Disputa en la cúpula sobre la educación y la prensa

José Luis Rodríguez Flores.

Tras fuerte disputa con don Eugenio Garza Sada (QEPD), derivada de la voracidad del ex presidente Luis Echeverría Álvarez por controlar los periódicos a nivel nacional, (entonces no había facilidad de facebook) existía entonces la gran cadena de periódicos, controlada por el famoso Coronel ¡¡Ha!! ¡¡Ha¡¡ Sanders!!!! Jajaja, ¡No! ¡No! ese Coronel ¡no! Ese Coronel controlaba la gran cadena pero de pollo Kentucky Fried Chicken (KFC).

El Coronel al que yo me refiero es José García Valseca, militar mexicano del tiempo de la revolución, que a la sazón llegara a poseer la cadena periodística más grande del país, la cadena de “Soles” como se llamaban los periódicos de su propiedad, y llegó a alcanzar para 1970, más de 35 sucursales periodísticas en todos los estados a lo largo y ancho de la nación.

Acerca del coronel García Valseca se cuentan anécdotas inverosímiles, como cuando casi ¡moría! y ¡volvió a revivir! Al sentir un fuerte dolor asfixiante en el pecho, inició horrorizado trámite urgente de radiografías, angustiado por una sombra perniciosa a la altura del esternón, entonces le diagnosticaron cáncer…

La épica personal hizo el resto: citó a espléndida fiesta en su residencia en Tlacopac, antes de que llegaran los invitados, ¡terminó de dictar su testamento, anunció su cercana muerte y se despidió de todos! Al día siguiente en agonía partió a Boston y tras una cita urgente con el oncólogo, lo tendió en una camilla para auscultarlo, le introdujo en la boca un gancho esterilizado, para explorar el esófago, y al sacarlo a la luz halló un extraño cuerpo, cubierto por una sustancia azulada.

Sonriente, se la mostró a García Valseca y se la ofreció como obsequio, era una concha de almeja que el Coronel había engullido. Esa noche Boston fue sometida a artero ataque de artillería de corcho: nadie sabe cuántas botellas de champaña se vaciaron en los adentros del Coronel y sus amigos, para festejar la resurrección del famoso Coronel Sanders, ¡Ah no! del Coronel García Valseca.

Luego de varios años de invitar el Coronel García Valseca a los directores de los diarios de circulación nacional a dar un ágape en honor del presidente en turno, tocando festejar al Presidente Miguel Alemán, en la ocasión “el cachorro de la revolución” dijo ante los medios de comunicación: “Más vale tolerar y soportar los yerros que en la difusión de las ideas se cometan, que el disminuir, así sea en parte mínima, la libertad de la opinión pública.” fue entonces a iniciativa de aquel famoso Coronel -personaje pintoresco- García Valseca, que sería instituido el 7 de junio de 1952 el Día de la Libertad de Prensa….

Volviendo a la trifulca creada por la voracidad de Echeverría de quedarse con la enorme cadena de periódicos García Valseca, que atravesaba un mal momento económico por el año de 1973...para entonces don Eugenio Garza Sada había logrado trascender con el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey, creando más de 30 campus a lo largo y ancho del territorio nacional.

El propósito de controlar la educación no se hizo esperar y llegó a su clímax, enfrentándose el ex presidente Luis Echeverría Álvarez, representado la tendencia socialista en contra de la educación privada y del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey, que crecía como la espuma y contra su creador don Eugenio Garza Sada…

Lo demás lo hizo la historia, ya que las fuertes diferencias entre Echeverría y don Eugenio, provocarían entonces el trágico 17 de abril de 1973, cuando integrantes de la Liga 23 de septiembre en su afán desmedido secuestraron al magnate empresarial que había logrado darle un fuerte impulso al crecimiento de la educación en el ámbito nacional, y convirtiendo en un emporio industrial al Estado de Nuevo León, resultando de aquel lamentable incidente, el frustrado y fallido intento de secuestro convirtiéndose en artero asesinato de un hombre de bien y de sus escoltas….

Según las versiones, don Eugenio ordenó hacer el cheque para la compra de la Corporación Periodística García Valseca la más poderosa del país en ese entonces, mejor conocida como la cadena de periódicos “El Sol”. En Saltillo estaba entonces El Sol del Norte y tenía su oficina por la calle de Cuauhtémoc.

El detalle de la compra de la cadena de parte de don Eugenio no le pareció al ex presidente Echeverría, por esa razón cuando asistió al sepelio del muy querido empresario -según El Excelsior- a su paso la gente le gritaba ¡¡Asesino!! (SIC). “Cuando empezó el camino del cortejo, eso yo lo oí, lo vi, hubo repudio de todo el pueblo hacia Echeverría, desde las casas, en los balcones, en todos lados, por donde fue pasando el cortejo, al Presidente le gritaban: “¡Chinga tu madre, Echeverría, asesino! Y eso fue durante todo el trayecto”. (SIC). Usted estimado lector ¿Qué opina?

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