla de la utilidad de la obra para los “consultantes” que quieran referenciar los temas “militares, políticos, trazos del estado español o de la naciente nación mexicana, vida cotidiana, historia de la Iglesia, cultura indígena, estrategia y táctica militar o económica y, en fin, aspectos ideológicos o religiosos múltiples.”
Aquí el investigador podrá encontrar documentos donde, con tal de acabar o exterminar a los indios, se les envenenaban los aguajes. También están los reportes de los colonos que refieren ataque y secuestros de mujeres y niños (cautivos), que con el tiempo llegaron a ser gente importante entre los grupos indígenas.
El catálogo se compone de 3134 fichas, en 810 apretadas páginas. Al decir del Dr. Carlos Manuel Valdés “… cuando vivieron se les menospreció; peor todavía, se les atacó, encarceló o asesinó”. Y se les esclavizó para el trabajo en las minas de Zacatecas y en haciendas agrícolas y ganaderas. Cabe aclarar que también se les secuestró para venderlos como esclavos en Cuba, Venezuela y el Caribe. El trabajo archivístico es de tal calidad que este libro será un orgullo para la Escuela de Ciencias Sociales y el Archivo General del Estado.
Se revisaron archivos (que se resguardan en Ramos Arizpe, sede del AGEC) de Monclova, Saltillo, Parras, San Buenaventura, Nava, Guerrero, Múzquiz, etc., incluyendo archivos parroquiales (Monclova por ejemplo) y periódicos del siglo XIX.
La ficha más temprana, la número 1, es de 1578/1609, y se refiere a un pleito por agua entre españoles y “naturales” de San Esteban de la Nueva Tlaxcala. La más tardía es la ficha 3134, en el Periódico Oficial, 01 de junio de 1940, y trata de dotación de tierras ejidales a los “vecinos mascogos”, en el municipio de Múzquiz por el Departamento Agrario.
Las más de las fichas son relativas a la constante guerra de exterminio como la siguiente: Ficha 658, Monclova, enero de 1821, “el Ayuntamiento de esta villa, comunica al de San Buenaventura, que Rafael del Valle, va a salir con una partida de hombres con el objeto de perseguir a los bárbaros ya que se robaron unas mulas, para que lo auxilie con 25 hombres.”
Para el mejor manejo de este importante catálogo, se elaboraron tres detallados índices que facilitarán encontrar rápido el documento requerido para cualquier investigación. El primero es el ONOMÁSTICO, relativo a los nombres y especialmente a los nombres propios, es el de más entradas, se compone de 61 páginas y se mencionan alrededor de 2400 personas. De aquí que podemos enterar que hay documentos en los que se mencionan indios con su nombre y su apodo en algunos casos.
Tal es el caso de Apichina, alias el Tuerto, indio kikapú; Antonio Casimiro, indio chapamochoc; Espejo, capitán de mezcaleros; Francisco Nicolás, indio chichimeca; Gato del Monte, capitán seminol: (aparece indistintamente como indio, jefe, capitán o capitancillo) indio que se le menciona en 28 documentos; John Horse (Juan Caballo), capitán de los negros libres; Lázaro, indio xuma; Nicusumala, capitán; Saquina, indio comanche; Tasunihua, capitancillo comanche, etc.
Otro de los índices es el GEOGRÁFICO, con 24 páginas, en las que se mencionan más de 720 lugares de Coahuila y Texas, o de Coahuila y sitios o poblaciones de estados vecinos.
El Pelillal, lugar ejidal en estos momentos, se le menciona un par de veces en este catálogo donde en la ficha 2303 de octubre de 1852, informa a la presidencia municipal de Ramos Arizpe “sobre el robo de ganado, muertos y heridos con secuestro de menores en la labor del Pelillal, como saldo de la entrada de los indios en este punto”. Esta comunidad se le ha mencionado en muchas ocasiones en este periódico, tanto por el ingeniero José Flores Ventura como por un servidor, pues es un sitio o zona arqueológica con una cantidad impresionante de vestigios de los indios en manifestaciones de pinturas, petroglifos, chimeneas y geoglifos, que dan idea de la densidad de población en estos lugares, arrebatados por los europeos desde su llegada en el siglo XVI.
Otros lugares mencionados son el de Anhelo, con nueve veces, la Azufrosa una sola vez, sierra de la Paila, etc.
Los lugares con mayor referencias son Monclova con más de 500 veces, San Buenaventura con 323, Saltillo con 257, también son importantes lugares como Nava, Parras y Nadadores entre otros muchos.
Por último está el índice ÉTNICO en donde hay referencias a más de 100 grupos, de los que se mencionan en repetidas ocasiones están los comanches, los lipanes, los apaches, los seminoles, tlaxcaltecas, kikapús, y otras tribus propias de nuestros territorios como pachos, borrados, chichimecas, cocollomes, cíbolos, mezcaleros, tobosos y un gran etcétera.
Un libro que ayudará y facilitará el trabajo a los investigadores de Coahuila, Nuevo León y estados vecinos.
|