Crisis en el clero católico

Fernando Ramírez López.

A escasas horas de que en un marco de fastuosidad mayor a cualquier monarca terrenal, el Papa Francisco concedió el nivel de santos a San Juan Pablo II y a San Juan XXIII. Desde las praderas argentinas hasta más allá del Río Bravo, millones de creyentes católicos celebraron este hecho inusual. Y al mismo tiempo que el feliz acontecimiento, avanzaba ante el vitral crítico de la historia puesto a contraluz hechos como que San Juan Pablo II, fue amigo personal del demoniaco Marcial Maciel y que Benedicto XVI fue desde 1981 el jefe de la inquisición, es decir cabeza de la “sagrada congregación para la doctrina de la fe”, sagrada congregación romana y universal inquisición o sagrada congregación del Santo Oficio, más la certeza de que perteneció a las juventudes nazis de Adolfo Hitler.

Pero el hecho de la crisis no es sólo del clero católico, sino del catolicismo “in situ”, cual fenómeno que se viene dando sobre todo en América Latina, España e Italia, desde hace más de un siglo, con la penetración sigilosa y sufrida de otras denominaciones cristianas que han padecido la persecución ideológica y la agresión física, por una fe que aparentemente es la misma, pero que se distancia del catolicismo por hechos descritos por Max Weber en su texto “La Ética Protestante y el Espíritu del Capitalismo”. Es decir los vectores que diferencian de su actuación a las denominadas religiones “evangélicas” son la aceptación de un solo Dios, con lo cual se excluye a santos y vírgenes, le dan la espalda al alcoholismo, el núcleo familiar y el trabajo son los sustentos de su diario vivir, apartados del liberalismo conductual católico.

Por tal situación la penetración norteame- ricana con predicadores en el mundo latino, las denominaciones bautista, metodista, anglicana, griegos ortodoxos, pentecostales, mormones y testigos de Jehová entre otros, han ido cambiando paulatinamente la composición religiosa de los países hispanos. En México al menos un 30 por ciento de la población es evangélica más otro 20 % de ateos y agnósticos significa que este país, a hoy día está en la línea divisoria de desplazar en su carácter de mayoritaria a la religión católica. Si a esto le sumamos el celibato como connotación inamovible de los sacerdotes, ha generado una reacción contra natura, la cual ha desatado la pederastia, homosexualidad y lesbianismo entre el sacerdocio.

Si a lo anterior agregamos que la concentración económica del mundo católico, ha llevado a una dudosa conducta financiera del Vaticano, además podemos saber y entender la quiebra de su banca financiera. De igual forma la movilidad de grupos de monjas que aspiran al sacerdocio, el Papa Francisco ha visto ante sí un cisma, porque sabe que esta manifestación proviene de los Estados Unidos de Norteamérica, país que en lo relativo a aportaciones económicas al Vaticano es el más importante, cabe aclarar que ya cuentan al menos con 23 sacerdotisas activas.

En el caso mexicano adopta particulares tonalidades y lo mismo el también llamado “protestantismo” penetra en los estados fronterizos a la Unión Americana y lo hace también en la selva chiapaneca, donde se produjo el levantamiento armado del EZLN en 1994, lo hace también en Guerrero estado donde la guerrilla desde hace tiempo está instalada, actúa en Michoacán donde movimientos como la “Santa Jerusalén” surgen en medio del conflicto delictivo en esa entidad.

¿Hacia dónde van el clero y el catolicismo como doctrina? Si desea permanecer y buscar su actualización y alejarse de los caminos perversos de Belial, la respuesta es sencilla apegarse a los principios de su fe cristiana.

Por ejemplo, en Torreón, Coahuila existe un sacerdote de nombre José Rodríguez Tenorio, apodado “El Padre Grillo”, es un elocuente representante sacerdotal de los que no deben existir en el mundo espiritual católico, lo mismo bautiza hijos de hombres prominentes fuera de matrimonio, que realiza cualquier actividad sacerdotal a cambio de fuertes cantidades de dinero, siempre dentro del PRI como partido que tiene el poder en esa entidad. Esta semana recibió trescientos mil pesos del gobierno municipal para iniciar la construcción de las estatuas de los santos erigidos y la promesa de construirle un teleférico hasta su templo ubicado en el Cerro de las Noas. Nos preguntamos, los católicos que no tienen agua, ni seguridad en sus colonias ¿qué se hace por ellos?, la sed, el hambre y la delincuencia los siguen atosigando, son seres humanos con sed de justicia y atención a sus necesidades.

Este hombre se beneficia de su poder eclesiástico apoyando a los candidatos del PRI elección tras elección, en pocas palabras vende su Dios al mejor postor, triste caso, pero así es en este lugar y en muchos otros del mundo católico. Lástima, por eso han perdido credibilidad.

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