El mexicano es muy ignorante
respecto a su percepción sobre el país
En un estudio en 28 países, el pueblo de México resultó ser el más ignorante respecto a la percepción sobre su propio país, tanto en cuestiones estadísticas como en la clase de gente que nos gobierna. La culpa ciertamente no es solo del gobierno y de los medios de comunicación que nos atiborra de banalidades y verdades a medias, también es nuestra por ser tan pusilánimes. |
Augusto Hugo Peña Delgadillo.
México tiene el nivel más alto de ignorancia de la brecha entre percepciones y realidades de su población, entre 28 países incluidos en un sondeo internacional de Ipsos MORI en su proyecto Peligros de percepción 2015. Este estudio demostró que el mexicano es –entre 28 países estudiados- el más ignorante respecto a lo que percibe sobre datos estadísticos de su propio país, cosa que justifica el por qué somos un pueblo carente de todo aquello que es necesario e imprescindible para resolver satisfactoriamente los problemas nacionales y personales inherentes al bienestar social, económico y político.
Los pueblos ignorantes –se ha demostrado a lo largo de la historia universal- son víctimas de sus gobernantes como es el caso específico de México y de los mexicanos. ¿A qué se debe tal ignorancia? Hay muchos factores que inciden en este fenómeno. Uno.- Es la propia pusilanimidad de las mayorías, las que por la causa que fuere no se aplican a saber ni a entender los porqués de lo que nos sucede y en muchos casos le achacamos nuestras cuitas y desgracias a la Divina Providencia, cuando la realidad nos dice que nuestros problemas somos precisamente nosotros por ignorar nuestros derechos, los que de hecho tenemos según nuestra Constitución, pero que no tenemos fácil acceso a ejercerlos porque a quienes nos gobiernan les conviene mantenernos en la ignorancia para consolidar el poder y entre otras cosas enriquecerse a nuestra costa.
Otro factor por lo que los mexicanos somos ignorantes y no hacemos uso de nuestras facultades y derechos humanas y constitucionales es, porque somos engañados por medio de la prensa, la radio y la TV; que, por un lado, nos atiborra de entretenimientos nimios y baladíes y, por el otro, nos ofrece noticias con mentiras y verdades a medias; todas ellas promovidas por nuestras autoridades y pagadas con nuestro propio dinero porque hacen uso y abuso del poder discrecional para mantenernos dóciles y sumisos ante los malos manejos de la gobernabilidad. Todo ello para poder abusar del pueblo y hacer mal uso de nuestros bienes nacionales, facultades y riquezas de nuestro país, con el único fin de repartirlas en beneficio de sus cómplices, los oligarcas y plutócratas de la clase política y de la alta burocracia.
México en el lapso 1940-1982 mal que bien iba creciendo a un ritmo económico de cerca del 7% anual y tanto la clase empresarial como los trabajadores y campesinos disfrutaban de ese crecimiento en una forma justa y equitativa; pero hubo un día: el 1º de diciembre de 1982, en que llegaron los peores entre los mexicanos a hacerse cargo de nuestro destino, me refiero a Miguel de La Madrid y Carlos Salinas de Gortari, quienes por ser servidores en primera y última instancia del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial, nos impusieron un nuevo estilo de mal gobierno que ha permanecido incólume hasta nuestros días, con Enrique Peña Nieto al frente.
Algo cierto es que de 1940 y hasta el 1º de diciembre de 1982 no tuvimos los mejores gobiernos del mundo; pero, a pesar de ello eran ciertamente estadistas quienes nos gobernaron y por ello lograron catapultar a México y a los mexicanos a estadios de bienestar nunca antes vistos ni disfrutados.
Sin embargo en los últimos 33 años se han sucedido uno tras otro, los peores gobiernos encabezados por los peores mexicanos, los que sin recato ni decencia alguna, ya no dijésemos patriotismo, han hecho mal uso del poder que les confiere el gobierno desde la presidencia hasta los puestos burocráticos más modestos para abusar del pueblo, para robarnos, engañarnos y mantenernos en la ignorancia y con ello en la miseria, de ahí deriva el por qué en un estudio internacional entre 28 naciones, los mexicanos seamos los más ignorantes de todo aquello que debemos percibir sobre lo que acontece en nuestro país, comenzando con las estadísticas reales y con la percepción plena, clara y diáfana de la pésima clase de gente que nos gobierna.
La culpa ciertamente, no es solo del gobierno y de los medios de comunicación vendidos al mejor postor sino nuestra también, por pusilánimes. o, ¿usted qué opina, apreciable lector?
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