Qué es lo que hace a un gran seleccionador de talento?

Por Fernando Fuentes García.
Escultor.

Quiero destacar que el título de este artículo hace referencia al talento en la producción de artes visuales, no al talento requerido para las empresas. Pero ¿Qué es el talento? es el patrón inconsciente, observable y confiable de cómo piensa, siente y se comporta el artista. Es el conjunto de habilidades, conocimientos, experiencia, pasión y desempeño que el artista tiene que aprender a desatar y a potenciar para tener éxito. Mi intensión en este artículo es simplemente aportar algunos TIPS que puedan ayudarle a evaluar el talento de un artista.

Primero. Una Breve Aportación a la Intención de su Colección.

Todo el mundo se deslumbra por los exorbitantes precios a los que se venden las obras de arte en las casas de subastas internacionales. Un mercado del arte que en ocasiones exhibe prácticas cuestionables. En el que los jugadores son unos cuantos multimillonarios, unas cuantas casas de subasta y un puñado de artistas (supuestamente los mejores), que gana enormes cantidades de dinero y parecen dominar los campos en los que participan.

Pero en esta hipnosis, nadie se cuestiona si el coleccionismo nacional o la adquisición de obra con fines mercantiles, está verdaderamente apoyando al mercado del arte en México. Yo le hago una mejor pregunta: ¿De qué forma su pasión por el arte o su colección está ayudando al mercado del arte en su comunidad?

Ya conoce el destino de la colección de arte del recién fallecido empresario Mexicano, el Sr. Lorenzo Zambrano? Una colección que pudo haber sido la pauta para que el Museo MARCO pudiera transformar su visión hacia el desarrollo de una institución cultural de nivel internacional como el Art Institute of Chicago o el Museum of Fine Arts Boston. ¿No cree que Monterrey se lo merezca?

Tal vez hubiera sido necesario que el coleccionista actuara de manera similar al multimillonario doctor Albert C. Barnes, que gracias a su testamento que destinaba el control y administración de su colección en la galería de Lower Merion a fideicomisarios, se pudo consolidar lo que es hoy el edificio de la Fundación Barnes en Filadelfia. Pero, ¿Nuestra sociedad cultural en donde quedó? ¿Por qué no se expresó respecto a esta colección?

¡Usted puede transformarse en un LÍDER que ayude a crear un cambio cultural en nuestra industria! Lo invito a dar lectura a la entrega número dos de esta serie titulada “Tan cerca el ejemplo y tan lejos de entender el mercado del arte.” Haga contacto con un servidor para platicar al respecto.
Segundo. Al Tema en Cuestión.

Ya sea que busque rentabilidad, valor social o valor espiritual, el adquirente tiene que incrementar su conocimiento, cuestionar y ampliar las fuentes de información y en definitiva voltear a ver a los productores. En una era en la que las opciones son abrumadoras, usted tiene que aprender a ser un gran seleccionador de talento.

Es necesario aprender a ser intuitivo para visualizar el talento del creador, su pasión, entender cómo su pasado lo ha forjado, percatarse de sus sueños y visualizar su futuro éxito. Hágase la pregunta siguiente ¿En su trayecto ha demostrado la clase de comportamiento que lo llevará al éxito? Esta es una pregunta más profunda comparada con ¿Cuenta con estudios o premios? ¿Cuántas exposiciones tiene? ¿Es lo más nuevo? ¿Es lo mejor?

Si lo que define su criterio de adquisición es el aspecto mercantil, quizás lo que debería de preguntar, al igual que el SAT es ¿qué otra actividad realiza para sustentar sus necesidades? Y si realiza más de una ¿En qué actividad ocupa la mayor cantidad de tiempo? The Internal Revenue Service en los Estados Unidos de Norteamérica, no considera a un artista como profesional, a menos de que produzca utilidades de la venta de sus obras en 3 de 5 años.

¡Producir no lo es todo! El reto para el productor del siglo XXI será desarrollar una propuesta de valor única, segmentar, establecer estrategias integradas de comunicación y nuevos sistemas de venta sustentables. Y no le hablo solamente de un catálogo en una página electrónica o de aparecer en el Facebook o de tener numerosas exposiciones o de exponer eventualmente en una exposición comercial internacional, sea del prestigio que sea, ya que esto no significa que el artista o incluso la galería, adquieran por osmosis gran demanda o prestigio. ¡Que no lo sorprendan! Hoy en día hasta las exhibiciones se venden.

¿Cuenta con una visión estratégica y aplica algo de mercadotecnia? Esta es una pregunta clave que le brindará mayor certeza de su capacidad para desarrollar un sólido mercado sustentable en toda su carrera y no estar a la merced de su competencia, de un mercado que se guía por modas, del apoyo de un galerista, de una crítica que le favorezca o a la espera de un coleccionista que verdaderamente lo impulse. Cuestione su visión del mercado, su filosofía de trabajo, su razón de ser y cómo piensa llegar al éxito.

El mantra de contratación de Microsoft dice: “Contrata a personas inteligentes, que puedan pensar.” ¿Qué es lo que esto quiere decir? Que el creador hará naturalmente lo que tiene que hacer para agregar valor a su trabajo con una mínima interferencia o dirección. Y para usted como coleccionista o adquirente significa UN VALOR SEGURO en el cual invertirá poco, si su visión es desarrollar e impulsar a los artistas de su colección para lograr aumentar el margen de utilidad de su inversión, al igual que lo hiciera el millonario Charles Saatchi con los jóvenes artistas británicos en 1988.

Pero, si las ventas o la demanda fueran todo lo que define a un gran artista, yo le pregunto entonces ¿En qué posición quedaría Vincent van Gogh? No deje de considerar el trabajo artístico del productor y su místico proceso creativo. Quizás aquí aplicaría la regla de Malcom Gladwell: “La verdadera grandeza comienza después de 10,000 horas de arduo trabajo en un periodo de 10 años.” Es decir que nadie hace algo por más de 10,000 horas en un periodo de 10 años a menos que lo desee, lo pueda hacer y sea su pasión. Aplicado a un artista busque dedicación, consistencia y originalidad en su producción. Hoy en día, ser un Leonardo da Vinci sería algo excepcional, verdaderamente difícil y poco lucrativo.

Y al igual que con el artista, lo invito a evaluar también a su proveedor galerista. Cuestione su profesionalidad, verifique señales de buenas finanzas, analice su enfoque estratégico, los motivos para posicionarse en el mercado internacional, su propuesta de valor, su historia, su originalidad, indague sobre su cartera de coleccionistas, críticos y museos. Investigue sobre su experiencia en manejar y crear valor a los artistas, analice su estructura organizacional y su reconocimiento.

Este es el último artículo de una serie de tres, que buscan expandir su conocimiento y pensamiento sobre el Mercado del Arte en México, comenzando por “El secreto para coleccionar arte” y siguiendo con “Tan cerca el ejemplo y tan lejos de entender el mercado del arte”. Esta serie es también un llamado a los productores de arte, galerías y representantes de artistas a cambiar nuestra visión y a tomar acción para crear una industria fuerte.

Sobre el Autor

El autor es un escultor dedicado profesionalmente a la creación de escultura en bronce, con una trayectoria de más de 14 años. Su obra ha sido representada por distintas galerías de arte y ha sido expuesta de manera individual y colectiva en galerías, museos y centros culturales de varias ciudades de México.

fuentesgarciaf@yahoo.com.mx