Política Aldeana

La repentina salida de Enrique Martínez del gabinete presidencial creó confusión en los círculos políticos de Coahuila, sobre todo cuando los cortesanos comenzaron a diseminar sus ocurrencias. Hasta su secretario Daniel Garza Ortiz de Montellano presumió que salían de Sagarpa con la frente en alto. Sin embargo, en México
se dice que EMM salió del gabinete por muchas razones: negocios personales, poco rendimiento en su función, una visión contraria a la del Presidente Peña Nieto, injerencia en grillas locales, declaraciones contrarias a los campesinos, como aquello que dijo justo en la crisis de San Quintín: que los niños jornaleros del campo trabajan porque les gusta y porque es tradición. Otra fue su defensa para los productos transgénicos, que empobrecen al productor y erosionan la tierra. Pero lo verdaderamente cierto es que no lo quieren Luis Videgaray, Aurelio Nuño y José Antonio Meade. Casi nadie. Aún así le ofrecieron Fovissste.

La ambición y su deshonestidad
corrompieron a Goyito

Legisladores locales, organizaciones de abogados y la mayoría de los magistrados del Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJE), a “toro pasado” coinciden en que el muy cuestionado Presidente Magistrado, Gregorio Alberto Pérez Mata, debe renunciar por haber desprestigiado al Poder Judicial de Coahuila al invertir dinero de la Institución para beneficiarse con los millonarios intereses.
125 millones de pesos se invertieron en la empresa fraudulenta FICREA. ¿Quién se quedó con los millones de pesos de intereses que generaron las repetidas inversiones? Todo indica que el ladrón de esos intereses es Gregorio Alberto Pérez Mata. Pero a la fecha no hay nadie que lo sancione, o que intente hacerlo.
El Auditor Superior del Estado, Armando Plata Sandoval como siempre solapa todo, y más cuando se trata de sumas millonarias para maniobrar a su antojo y sacar tajada. Actualmente el TSJE opera con números rojos. Gracias a las corruptelas de Pérez Mata.
Otro de los involucrados es el ex Oficial Mayor, Héctor Alvear Alvarado, quien llegó con una mano atrás y otra adelante, y ahora goza de una envidiable solvencia económica, su fortuna la hizo en ocho años y cada que puede se burla de los magistrados, por agachones y cómplices.
Luego de salir Alvear Alvarado del TSJE sin ser investigado por ninguna autoridad, parece que le fue bien en su nuevo empleo, pues aprovechándose de su puesto hizo relaciones y ahora representa a una editorial especializada en formación jurídica.
El desorden financiero que propició Pérez Mata tuvo nefastos resultados: en los últimos meses se cerraron juzgados en algunos municipios de la entidad, y se despidió a un importante número de empleados, lo que repercutirá negativamente en la justicia coahuilense... Si es que había justicia, porque los negocios particulares en el TSJE sobran.
Quienes pasarán a la historia de Coahuila por solapar las corruptelas de Gregorio Alberto Pérez Mata serán los magistrados cómplices:
Daniel García Nájera, Elena Treviño Ramírez, Edmundo Rodríguez Barrera, Carlos Javier García Mata, Martha Elena Aguilar Durón, Gabriel Aguillón Rosales, Miriam Cárdenas Cantú, Alejandro Huereca, Oscar Nájera Davis, Natalio Dávila Moreira, José Antonio Martínez Gómez, Armín Valdés Torres, Jesús Sotomayor Garza, Francisco Gómez Gómez, Germán Froto Madariaga, Eduardo Prado García, Francisco Martínez Alvizo, Marco Antonio Martínez Valero, José Amador García Ojeda, Luis Martín Granados Salinas, Miguel Ángel Ramírez Ramos y Efraín Rogelio García Flores.
Gregorio Alberto Pérez Mata quedó desacreditado ante el gobernador del Estado, Rubén Moreira Valdez por traicionar su confianza, y desde ahora los coahuilenses lo reconocen como un abogadillo desconfiable, corrupto y deshonesto...