Juan Antonio de la Fuente…
defensor de la soberanía de Coahuila en 1856

Rigoberto Losoya Reyes.

Tomando como referencia el excelente trabajo de investigación del ex magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Coahuila, el Maestro José Fuentes García, (2010), me gustaría compartir con los lectores algunos datos históricos interesantes.

Con el fin de hacer frente a la dictadura del general don Antonio López de Santa Anna, Santiago Vidaurri invitó a los estados de Coahuila y Tamaulipas para que se unieran al de Nuevo León y formar un nuevo gobierno que les permitirá hacer frente contra las depredaciones de los diferentes grupos “bárbaros” que asolaban la región norte amparándose en la ideología política del Plan Restaurador.

Bajo esta misma idea, Vidaurri emitió un Decreto el 19 de febrero de 1856, en el cual sostenía que era voluntad de los pueblos que Coahuila pasara a formar parte de Nuevo Léon, a excepción de las poblaciones de Saltillo y Ramos Arizpe, que se oponían. Esta resolución fue turnada al Congreso Constituyente, sin embargo como éste acordó reservar el asunto para después, el gobierno de Comonfort acordó suspender el Decreto de Vidaurri y regresar la soberanía a Coahuila y nombrar como gobernador al licenciado Santiago Rodríguez.

Este escabroso asunto provocó el enfrentamiento entre el gobierno nacional y Santiago Vidaurri quien ya se había consolidado como el cacique de Nuevo León. Finalmente el gobierno federal reconoció la fusión de Coahuila y Nuevo León, situación jurídica que sería apoyada por los ciudadanos mediante una votación de 4,056 votos a favor contra 260. Después el mismo Congreso Constituyente ratificará el nuevo estado, lo que demostró el control e influencia del lampacéense.

Debe señalarse que las mismas localidades de Saltillo y Ramos Arizpe insistieron en su oposición a esta unión de los estados, en 1856. El 30 de mayo de 1856, el licenciado Juan Antonio de la Fuente defendió con argumentos válidos el despojo de la soberanía del estado de Coahuila, sin embargo su defensa no valió mucho para la comisión de División Territorial, pues el 26 de noviembre se incluyó en el Dictamen a Coahuila y Nuevo León como un solo estado.

Previa promesa otorgada por Vidaurri, entregó el gobierno al licenciado Juan Nepomuceno de la Garza y Evia, quien convocó un nuevo Congreso Constituyente para expedir una nueva Constitución que rigiera los nuevos destinos del naciente estado de Nuevo Léon y Coahuila.

La nueva constitución agudizó algunas heridas con la iglesia en Nuevo León, pues el Obispo Francisco de P. Verea, prohibió terminantemente los sacramentos a quienes la hubieren jurado y su entrada al templo, y se negó a repicar las campanas el día de su publicación. El gobernador Vidaurri arrestó al obispo y lo desterró, estableciendo muy claro quién era la suprema autoridad en el norte de Coahuila y Nuevo Léon.

La Dra. María Candelaria Valdés Silva, cita textualmente sobre Juan Antonio de la Fuente:

“Su integridad y compromiso dejó huella indiscutible de grandeza humana. Fue esencialmente un hombre de leyes. Su contribución debe apreciarse más que nada en su obra legislativa y diplomática. La experiencia en el Congreso Constituyente dejó muestra de conciencia y dignidad: se opuso con firmeza al despojo de los derechos de los coahuilenses con la anexión de la entidad a la de Nuevo León. También adquirió relevancia al argumentar a favor de la ampliación de las garantías de la libertad individual en la Constitución. Garantías que pasan, nada más y nada menos, por: la igualdad, la inviolabilidad de la propiedad privada, la seguridad, la libertad de asociación, de prensa, de pensamiento, de circulación, de enseñanza, de ocupación y por el derecho de petición y la garantía de legalidad. (2)

Notas:
(1) Fuentes García, José (2010). Coahuila Historia de las Instituciones Jurídicas. UNAM-SENADO DE LA REPUBLICA. México.
(2) Valdés Silva, María C. Dra. Juan Antonio de la Fuente: Constructor del destino perdurable de la patria. Revista de Divulgación Científica. tp://www.posgradoeinvestigacion.uadec.mx/CienciaCierta/CC35/1.html#.Vly1f_kveM8