Los jubilados y la injusticia

Evaristo Velasco Álvarez.

JUSTICIA, por definición, es entregarle a cada quien lo que le corresponde; es, de acuerdo a las leyes, a la normatividad, reconocer en cada quien, lo que se ha ganado en su trayecto de vida.

Mientras que la DIGNIDAD, es el trato que alguien se merece y que justamente se ha ganado, conforme a las normas sociales; y en toda una vida de servicios, después de entregarle a la sociedad y a la vida misma sus mejores años y lozanías; cuando sus facultades tal vez se encuentren mermadas por el uso y el paso del tiempo; mientras que su conocimiento y habilidades están incrementados sustancialmente, y porque las enfermedades le encuentren con las defensas bajas; como si fuera un trasto viejo, a los jubilados se les arrumba en algún rincón de la vida. ¿Y la dignidad?

- ¡Míralo! Está muy viejo, canoso, arrugado, pasado de moda… ¡que ya se vaya a su casa!- y algunas “lindezas” más, porque están viejos. ¿Y todos los jóvenes, ya pensaron que algún día también serán viejos?

Y con sueldos miserables la inmensa mayoría; con cantidades de menos de $3,000.00 mensuales, le hacen una fiesta (para que ya se vaya y deje el lugar para algún joven), sin posibilidad de ser contratado en ningún lado (porque ya es muy viejo), se va dolido en el alma, a su casa (si tiene alguna), o a “arrimarse” con algún pariente o amigo, porque ya no alcanza a pagar una renta.

Y los vemos tomando el sol en alguna plaza pública, en algún jardín, con algún libro (en el mejor de los casos), o con su inmensa saca de recuerdos, tomando el sol, y aprovechando el tiempo para platicar con otros jubilados como él. No porque no quieran o no puedan desarrollar alguna actividad, sino porque ya nadie los quiere ocupar.

En el DIF hacen algo de esfuerzo para aliviar el diario vivir de estos que otrora fueran los que sostuvieron la planta laboral y el construir de una patria, que ya los ve como estorbo. Allá, algunos son tomados en cuenta para formar grupos de baile (danzoneros), rondallas, etc. Quienes luego quieren demostrar al pueblo que siguen vivos, en festivales de bailes, de canto y de poesía, que poca gente quiere ver… ¡porque son puros viejos!

Y así transcurrirán los días y las noches, con cuerpos adoloridos y gastados, pero principalmente con un espíritu desaprovechado, puesto que son bibliotecas inmensas de recuerdos, de añoranzas, de conocimientos que se irán a la tumba ante la incomprensión de una sociedad desenfrenada que se atiborra en los festejos decembrinos, en apretujamientos que impiden que los viejos también disfruten con dignidad de la algarabía de la feria.

¿Será que la justicia se olvidó de crear un buen sistema de jubilación o de pensión para quienes llegan a la llamada Tercera edad? ¿Será que no supieron o no se les informó, que la jubilación era tan raquítica, económica y emocionalmente? ¿Será que urge que se legisle al respecto, a efecto de evitar que se vuelvan a ROBAR el fondo destinado a pagar a los jubilados la pensión? (¿Se acuerdan del FOBAPROA=Fondo Bancario de Protección al Ahorro?).

Les invito a ver este video, en el cual vemos a Ernesto Zedillo, en su actuación: http://mexicodesgraciado.blogspot.mx/2009/02/fobaproa-ipab-el-fraude-del-siglo.html, aquí vemos que Zedillo les entregó a los bancos ¡QUINIENTOS MIL MILLONES DE PESOS!, del FOBAPROA, dejando en la indefensión a quienes se jubilan, porque ¡no hay fondos suficientes para pagar jubilaciones DIGNAS! Claro, se lo ROBARON… con la aprobación de los congresos locales y federales. ¡¿NUESTROS REPRESENTANTES?!

Mientras tanto, la edad y el tiempo avanzan. Para Zedillo sí hay suficiente para que reciba una pensión de más de CIEN MIL PESOS mensuales; y por otro lado, los desprotegidos reciben pensiones de DOS MIL QUINIENTOS PESOS. ¿Justicia? ¿Dignidad?

Hago un enérgico llamado a los señores diputados locales, a los diputados federales y a los senadores, a efecto de que se legisle y que los jubilados y pensionados, quienes entregaron su vida en beneficio de todo el país, reciban pensiones justas y dignas. Si ustedes, nuestros empleados de lujo, actúan de manera correcta y hacen justicia a los senectos de México, entonces, y sólo entonces, harán ¡Que viva México!

velasco_alvarez@yahoo.com