publicación Online
 
 
el periodico de saltillo

Mayo 2018

Edición No. 351


Debate Presidencial: otro formato, mismos vicios

Iván Nájera Agüero.

La temática era la más aguda y crítica para todos: inseguridad, corrupción y democracia. Las estadísticas, los datos contundentes, nadie podía evadirlos; a todos les toca una parte del problema, a cada uno, un señalamiento, una deuda, acusaciones por acción o por omisión.
El formato del debate fue mejor que en otras elecciones, pero el debate entre los candidatos quedó a deber mucho porque éstos no se enfocaron a convencer a los ciudadanos sobre cómo resolverán problemas del país que todos identificaron, como la corrupción, la opacidad y la falta de justicia. Los problemas del país están sobre diagnosticados, ya sabemos qué le duele a México, lo que falta es que digan cómo lo resolverán

Todos los candidatos presidenciales deben ser más propositivos, presentar planes concretos, estrategias y acciones a fin de que se alcancen los objetivos que plantean porque los mexicanos deben contar con bases suficientes para saber quién puede cambiar la situación del país. Muchos de los que esperábamos el debate, ya sabíamos que las descalificaciones personales en el primero de los tres debates entre presidenciables, estarían a la orden del día, ya que obedecían a las estrategias de cada candidato.

Los últimos tres candidatos en cuanto a preferencias electorales de acuerdo a las encuestas presentadas, José Antonio Meade, Margarita Zavala y Jaime Rodríguez Calderón, los obligaban a salir al debate con una estrategia de comunicación e imagen que los colocara de nueva cuenta en el radar de los votantes.

De los tres candidatos con esa urgencia, el único que entendió esa dinámica fue Jaime Rodríguez, quien a través de ocurrencias sin sentido en cada participación que tuvo, sumado a un estilo similar de hacer política al de Vicente Fox, logró colocarse como una figura mediática que a partir de ahí puede empatar o superar a Margarita Zavala en las encuestas.

En el caso de Margarita Zavala, su actuación fue desastrosa tanto en su comunicación verbal como no verbal. Siempre estuvo lejos de los temas que se discutían en cada ronda, sus intervenciones resultaron inútiles, pues en ningún momento fue capaz de organizar claramente sus ideas y ser de esa forma propositiva.

Pepe Meade no entendió jamás que estaba hablando a una multitud que está molesta con el PRI y varios de sus gobernadores, pues su actuar fue hasta cierto punto pasivo y sin intenciones de desmarcarse de la élite política señalada por actos de corrupción, como podrían ser César Duarte, Emilio Lozoya, etc.

El nuevo formato y el papel de los moderadores, sin duda, fueron benéficos, una mejor producción y un esquema menos acartonado. El debate se hizo más fluido, más eficiente y más detallado. Hay que reconocer la precisión, la imparcialidad y la claridad en las preguntas planteadas además de una actitud sobria y equilibrada por parte de los conductores. Esperemos que en el segundo y tercer debate, cambie el debate entre candidatos y su enfoque sea en las propuestas, así en el formato se pulan los pequeños errores que pudo tener el primer encuentro de los candidatos presidenciales.

Ivan_najera15@hotmail.com
Facebook.com/ivannajeraaguero

 

 
© 2014 El Periódico de Saltillo contacto@elperiodicodesaltillo.com

 

 

 

 

 

 

 

 

 

     
carton noviembre 09 Noviembre 09 Rufino