¿Miedo al populismo?

Sócrates Campos Lemus.

Mientras en el mundo están los grupos de poder interesados en resolver el caso de Siria y del movimiento Yihadista, el presidente, Peña Nieto, “instruye a los políticos de nivel mundial sobre la importancia de detener el gravísimo peligro del populismo de izquierda y de derecha”. ¿Usted puede entender esto? Es como si la preocupación del aislamiento de la sociedad del actual grupo en el poder y la rápida pérdida de credibilidad y de confianza se centrara en el nuevo poder que arropa al Peje Lagarto, Andrés Manuel López Obrador. Creo que el asesor para este encontronazo es el ex presidente Fox que vive con esa espinita clavada en donde más le duele, no sé si es en el corazón o en el trasero, pero la espinita sigue. Él, cree que no fue motivo suficiente para el enorme crecimiento del Peje, cuando en forma absurda instrumentaron el famoso complot para exhibirle por medio del Señor de las Ligas y de sus empleados que gastaban fortunas en los casinos más caros de las Vegas.

El “Populismo” al que Peña está emperrado en destruir y lleva a las altas tribunas su descripción, no tiene ni pies ni cabeza, eso de que “son los que dividen a un país aprovechando las crisis”, es tan ambiguo como el creer que los cambios y los malestares sociales son producto simplemente del capricho de algún grupito perverso que quiere desestabilizar al país. La realidad es que la gente no tiene ni confianza ni mantiene credibilidad en las acciones del gobierno, nadie cree que pronto saldremos de la terrible crisis de pobreza en la que estamos, nadie piensa que pronto tendremos la solución a la desocupación, miseria, marginación, educación, salud y vivienda. Todos sabemos que lo que se ha hecho es imponer una dictadura encabezada por las cúpulas de los partidos, mejor dicho, legalizada por esas mafias, ya que aparentan las consultas o el favor de la mayoría electoral, cuando, solamente, imponen condiciones que empeoran la pobreza y marginación de todos.

Ellos, los hombres del poder, son los que determinan el uso y abuso del presupuesto público, su control, y sobre todo, la utilización que hacen en el poder para utilizar los recursos y fondos públicos para favorecer a un grupo político y empresarial ligado al poder, para que se realicen los negocios privados, con los cuales se han venido enriqueciendo como grupo y en forma individual, para fortalecer el llamado grupo “Atlacomulco” que se confronta con los demás grupos en el poder, y por ello, las divisiones y disputas de poder con el grupo Monterrey. Cuestión de contratos y ganancias…

Si el presidente considera que con sus discursos parará la aceptación de las gentes en favor del Peje, está mal, anda picando chueco, si es que se trata de picar. En realidad, cada vez que ataca directa o indirectamente al Peje con eso del Populismo, lo que hace es abonar el campo para que crezca; esto mismo le sucedió a Fox cuando prepararon los golpes que se dieron con espectacularidad por medio de los medios televisivos y de comunicación, total, en vez de destruirle, la gente se volcó en su favor y hay que decirlo, ganó el proceso electoral contra Felipe Calderón que le fuera robado en forma cínica y brutal. Hoy, no vemos en la Caballada que está muy flaquita y jodida, miembros fortalecidos que puedan hacer un contrapeso al Peje, al contrario, el que salga saldrá con muchos enemigos y sobre todo cargando un gran peso en corruptelas y desprestigios entre los ex gobernadores y miembros del gabinete actual. Ahora, las alianzas políticas cupulares no darán la fuerza necesaria para evitar el ascenso del Peje, y esto, sin duda alguna, es la máxima preocupación del presidente y de su equipo.

La realidad es que el Peje no cuenta con los apoyos de los norteamericanos y menos de los jefes de las mafias nacionales, y puede contar con algunos empresarios y banqueros que quieren sostener sus canonjías, sabemos que cuenta con importantes apoyos empresariales aún en los estados tan jodidos como Oaxaca, donde los empresarios más desprestigiados están a su lado y forman parte de sus gentes de confianza. Por eso ha perdido confianza y credibilidad en esos sitios donde, supuestamente, por la pobreza y marginación, debería tener el mayor número de seguidores.

Si algún favor le hace el presidente al Peje es seguirlo jodiendo, él no tiene credibilidad ni cuenta con la confianza de la gente, así que en las condiciones en que más joden sus acciones políticas a la gente del pueblo, a la mayoría, solamente aumenta el apoyo en favor del Peje, así que éste se deja querer a pesar de que lo siguen jodiendo. Entre más lo jodan, más crece. No se puede cortar las piernas a los demás para ponerles a la altura de los enanos que están cilindrando al presidente. Si sus asesores no entienden que ésta no es la política a seguir, le pasará igual que a Fox, quedará en ridículo y apejendado…Todos los discursos en contra del populismo de parte del presidente sirven al crecimiento del Peje, si no lo ve, estamos mal…