No a la trata de personas
José Luis Rodríguez Flores.
Según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), es alarmante el número de 800 mil personas que son objeto de trata cada año a través de las fronteras internacionales, sin incluir a millones de víctimas dentro de sus propios países. (Fuente: página OIM). Para la Oficina de las Naciones Unidas contra las Drogas y el Delito existen seres humanos de 127 países siendo explotados en 137 naciones. Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el número mínimo de personas en explotación laboral, incluida la explotación sexual, como secuela de la trata de personas en un momento dado puede llegar a ser de aproximadamente 2.5 millones. La Trata de personas para el crimen organizado representa la tercera fuente de ingresos, sólo debajo del tráfico de armas y drogas.
Se entiende por trata de personas, la captación, el transporte, el traslado o la recepción de personas, recurriendo a la amenaza, al uso de la fuerza u otras formas de coacción, al rapto, al engaño, al abuso de poder, o de situación de vulnerabilidad o a la concesión o recepción de pagos, para obtener el beneficio de una persona que tenga autoridad sobre otra con fines de explotación, concibiendo la explotación, como la prostitución ajena u otras formas de explotación sexual, los trabajos y servicios forzados, la esclavitud, o las prácticas análogas a la esclavitud, entre otras formas de explotación.
México está catalogado como fuente, tránsito y destino para la trata de personas, para los propósitos de la explotación sexual, comercial y del trabajo forzado. Los grupos considerados vulnerables para la trata en México, son las mujeres, los niños, las personas indígenas y los emigrantes indocumentados; me referiré a estos últimos inmigrantes ilegales, centroamericanos que arriesgan su vida diariamente, trepados como moscas en el célebre tren llamado “La Bestia”, desde Tenosique en Tabasco o de Tapachula Chiapas, por el trayecto de 1900 kilómetros hasta Piedras Negras, Coahuila; Ciudad Juárez, Chihuahua; Agua Prieta o el Sásabe en Sonora. En el trayecto, que dura tres semanas los emigrantes son acechados y extorsionados por los diversos cárteles de las drogas o pandillas, según el diario mexicano Reforma.
Otra forma de extorsión, es la esclavitud sexual, que también se da en la calle no menos célebre que el tren “La Bestia”; es la famosa calle Sullivan, en la ciudad de México, la calle lleva el apellido de un empresario estadounidense que en el gobierno de Manuel González hacia 1884, recibió la concesión para construir el ferrocarril México-Nuevo Laredo; en aquellos años se instalaron muchos hoteles en esa zona para albergar a los pasajeros, pero con el paso del tiempo esos hoteles, al ya no haber pasajeros, se transformaron en hoteles de paso albergando a sexoservidoras, tal es el caso de este lugar connotado relacionado con la trata de mujeres en la calle de Sullivan, en donde pocas mujeres ejercen libremente el oficio más antiguo del mundo, la prostitución, también se prostituyen transexuales, pero la trata de blancas se da a través de agencias o supuestas asociaciones, creadas para disfrazar la trata, y son prostituidas generando ganancias exorbitantes para los grupos o caciques que las controlan o regentan a través de sus organizaciones criminales.
Citaré a unas de las famosas controladoras: Alejandra Gil, con una organización fantasma para supuestamente apoyar a sexoservidoras, llamada APROASE A.C. Sin embargo, recién fue detenida en la ciudad de México, Gil llegó a regentar algunas de las esquinas más productivas en la calle Sullivan, teniendo bajo su influencia a decenas de sexoservidoras; otros de los que se mencionan como los más influyentes regenteadores son: Reynaldo Esquivel (detenido) y su esposa Tania Rojas, que atraían a sus víctimas, o su modus operandi era a través de una organización musical que hacían llamar el KONKISTADOR; otro de los más renombrados es Alejandro Orosco hijo de un famoso luchador, otro más que también controlaba a decenas de sexoservidoras, obteniendo ganancias -según Zócalo de Saltillo del día 18 febrero de 2014- entre 500 mil y 700 mil pesos diarios.
Gracias a la participación de la sociedad Civil se han ido creando asociaciones que están atacando este antiquísimo y gravísimo problema de la explotación sexual, tal es el caso en México de la asociación que preside Rosi Orosco UNIDOS CONTRA LA TRATA, A.C., que recién estuvo en un foro en Saltillo celebrado en la facultad de Jurisprudencia de la UAC; y a nivel internacional: United Nations Office on Drugs and Crime (UNODC) International Organization for Migratión (IOM), entre otras importantes organizaciones creadas para combatir la trata de personas.
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