¡Que conste,… los olvidados!
La división de los pobres y la migración
Sócrates A. Campos Lemus.
Me dice don Alfredo que es de un pueblo allá en la Sierra, donde comenzaron los movimientos del EPR en los tiempos de Diódoro Carrasco, la verdad es que razones había y muchas para que la gente estuviera enojada, molesta, resentida, mucha pobreza, pocas tierras para sembrar, muchos montes y cañadas y nada de buenos caminos, nada de atención de médicos; fíjese, tenemos un cascarón donde se pondría el hospital, solo está el cascarón, como las ruinas de Monte Albán, nada tiene, se gastaron millones y ahí está abandonado, sin servicios, y la gente muriendo no solo de hambre o de sed, sino de las enfermedades que se pueden curar, pero no hay ni médicos ni medicamentos y así, solamente vemos como aumentan los camposantos con sus tumbas, unas grandes y otras chiquitas, no solamente los viejos mueren, también los niños y las mujeres y los jóvenes, y por eso, por el hambre, por la enfermedad, por la falta de escuelas, por las carencias y las demagogias, los pueblos están enojados y molestos con todos los políticos, porque ahora vemos que, en vez de mantener la unidad nos vienen a dividir más, que unos son del PRI y otros del PAN y del PRD o de Morena o del PT o de quién sabe cuántos más, cada uno llega diciendo que va a salvarnos, y cada día que pasa más nos hundimos y nos fregamos, más nos dividimos y más nos enfrentamos y uno se reflexiona, porque con el coraje y la pasión no se piensa: ¿No será esto lo que en verdad buscan los ricachones que tienen esperanza en robarnos las minas y los bosques? ¿No es esa división y enfrentamiento lo que les ayuda a los políticos para seguirnos manteniendo con la cabeza baja y engañándonos y explotándonos? yo creo que así es y por esa razón nos hablan de democracia y no de unidad en los pueblos y por esa razón, por lo bajito, meten armas, dinero, corrompen a los ambiciosos y se generan las muertes y los asesinatos… como que ya nos van ganando.
En esos tiempos murieron y mataron a muchos, no importaba que estuvieron o no de acuerdo, las familias se fueron dividiendo más y más y hasta entre ellos se mataban y los policías venían y no investigaban nada, solamente mataban o se llevaban a muchos jóvenes y viejos que andaban en el monte trabajando y los acusaban de guerrilleros o de moteros o de asesinos y nada de eso eran y con eso el gobierno publicaba que ya estaban pacíficas las zonas y que ya no había guerrillas y la paz era real, cuando nada de eso era cierto. Así, sin trabajo y muertos de hambre mejor salimos, salimos alentados por amigos que ya habían salido antes y sabían cómo se podía pasar, dónde encontrar a los coyotes para que nos pasaran y cuánto hay que pagar y dónde llegar a dormir y con quién ir a pedir permiso o trabajo. Hace tiempo que me vine a Los Ángeles, pero primero pasé por Tijuana y tuve que pedir prestado para el viaje y aguantar la pena de dejar a los críos y a la señora, a los amigos y a los padres y familia y así llegué a comer a veces buscando entre los desperdicios y no me da pena decirlo porque es la verdad, mugroso y sufriendo calores o frío y hambre y nostalgias y penas y tuve que lavar baños y escusados, limpiar pisos y lavar platos y servir mesas y nada de eso avergüenza porque de todo hay que hacerle, porque cuando todo falta, a todo se le atora, y así, con ayuda de varios paisanos que confiaron en la lealtad y la honestidad y el trabajo salí…
Hoy gracias a Obama, me decía, dos de sus hijos están estudiando en la Universidad y él ya tiene trabajo y papeles y saca adelante a su familia, uno de sus hermanos es chef de comida japonesa y sobre todo me dice que los jóvenes no se han maleado, porque también hay muchos que llegan y se malean y se meten a las drogas y se joden la vida para siempre. Uno no está preparado para los cambios y a veces no sabe resistir las presiones y las malas compañías de los amigos que no lo son, son enemigos que les llevan por el mal camino: Si el mismo Jesús tuvo de esos: judas era su discípulo y Satanás era un ángel, por eso hay que cuidarse, porque estamos en país ajeno, en casa ajena…
Y cuando uno deja a su pueblo, su tierra, es cuando en verdad entiende lo que es la nostalgia cuando le tocan el Dios Nunca Muere o escucha las canciones y los sones y ve uno los bailes de la Guelaguetza y se le cierra la garganta y se le lloran los ojos, le llega uno al corazón, le cala, lo siente, por eso no dejamos de que los niños y jóvenes dejen de entender esto, por la comida, ellos, aprecian la comida y ven la diferencia entre lo que les hace su mamá y las hamburguesas o las pizas o los hotdogs, les gustan más las clayudas y los moles, y el quesillo y los chapulines y los grandes nos saboreamos el mezcal y el mole de cadera o los quintoniles y cuando hay, esas tortillas de maíz tan rico que traemos desde Oaxaca, por eso apreciamos mucho a Don Santiago García, él tiene ya como 25 años con el fomento del ballet de la tierra, con las piezas de la guelaguetza y ha tenido mucho éxito en todas las universidades y ha recibido muchos reconocimientos y ahora sorprende con un niño QUE DESDE LOS cuatro años baila como se debe el baile de la Pluma, y con su ballet folclórico Centloat, ha fomentado esa belleza entre nosotros y es un digno embajador de la cultura de Oaxaca y es por esa razón que será muy bueno que lo entreviste para el programa, con Jaime y Omar LOS OLVIDADOS, y lo felicito porque están haciendo esto y me siento muy bien en poder ser su amigo y estar apoyando, porque es la mejor forma de mantener lo nuestro y para que las nuevas generaciones conozcan y no se olviden de sus raíces, y ustedes, que no se olviden de nosotros…
|