El Rey León

Por Salvador Alcázar Aguilar.

No es una fábula, ni un cuento, tampoco una película; si fuera fábula sería algo muy común.

Lo mejor sería conocer la selva entera con todos sus animales, incluyendo a los racionales.

En el cortejo, la leona en brama muerde al Rey León, éste con su harén logra reproducirse en toda la manada; La leona caza y consigue la comida para toda la prole y quien come primero es el Rey León.

Luego las jerarquías se imponen, primero los más fuertes, posteriormente los más débiles y los cachorros; para conseguir su objetivo uno la cansa y otro la alcanza.

El rey de la selva: el león puede perder todo menos la estirpe, los genes de un poderoso león se pasan de generación en generación.

El Rey León pasa su tiempo descansando y educando con juegos rudos, entre mordidas y zarpazos, luego el cachorro debe imponer su carácter si quiere sobrevivir o comer.

Si un león me dijera que un león no tiene su propia estimación o dignidad, que no posee una gran imagen acostado o parado, el león es el león.

Que además tiene gran vida social con su clan. Yo creo sinceramente que la mayoría del clan son muy respetuosos del Rey, por eso cuando siento los zarpazos de mis cachorros, veo con alegría que no es en vano la educación en lo social, en lo político, en lo religioso o como lo es la naturaleza por quien sienten más respeto.

Sólo hay algo que no vas a ver nunca en un león: educar para temer, para esconderse, para ocultarse, para no enfrentar lo que venga; el león es poderoso porque no tiene miedo y es su legado.

No tengas miedo, claro que existe, pero el miedo mata.

Lo que me impresiona de los felinos, gatos, perros, leones, es como saben qué les conviene, y desarrollan todo con una puntualidad y aseo increíble y paciencia que raya en lo ritual, pero lo hacen. Aquí en mi casa le conocemos como norma, protocolo, en fin.

La vida está llena de éstos, y recuerda el león no es como lo pintan.