FUMADORA

Oliverio Ascascius.

Dime mujer,
¿por qué fumas tanto?
¿Quién tiene necesidad de quién?
¿El cigarrillo de ti o tú de estarlo fumando?

Dime mujer,
¿por qué fumas tanto?
si la vida es breve
y tú, te la estás abreviando.

¿Acaso pretendes
como según lo entiendes
que el humo te llegue
hasta el fondo del alma?

¿O es por estar sola
llorosa o encadenada
y crees que un cigarrillo
te deja liberada?

De veras mujer,
dime porque fumas tanto,
¿es por tú vacío
o es por el espanto?
¿Es por imitación
o es por tú llanto?

¿Es acaso para absorber
un poco de la vida,
que así no son más que quimeras?
¿O es por el contrario
para estar lejos de ella
y sientes en el falso placer
el fugaz encanto?

¿Es por ventura
para diluir en humo
lo que no pudiste afrontar despierta?
¿O es porque añoras
una vida perdida que se te esfumó
sin que te dieras cuenta?

¿Fumas porque crees
que te ves bonita,
galante, interesante?
¿O porque estás hecha de humo
y fumar te hace semejante?

Dime la verdad
de porque fumas tanto,
¿fumas simplemente
porque te gusta
como dicen los tontos
o por tontita señorita, fumas tanto?

La verdad es que no lo entiendo,
porque la que fuma y fuma
y se la pasa fumando...
no merece que la besen
en la boca
sino con espanto.