 ¿Y la marihuana apá?
Fidencio Treviño Maldonado.
El problema de la legalización o para que no se escuche tan feo “despenalizaciòn” de la mota, de doña Juanita, de la hierba verde, y otros nombres que toma la Cannabis, Cáñamo, o sea la Marihuana, está en boga con nuestras autoridades y a todos los niveles la traen a debate, incluyendo la misma iglesia. La despenalización de ésta, es decir legalizarla y regular su siembra, distribución, venta y control de consumo, como se lleva a cabo en otros países y Estados de los USA. En un país como el nuestro, lleno de irrealidades limitadas y surrealidades ilimitadas, con dogmas religiosos y con estigmas pegados a la conciencia como tatuaje, será muy, pero muy difícil que se adopte o tome la medida para despenalizarla o inclusive usarla para métodos curativos.
Para la sociedad mexicana, el fumar esta hierba verde es ser un marihuano, y tener ese concepto de una persona es peor que el sida, sin embargo el alcohol que en nuestro país esta regulado y hasta paga impuestos, causa más desgracias que las mismas guerras del narco y, en el mundo, más muertes que las guerras mundiales, esto agregando el consumo de tabaco que también al igual que las bebidas alcohólicas van a la alza en nuestra sociedad tan religiosa y puritana.
Aquí más allá de que la Pavorosa Corte de Justicia de la Nación estudie si se despenaliza o sea se regulariza la venta y desde luego el consumo, los asuntos sobre este tema serían muchos y algunos son estos: uno, los narcos dejarían de pelear al menos por la producción, distribución,venta, contrabando, entre otras cosas, en el caso de la marihuana; sin embargo seguirán con otras drogas, desde luego de más alto costo, es decir no se terminaría el problema de los estupefacientes al menos si con la mota, que de las llamadas drogas es la última en costos para los que la consumen. Dos, la clase gobernante se beneficiaría con el impuesto a la venta de este producto, que desde luego sería muy alto y conociendo a nuestros políticos no dude usted que a ellos en sus ranchos se les diera la concesión de sembrar para venderle al distribuidor legal. La recaudación sobre el impuesto en la venta de la mota es alto, tomado como ejemplo estados de la Unión Americana, como Washington y California, con varios millones de dólares recaudados por día, semana y mes. Tres, nuestra “justicia” en muchos casos será la perdedora, ya que aquella amenaza por parte de miles de malos elementos en las diferentes corporaciones de que -sino se mocha le clavamos en su casa, en su vehículo, en sus bolsillos unas dosis de mota, ¿cómo la ve?- o como costumbre presentar a miles de hombres y mujeres ante los medios con la clásica mesita y muchas bolitas con la hierba verde bien acomodadas incluyendo a veces algo de dinero y alguna arma de fuego. O bajo la misma amenaza cobrarles antes de llevarlos al M.P. a los detenidos, muchas veces con la complacencia de estos y malos abogados en contubernio con los mismos M.P. y malos elementos de algunas corporaciones, exigirles dinero a sus familiares para no consignarlos, esto cuando son distribuidores de baja categoría de doña Juanita.
Estas y muchas más serían sin duda las atrocidades, bondades, pérdidas, ganancias y resultados en la despenalización, regularización o libre consumo de doña Juanita, que también ahora le ven poderes curativos o medicinales, cosa que como se señala al principio de este artículo se ve muy dificil porque nuestro país está hecho de circunstancias, labrado de casualidades y sometido a caprichos de la clase política y no a las leyes, en donde los resultados son los que convienen al poder hegemónico y no al pueblo, como ha quedado demostrado.
No dude usted que algún pendejo de nuestros representantes pronto le de entrada a una nueva comisión, otra más de las más de 300 que tenemos, o que lleven a cabo una nueva reforma, en este país enfermo de "reformitis" y que arreglen y parchen a la ya recontra violada Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, con que si se pudo !pero!... siempre no se debe. En mi nada contable y si muy ilusa (pendeja ) opinión, digo, pregono, difundo y opino, si el alcohol, el tabaco, los refrescos con un chingo de azúcar y frituras con un montón de sales y aceites se comercializan, ¿Por qué la Mota no..? o como la prostitución, está revisada, ordenada, clasificada, permitida, etc., pero no legalizada.. ¡de ese pelo...! en donde sólo nos queda gritar ! No te acabes México ..!
kinotre@hotmail.com |
