México está viviendo sus peores días
Augusto Hugo Peña Delgadillo.
Lorenzo Meyer Cossío, uno de los politólogos y analistas sociopolíticos más connotados de México, en una entrevista con sin embargo dijo que nuestro país vive uno de los peores momentos de su historia. Un momento crítico, que por lo pronto lo mantiene en una persistente mediocridad, y es un pueblo agraviado por la impunidad, la violencia y la inseguridad.
Dice: “Los mexicanos son el combustible derramado, que sólo espera una chispa para prenderse. Viven en un estado latente que en cualquier momento puede explotar. Aunque las elecciones del 7 de junio no son esa coyuntura propicia. Sin embargo, las presidenciales del 2018 podrían ser el pretexto para encender la mecha.”
“Los líderes están ahí, el agravio, el dolor y la desesperanza también. El caminar de un país sin rumbo, bajo el liderazgo de un presidente fabricado por TELEVISA, quien perdió el timón el día que estalló el escándalo de Iguala/Ayotzinapa y sus 43 normalistas desaparecidos.”
“Peña Nieto ya no tiene ese cascarón que lo protegía, el teatro se le cayó. El sistema está tambaleante.” Afirma que: “Los mexicanos requieren organización y hacer suyas las tragedias humanas que hoy están dispersas y que aún no logran conectarse para armar un frente común.”
A pesar que Lorenzo Meyer es claro, veraz y contundente en su entrevista, sólo tocó puntos nodales de nuestro acontecer porque la realidad es peor aún. Tenemos una serie de funcionarios públicos de alto y mediano niveles que son unos soberanos inútiles y azas ladronzuelos que viven del erario y de los más pobres, son gente procaz que si fuese necesario para subsistir dentro del presupuesto nacional serían capaces de vender a sus propias madres. Pedro Joaquín Coldwell, Emilio Chuayffet, Mercedes Juan López, Jesús Murillo Karam, Luis Videgaray, Miguel Ángel Osorio Chong y el propio Peña Nieto entre otros muchos, considero, son unos de ellos.
México y los mexicanos, como sugiere Meyer Cossío, necesitan organizarse muy por aparte de lo que es el gobierno. Requieren de conjuntar voluntades y anhelos para sacudirse la lacra que está representada no sólo en la administración pública como son los gobiernos de los tres niveles sino que hay que organizar a los otros dos poderes, al legislativo y al judicial, los que en estos momentos están bajo el mando ineluctable de quienes han echado manos de las policías y el ejército para enfrentarlos al propio pueblo y así poder seguir manteniendo el control de nuestras riquezas para darles usos ajenos a la legalidad y a la constitucionalidad.
El junio 5 del 2015 Gobernación echó a andar un operativo militar para controlar las elecciones intermedias y con ello garantizar la permanencia de quienes nos mal gobiernan.
La cuestión es que el país se encuentra al borde de incendiarse, el gobierno lo sabe y teme caer, no tanto porque aman a México al que dicen servir sino porque perderán todo aquello que les ha acarreado riquezas mal habidas entrando en colusión perversa con empresarios, sobre todo empresarios grandes que inflan las obras, compran influencias, evaden y eluden al fisco, y para repartirse el remanente del fraude y robo a la nación entre funcionarios públicos de toda laya y ellos, y así como mencioné a políticos y funcionarios públicos capaces de vender a sus propias madres, también hay empresarios capaces de comprarles las madres, me refiero a los dos Claudio X. Gonzáles, Germán Larrea, Alberto Bailleres, Eduardo Tricio Haro, Lorenzo Servitje y Olegario Vázquez Raña entre otros muchos, sin olvidar a comerciantes y financieros como los de SORIANA y MONEX, quienes a cambio de algunos cientos de millones de pesos se coludieron con Peña Nieto para robarle sus anhelos y voluntades al pueblo de México en las elecciones del 2012. O, ¿usted qué opina, apreciable lector?
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