Las elecciones y el voto ciudadano
Luis Fernando Hernández González.
Los partidos políticos y sus candidatos inician sus actividades dentro del marco procesal electoral para la elección de gobernador de Coahuila y para la renovación del Congreso Estatal en el que se constituye la Legislatura Local. Es este proceso la exhibición de una gran suma de propósitos, proyectos y expectativas que buscan ofertar a los ciudadanos mediante el discurso y la propaganda, para de esta forma escrutar y así llegar al mayor número de votantes de que está compuesto el padrón electoral de la entidad.
La democracia como consenso y disenso, es la creación perfecta del análisis dialéctico para el estudio, el debate y la confrontación de ideas y objetivos, es el principio del fin que persigue la hipótesis vía síntesis en la participación, y la suma del conjunto mayoritario que clarifica el sentido y rumbo del quehacer social en las acciones deliberativas de un pueblo; es un primer término, en contraposición del porcentaje menor de un definido universo. Éste y no otro es el fin del concurso político y de las campañas pulcras que se deben de emprender por ahora en Coahuila.
Son por su propio quehacer parte de la democracia que aplicamos en este tipo de actividades, esfuerzos de éxito aglutinador de voluntades en los que se vincula una mezcla tripartita: el hombre, la sociedad y el estado, como ejercicio de una conformación inmaterial que da sentido a la importancia de la ordenación -de abstracta a real- del poder.
Con la aceptación popular se define un modelo de gobierno, al ser las condiciones representativas democráticas el sustento de la soberanía popular participativa y decisoria; incluyamos a ello, los elementos de estimulación personalizada que se agregan cuando surge la simpatía, militancia, ideología y pragmatismo, mecanismos con los que se nutre el respaldo político y la confianza a proyectos sociales.
Así, de esta manera se obtiene el consenso en la opinión pública, el mismo que da sentido al aprecio y valoración de actores, sean éstos partidos o bien candidatos, al pulsar y valorar de ellos su trayectoria, disciplina y responsabilidad de respuesta, los cuales dan a conocer ante el público elector para elevar las condiciones de calidad y correlación social comunitaria de ascenso en el bienestar.
En esta época de actividad política surge como herramienta el marketing político que como bien se sabe, es un conjunto de estrategias sensibles y apreciadas en cuanto a presentación, gestión, promoción, proyección, planificación, tanto de objetivos como de imagen social y de desarrollo infraestructural que demanda como respuesta el entorno físico de cada lugar del estado.
Derivando en propuestas emprendedoras que delinean un Más y Mejor nivel de bienestar que desea y persigue la población, tanto en el ámbito de desarrollo personal, como en aquel que comprende cada una de las estructuras de apoyo que demanda el mismo proceso progresivo que brinde aliento a la sociedad en su conjunto.
Así se da la oferta de planes y proyectos en materia educativa inicial, básica, universitaria y politécnica; en salud e infraestructura clínica y hospitalaria; en la inversión industrial y el empleo; en vialidades y servicios básicos; en atención humanitaria a niños, jóvenes, mujeres, adultos y ancianos; en aspectos administrativos de eficiencia y transparencia; en el ejercicio de áreas e instituciones públicas, que hagan de su función una ágil y adecuada prestación de servicio para la sociedad.
Al exhibir el peso de la responsabilidad que buscan los aspirantes a la gubernatura de Coahuila, unos dan la cara y confrontan su compromiso para resolver los pendientes que se adolecen; otros por el contrario esquivan obligaciones y propagan peroratas discursivas sin causa ni fin, carentes de conocimiento de nuestra realidad coahuilense al encabezar campañas ñoñas de basura e insulto.
Situación que nos permite recordar amable lector, el adagio popular que dice: “Nadie puede expresar lo que su cuerpo no siente”. Por esa razón usted definirá con su voto el 3 de julio el Coahuila que desea construir, porque su voto sí decide. |