Último tiro
Sócrates A. Campos Lemus.
La política es un enorme negocio que permite utilizar los recursos naturales de la población y los fondos públicos para hacer negocios privados a los dueños del poder: financieros, políticos, empresarios, inversionistas extranjeros, comerciantes y fuerzas armadas, legales o ilegales, porque hoy en día, en muchos países, los que en la realidad mandan son los narcotraficantes y la delincuencia organizada… |
Es tal el juego del poder y de las mafias de la delincuencia organizada que abarcan casi todas las actividades financieras, empresariales, comerciales, políticas, armadas, intelectuales y de comunicación, y que no me vengan a decir que eso son voladas o especulaciones alocadas, no, son la realidad de lo que se marca en lo que los intelectuales declaran que es la “real politik”, que no es otra cosa que la intervención de acciones de acuerdo a la realidad, y es por ello que cuando los gobernantes se despegan del poder y de la realidad, hacen las peores pendejadas y llevan a los países a la bancarrota y el desencanto, y con ello, al descontento social y la irritación social, y en este nivel nos encontramos en México.
Ahora ya pocos creen en las soluciones de parte de los políticos y de sus partidos, nadie tiene confianza en los hombres ni en las instituciones, no le creen ni a los curitas, ni a los médicos, ni a los maestros, menos les tienen confianza o gozan de credibilidad los banqueros, los comerciantes, los empresarios, los policías, y cuando llegamos a este nivel estamos a punto de lo que se podría considerar un posible estallido social, y de acuerdo a esos parámetros es que muchos analistas coinciden en que la salida que están encontrando a cualquier conflicto social y violencia de las masas desesperadas y encabronadas es la represión violenta y brutal, y algunos hablan ya de un posible golpe militar, olvidando que los soldados mexicanos no están a los niveles de los represores de otros países donde los gringos mandan y mandan obligadamente, ya que ellos son los que tienen el poder en los mandos militares y en los controles del gobierno, en México, a lo mejor, creemos, gozan del control en el gobierno por medio de sus personeros que se han agrupado en la tecnoburocracia entreguista nacional, y a lo mejor gozan de amplias simpatías en los mandos de la marina, no en las bases de los marineros, y lo que es cierto aún, es que en las bases y en los mando del Ejército mexicano se tiene un amplio conocimiento de la historia, son nacionalistas, y sobre todo, aman como amamos los mexicanos la soberanía y demandamos cambios en las rutas que nos han llevado al entreguismo, como ahora lo viven en diferentes niveles del mando político, encabezados por el virrey Videgaray y los tecnócratas afiliados a los mandos financieros del despojo minero y del comercio del “Palacio”… de hierro, con esa visión entreguista y fascista que marcan la vida de un país por medio de las universidades privadas y confesionales al servicio de un grupo empresarial como lo es el ITAM, el Tecnológico de Monterrey y la Ibero…ahora, ellos, ya controlan la administración pública y controlan gran parte de la política y sus grupos, pero aún no controlan el nacionalismo y patriotismo de los soldados mexicanos… y de las juventud de este país.
Por ello, es curioso que los grupos políticos que ahora tienen fuerte mando empresarial y financiero, incluyendo al grupo de MORENA, se dividan en tres bandos: Meade, representando a un grupo que se agotó por sus malos manejos y su poca visión y su mucho entreguismo a los gringos; Ricardo Anaya que representa a los grupos de la ultraderecha yunquista con amplios bríos de control por métodos fascistas, al grado que logro, como Hitler, convencer a los grupos de la “izquierda” entreguista, para que lo arroparan en su camino al poder, y López Obrador, que tiene un leve toque de nacionalismo, producto de las muchas luchas sociales en que se ha embarcado y ha sido perdedor, y ahora, simplemente, por las circunstancias y por los acuerdos entre grupos empresariales y financieros y alianzas políticas de políticos medio independientes y soñadores que se inclinan un poco más a la izquierda tradicional, pero sometido al control del grupo Monterrey y al grupo político que encabezara en sus días, Manuel Camacho Solís, Córdova Montoya y Marcelo Ebrad, ligados quieran o no aceptarlo, con Carlos Slim y por tanto con Carlos Salinas de Gortari y con el grupo foxista que encabeza Alfredo Harp Helú, ahora, son, válgame dios, los que pueden salvar al país de un entreguismo total y suicida. Seguramente en todos los centros financieros y políticos internacionales tienen conciencia de que AMLO es más que nunca, el verdadero freno a la irritación y el desbordamiento social de los mexicanos encambronados y resentidos, y que en tales condiciones tiene, cuando menos garantizado un tiempo para evitar un estallido social de gran violencia que se pudiera desatar en todo el país. Es más, podríamos decir que el mayor grupo financiero del país encabezado por la familia Hank (Banorte) y sus relaciones familiares con el grupo Monterrey, ahora, apoyan, también, esa posible solución que encabeza AMLO, a pesar de que existe un gran descontento con parte de su equipo político, pero que al final de cuentas se limitarían a realizar labores de control y burocráticas, no de dirigencia…
La única forma de controlar a los millones de mexicanos desilusionados, encabronados y descontentos es dándoles esperanzas de cambio y de mejoramiento de su nivel de vida y freno a la corrupción y al entreguismo con los gringos, y así es que puede ganar AMLO, y que en este concepto se pueda lograr un gobierno de coalición, donde se permita ocupar posiciones a algunos miembros de la gran oligarquía mexiquense y de la ultraderecha nacional que representa Ricardo Anaya… y así, cuando menos, también se le daría gusto a Manlio, que ya está más allá que para acá… como representante de la “clase política” dentro del RIP. Total el último tiro de salva, si falla, estaremos envueltos en los tiros de verdad…
|