publicación Online
 
 
el periodico de saltillo
Octubre 2016
Edición No. 332


México dividido

Salvador Alcázar Aguilar.

En México permea un clima de rencor, de odio, resentimiento, frustación, avivado por fuerzas retrogradas y no sólo por aquellos que corrieron a traer a Santana y luego fueron por Maximiliano; también por la izquierda recalcitrante que unidos por un mesías que tiene tres sexenios intentando hacerse de la silla presidencial sin éxito, y que desde entonces se mantiene en campaña permanente amarrando navajas con la coordinadora y apoyando todo lo que resulte en menosprecio y menoscabo de la figura presidencial.

Hoy la religión siembra odios, mañana cosechará tempestades. La intolerancia para quienes no piensen igual trabaja intensamente avivando un fuego que luego se revierte. Todos los seres humanos por el simple hecho de serlo merecen respeto. Como lo merecían un puñado de jóvenes estudiantes en 1968 que fueron reprimidos brutalmente por granaderos, convirtiendo una protesta en una masacre,sólo por pensar diferente.

La brecha generacional no debiera convertirnos en enemigos, a nosotros nos tocó luchar contra los dinosaurios y la imposición en su pleno apogeo, porque el sistema político mexicano hoy como ayer es el mismo.

El mundo cambia constantemente y la brecha entre ricos y pobres crece enormemente, pues hoy en pleno siglo 21 todo mundo quiere imponer criterios y esgrimir razones donde no hay, pero sólo con fines recudatorios, porque estamos inmersos en una economía global que destroza familias enteras y recorre apocalípticamente el mundo llevando hambre y miseria tan solo porque algunos países no tienen petróleo para exprimir y los que lo tienen y basaron su economía en este recurso hoy están en bancarrota.

Los jóvenes de hoy son diferentes, con una tecnología de punta que se impone y con las redes sociales que compone y descompone en segundos a nivel mundial, y que quizá no votan los internautas pero dirigen, piensan, razonan y lo que es peor exhiben. Por eso la vieja guardia espera con anhelo que como dijera José Martí: “ser joven es ser revolucionario”, y cumplan los designios para los que la nación los convoque, pues la hoy democracia ya fue pagada por jóvenes como ellos y la pagaron con creces y con sangre, pues 2 de octubre no se olvida, porque fue un parte aguas de la democracia incipiente en aquel entonces.

Los estudiantes sabían que la democracia es un riesgo, pero bien vale y valió la pena. Hoy sólo queremos que la sangre derramada hace 48 años no sea en vano, y que tomen la estafeta para seguir con una constante para mejorar a nuestro país.

 

 
© 2014 El Periódico de Saltillo contacto@elperiodicodesaltillo.com

 

 

 

 

 

 

 

 

 

     
carton noviembre 09 Noviembre 09 Rufino