Crónicas de un saltillense agringado

Héctor A. Calles.

Cuernitos de cinco millones de dólares

Nunca antes me había puesto a pensar en los salarios de los empleados públicos en Texas, pero recientemente me llamó la atención una noticia que empezó a circular con insistencia aquí en Austin sobre el ex jugador de fútbol americano, Charlie Strong, quién acaba de ser designado nuevo coach del equipo de fútbol americano “Longhorns” de la Universidad de Texas. A través de dicho acuerdo -con duración de cinco años- el señor Strong estará percibiendo la fabulosa suma de 5 millones de dólares anuales pagaderos en mensualidades de aproximadamente 420 mil dólares.

Sólo por curiosidad y abundar un poco en el asunto me puse a hacer una pequeña búsqueda y fui a dar con un interesante sitio en internet llamado “paywizard.org” y también el de “Texastribune.org” donde de manera pública se pueden consultar los salarios de empleados públicos en los Estados Unidos. Lo más obvio me pareció empezar por ver cuánto ganaba Obama al año y resulta que el Presidente de los Estados Unidos gana al año aún menos de lo que el coach Charlie Strong gana en un solo mes. Acepto que sí me sacudió la repentina noción de la realidad, pero como buen amante de la filosofía del cuestiona- miento y la utilidad de las cosas, de inmediato me puse a sacar explicaciones al asunto.

Creo que, por principio de cuentas, esto no es cosa de moralidad, ni de leyes, ni de justicia, es obvio que se trata de un negocio. Obama es un político, líder electo de 313 millones de personas repartidos en cincuenta Estados y un Distrito Federal, incluido Charlie Strong y todos sus jugadores, mientras que Charlie Strong sólo es un empleado público de la Universidad de Texas, liderando aproxima- damente a cien integrantes del equipo de los Longhorns. En este punto, como un flashazo, se me vino a la mente la imagen de una horda de enfurecidos y hostiles fanáticos reclamán- dome por cuestionar la sacrosanta integridad de su equipo; ahí se me alojaron las tripas y de pronto ya no supe cómo explicarme el asunto, así que me hice sólo una pregunta suavecita: ¿Será que el consejo que lo eligió espera que Charlie traiga muchísimo dinero a la mesa a través de campeonatos y estadios llenos?

Empecé a buscarle mejor por otras áreas menos sensibles a la crítica y la observación, y una vez que le rasqué más a la superficie de este asunto caí en cuenta que la situación de los salarios era mucho más complicada de lo que parecía; cuando vi los salarios y puestos de trabajo quedé aturdido ¡Ni la más mínima idea tenía que en el gobierno se ganaba tan bien! Por una parte, en el fondo y en un tono casi sarcástico, me sentí profundamente equivocado, como si hubiera perdido años valiosos de mi vida buscando puras quimeras ¡La verdad del éxito en la vida se halla en los puestos de gobierno en el Estado de Texas!

Según el portal de Texas Tribune la mayoría de los oficiales de Gobierno de alto nivel, ganan salarios empezando desde medio millón de dólares al año y casi todos están entre 150 mil a 250 mil dólares anuales. Sin duda, cantidades de ensueño, realmente fabulosas ¿Y qué puestos detentan estos funcionarios? Por ejemplo, el Rector de la Universidad de Texas (Chancellor) gana medio millón de dólares al año. Sólo por arrojar un dato más, el Rector de la UAdeC gana 1 millón setecientos mil pesos al año. Ya puesto en billete verde apenas representa 133 mil dólares, lo que es apenas la cuarta parte de su flamante contraparte en la Universidad de Texas.

Mil loqueros estrenando Cadillacs

Ante el alud de datos y la imposibilidad de reflejarlos todos en mi columna, elegí otro listado muy curioso que me llamó la atención. Resulta que en el Estado de Texas hay un montón de “Psiquiatras III”, o mejor dicho, un ejército de ellos, cuyo salario es casi parejo entre los 200 mil dólares anuales ¿Para qué tanto loquero? ¿Será que en Texas, después del Futból lo más importante (o lo más grave) es la salud mental? Me imaginé -de manera cómica- algún oficial de gobierno, vestido como Calígula y su caballo, diciendo: “Soltad a los loqueros” mientras despreocupadamente les aventaba sendos fajos de billetes de a cien dólares. Y ahí van corriendo todos esos seres vestidos con batas blancas, comprando carros nuevos, enormes residencias y vacaciones en Europa a diestra y siniestra.

De pronto regresé a mis sentidos y descubrí que de seguir divagando tonterías y burlándome de los Psiquiatras III, corro el kármico riesgo de acabar un día entre sus manos. Bueno, quizá un último atrevimiento no haga daño, ya sólo para cerrar esta columna. Y creo que este dato debe ser muy halagador para los atrapa-locos grado III: Ni el más alto oficial mexicano, el Presidente de México, gana lo que cualquier Psiquiatra hijo de vecino, gana en una sola ciudad, de un solo Estado en este país. Y como Soraya Montenegro decía: ¡Tómenla marginales!

www.HectorCalles.com

Fuentes:

http://www.texastribune.org/library/data/government-employee-salaries/state-of-texas
http://www.paywizard.org/main/salary/vip-check/salaries-president-obamas-administration

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