Tardes de otoño
Por Reginaldo Chapa.
Otra vez las tardes de otoño se cubren de luto
¡Ayotzinapan! El grito que quedó atrapado
y murió desnudo, masacrado
Otra vez las tardes de otoño
respiran a fuerza, sin poder comprender
tanto silencio de quienes como cómplices en contubernio
callan, aparentando dolor
¿Dónde está tu dolor pueblo sojuzgado?
que a fuerza de sobornos, disimulos y autoengaños sobrevives…
¡artífice de tu propia mediocridad!
¡Dónde tu dolor pueblo engañado!
que Ayotzinapa te parece insulsa palabra
¿Acaso perdiste tu guerrero valor que lucieron tus ancestros?
¿Qué tus hidalgos del pasado no sabes emular?
Hoy, otra vez, como tantas otras, solitarias, mustias y acongojadas
Las tardes otoñales cubren de luto su pesar… |