A meses de elecciones, y ya muchos están que “se les queman las habas”

Jesús M. Moreno Mejía.

Se ha puesto en marcha (oficialmente el día 1° del presente mes, conforme al Calendario Electoral de Coahuila 2016/2017), el proceso para la renovación de los cargos de gobernador del estado, de los ayuntamientos de los 38 municipios de la entidad y de legisladores del Congreso del Estado. Desde la víspera se mueven los aspirantes como abejas en un panal y muchos de ellos están que “se les queman las habas” para ser nominados formalmente por su partido como candidatos a tales puestos de elección popular, e incluso a los de representación proporcional.

Y desde luego que el entusiasmo no es con el afán de servir al pueblo, sino estar en el presu- puesto a partir de los gastos de campaña, pues existe una bolsa de 176 millones de pesos destinada a partidos y candidatos a elección de gobernador, de alcaldes y diputados locales, puesta a disposición por el Instituto Electoral de Coahuila (IEC), supervisados por el Instituto Nacional Electoral (INE antes IFE). Más lo que logren manejar a su antojo una vez que lleguen al puesto que pretenden.

En el sistema democrático en el que vivimos es lo que procede para elegir a nuestros gobernan- tes y representantes populares, si bien los operado-res políticos de los partidos, así sean de una u otra ideología y color emblemático, ejercen sus acciones en los procesos electorales desde el poder y financiamientos que tengan a su alcance, conforme a sus particulares intereses.

Es así como logran mantener al pueblo en una aberrante esclavitud social y económica al servicio de la clase gobernante, y no a la inversa como se supone que debería operar pues nosotros somos los mandantes y ellos los mandatarios (o sea los que están para acatar los dictados del pueblo y rendirle cuentas).

Volviendo al proceso electoral, en breve sa- bremos quienes pasarán de simples “suspirantes” a candidatos oficiales de los partidos políticos en Coahuila, y surgen las dudas: ¿Los quince partidos políticos inscribirán a su candidato? ¿O como en procesos anteriores, algunos se unirán a aspirantes de otros partidos? Ya que algunos no tienen ni elementos suficientes para subsistir y participar.

El caso es que el ambiente político electoral empieza a “caldearse” y por lo mismo, a partir de este mes de noviembre, empezaremos a ver definiciones en los principales organismos e institutos políticos.

Han variado las estrategias preelectorales de los pretendientes a obtener el beneficio de ser “el bueno”, destacando entre las maniobras la instalación de anuncios “espectaculares” de quienes desean ser los elegidos, tal como lo han hecho Luis Fernando Salazar, Guillermo “Memo” Anaya e Isidro López Villarreal, del PAN, no obstante estar fuera de reglamento hacerse propaganda antes de tiempo.

También destaca otra estrategia, ordenada por “alguien”, para realizar un sondeo a cargo de la empresa Consulta Mitofsky, bajo el sugerente título de “Preferencia para gobernador”, levantada entre 200 coahuilenses de 120 secciones electora- les, visitados en su hogar del 22 al 25 de abril del presente año, pero cuyos resultados fueron dados a conocer tiempo después, indicando que el alcalde priista de Torreón, Miguel Ángel Riquelme Solís era preferido por mayoría y en segundo término figuraba Guillermo Anaya Llamas, del PAN.

El hecho es que el PAN tiene cinco aspirantes a figurar como candidato oficial de ese partido: el actual presidente municipal de Saltillo, Isidro López Villarreal; el senador Luis Fernando Salazar Fernández; la también legisladora Silvia Guadalupe Garza Galván; el alcalde de Monclova, Gerardo García Castillo, y uno de los líderes del panismo en Coahuila, Guillermo Anaya Llamas. Si bien, hay quienes dentro del PAN manejan la posibilidad de que Esther Quintana Salinas, ex legisladora federal, sea la “yegua negra” (en lugar de “caballo negro”, por su condición de mujer).

El Partido Revolucionario Institucional, también tiene varios “tiradores” a ser considerados el abanderado oficial del PRI: el mencionado alcalde de Torreón, del que se asegura es el preferido (“delfín”) del gobernador Rubén Moreira Valdés; el diputado federal Javier Guerrero García (quien contiende por segunda ocasión como precandidato, ya que anteriormente lo hizo frente al actual ejecutivo estatal); la diputada federal Hilda Flores Escalera, quien en su informe legislativo en Torreón afirmó que ella va por la gubernatura, pero que espera que la selección del candidato de su partido sea justa y equitativa; Román Alberto Cepeda Flores; Enrique Martínez Morales (hijo del ex gobernador Enrique Martínez y Martínez); Alejandro Gutiérrez, secretario General adjunto del CEN del PRI.

Otros “aspirinos” del Revolucionario Institucional, que habían declarado su deseo de figurar como precandidatos a gobernador, entre ellos Jericó Abramo, Tereso Medina, entre otros, han guardado silencio o aclarado que “siempre no”, ya sea por así habérselos sugerido o por darse cuenta de no contar con el suficiente apoyo de sus correligionarios

Armando Guadiana Tijerina, ex priista, em-presario ganadero y minero, pero posteriormente simpatizante del Partido de la Revolución Demo- crática (PRD) y del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), ha manifestado su deseo de ser candidato a gobernador, sin decidirse si lo será en calidad de abanderado de uno de estos organismos partidistas, o bien en calidad de candidato independiente.

Por su parte, el presidente municipal de Acuña, Evaristo Lenin Pérez, del partido Unidad Democrática de Coahuila, ha venido insistiendo en su intención de contender en la elección de gobernador, sin aclarar si lo hace o no con la alianza de otros “partidos morralla”, como se les identifica a los partidos pequeños registrados en el IEC.

Otros políticos coahuilenses que han revelado su intención de participar en el proceso de elección de gobernador como candidatos independientes, son el ex alcalde panista José Ángel Pérez y el ex priista Noé Garza Flores. El primero de ellos ha estado insistiendo en que participará en el proceso de elección, en tanto que el segundo ni lo niega ni lo afirma, pues aclara que no fue él quien decidiera proponerse.

Pues bien, el circo se ha empezado a instalar y ya se sabe, en principio, quienes serán los gladiadores, payasos y demás cirqueros, e incluso se ha manejado que por primera vez habrá la alternancia en el poder en Coahuila, pues la ciudadanía está cansada de ver la misma función circense de siempre, pero también hay quienes aseguran que el cambio de color político en Coahuila no habrá de darse en esta ocasión, pues el PRI tiene la estructura necesaria y los recursos económicos suficientes para asegurar los votos “duros” a su favor, como siempre lo ha hecho.

Y es que si a cifras financieras oficiales vamos, los partidos y candidatos tienen la suma oficial de 176 millones de pesos para gastos de campaña; siendo los que mayor suma lograrán (aparte de lo que obtengan “por debajo del agua”): el PRI con 20.8 millones de pesos; el PAN 14.4 millones; UDC 5.3 millones; PPC 5 millones; PVEM 4.7 millones, y otras cantidades inferiores el resto de los partidos contendientes.

¿Y usted, amable lector, ha decidido apoyar a alguno de los aspirantes antes mencionados? Porque le recordamos que es una obligación cívica acudir a las urnas el día de las elecciones, pues el sistema democrático así lo establece, al igual que el sistema de competencias del mundo globalizado en que vivimos.

Tal vez no estemos conformes con nuestro sistema electoral, pero como dijo Wiston Churchill: “La democracia es el peor sistema de gobierno diseñado por el hombre. Con excepción de todos los demás sistemas”. ¿O usted qué opina?

¡Hasta la próxima!