Nombramientos “a modo”

Armando Montalvo Olivo.

En 12 años los coahuilenses seguimos dando de qué hablar en nuestro país. Primero la deuda millonaria de los 33 mil millones de pesos, la detención y liberación de Humberto Moreira en España, el caso del ex tesorero Javier Villarreal en Estados Unidos, el asunto del ex gobernador Jorge Torres prófugo de la justicia, el caso de los policías capturados y liberados conocido como “Coahuilazo”. Ahora, los nombramientos a “modo”.

El nombramiento del Fiscal Anticorrupción en la entidad, Jesús Homero Flores Mier, quien antes dirigía el Instituto Coahuilense de Acceso a la Información Pública (ICAI), causa estragos entre la sociedad porque no tiene los méritos suficientes y la honestidad necesaria para desempeñar el cargo asignado.

La triste realidad es que quien maneja los “hilos” de la cúpula del poder en Coahuila encontró en Jesús Homero Flores la figura perfecta para poder controlar todo en los próximos siete años, tiempo que marca la ley para ocupar esta función.

Se aseguran tantas cosas sobre la relación del nuevo fiscal Anticorrupción con los Moreira, que la única realidad absoluta es que no habría llegado si no trae la bendición del actual Ejecutivo Rubén Moreira Valdez.

Por lo pronto, los funcionarios deshonestos y políticos corruptos que se han enriquecido en los última década pueden descansar tranquilos porque nadie los procesara sobre la forma ilegal que amasaron fortunas.

Magistrados palomeados
Sandra Luz Rodríguez Wong, Marco Antonio Martínez Valero, Alfonso García Salinas, Sandra Luz Miranda Chuey, María Yolanda Cortés Flores y Luis Efrén Ríos Vega, llegan al recién Tribunal de Justicia Administrativa por una sola razón, haber servido a intereses personales de figuras como Miriam Cárdenas Cantú, actual magistrada y Presidenta del Tribunal Superior de Justicia en Coahuila y del actual gobernador.

La más favorecida es Sandra Luz Rodríguez, ex esposa del magistrado Oscar Nájera Davis. Su relación de amistad con Cárdenas Cantú y haber sido su asistente por años, le valieron para que fuera nombrada presidenta de dicho tribunal.

El magistrado Alfonso García, quien ha ocupado los cargos gubernamentales por el empresario periodístico, Luis Horacio Salinas Aguilera, sin pena ni gloria se coló para seguir cobrando en la nomina estatal. Se le recuerda por el pobre papel que desempeñó cuando fue subprocurador ministerial con el lagunero Óscar Calderón Sánchez como procurador durante el sexenio de Enrique Martínez y Martínez.

La labor de Marco Antonio Martínez siempre ha sido gris. Su paso por el Tribunal de Conciliación y Arbitraje del Poder Judicial del Estado fue opaco. Nunca hizo nada destacable en su carrera profesional. Su único mérito es tener una risa envidiable y ser amigo de Rubén Moreira.

La nigropetense Sandra Luz Miranda arribó al cargo sólo por ser amiga de Miriam Cárdenas desde que ambas estudiaban en la Facultad de Jurisprudencia de la UA de C. Posteriormente, se convirtió en una de sus confidentes personales.

A la ahora magistrada se le señaló de corrupta por grupos de abogados en su ciudad natal de Piedras Negras. Incluso, a su paso por la Visitaduría de la Comisión de Derechos Humanos del Estado con sede en esa ciudad, fue corrida por el ex presidente de ese organismo Luis Fernando García Rodríguez (quepd) por litigar asuntos de ese organismo en su despacho jurídico.

En tanto, María Yolanda Cortés, su principal mérito para formar parte del nuevo Tribunal de Justicia Administrativa es ser cónyuge del ex director de la facultad de Leyes de la UA de C, el polémico Luis Efrén Ríos Vega y actual jurídico del priista Miguel Riquelme Solís, quien espera el fallo del TRIFE sobre el resultado de la elección.

Quienes conocen a María Yolanda aseguran que trae problemas de salud desde hace tiempo, y que probablemente por esa razón podría ausentarse del cargo en algunas ocasiones.

Olvidó a sus amigos
El consejero Luis González Briseño, actual presidente del ICAI en Coahuila, fue ex agente investigador del Ministerio Público. Aborrecía estar de guardia los fines de semana en la Agencia del MP de Delitos con Detenido por el abundante trabajo que había. Pero cambiaba de parecer el domingo por la tarde cuando revisaba el libro de actas y fianzas.

Luego cuando fue comisionado en la Dirección de Averiguaciones Previas de la Procuraduría General de Justicia del Estado su labor sobresalió, hasta que pasó después a la Contraloría Interna de la misma dependencia.

Sus amigos revelan que el sampetrino Jaime Martínez Cepeda, quien era titular de esta área en aquellos años, lo apoyó en todo momento hasta que González Briseño se convirtió convertirse en el segundo hombre más importante en esta dirección.

Antes de que terminara el mandato de Enrique Martínez y Martínez, Jaime Martínez habló con el ex secretario de gobierno, Raúl Sifuentes Guerrero para que apoyara a Luis González quien siendo un completo desconocido ingresó al ICAI hasta convertirse hoy en el nuevo presidente de este organismo.

Luis González tiene que prepararse a conciencia y revisar bien las cuentas que dejó su antecesor Jesús Homero Flores, sobre todo en el departamento de facturación. Ahí, va encontrar algunas sorpresas que podrían causarle “dolores de cabeza” serios. Los nuevos funcionarios citados jugarán un papel importante en los próximos años venideros. Difícilmente podrán evitar las críticas de miles de coahuilenses que están inconformes con sus nombramientos “a modo”.