Equidad de género,
otra trampa electoral


Evaristo Velasco Álvarez.

Con esa cuestión de que los partidos políticos deben registrar por lo menos el 30% de sus candidatos, surgidos de las filas de sus agremiadas, gentiles y amables damas que tal vez no sepan nada de política y que sin embargo aparecen adornando las páginas de sociales de los diarios de toda la nación, tal vez creyendo que sólo con cara bonita y con figura de sirena van a poder participar en la confección, revisión o derogación de leyes que afectarán irremisiblemente a todo el pueblo que queriendo o no, votó por ellas.

Parodiando a Sor Juana, diremos: ¿Quién es el que tiene la mayor culpa, la que participa por participar, sin haberse preparado con antelación para tales fines; o quien las pone ahí, para cumplir con los requisitos ?

Y aclaro que en ningún momento puedo ni quiero decir que las damas no estén en condiciones de participar en labores legislativas, ni mucho menos… Aseguro que en ocasiones han surgido verdaderos ejemplos de mujeres que demuestran estar perfectamente bien preparadas para esos menesteres, pero son las que desde muy jóvenes comenzaron a prepararse, a leer, a educar su dicción, a comprender mejor la labor de los legisladores. Ellas no llegaron por EQUIDAD DE GÉNERO , sino que se ganaron perfectamente el derecho de participar, con sobrados bríos y capacidades.

Ahora bien, el problema no es tan sólo ese lado de la moneda; también está el que se vicia una labor de suyo tan importante, por pretender ser equitativos en algo que debe ser ganado a pulso. Y lo mismo diremos de los rorros que han llegado a las Cámaras de todos los niveles, a tirar carita sin importarles la labor de hacer y revisar las leyes; porque son los hijitos de papi, o porque son los amiguitos de algún político encumbrado, y que también han prostituido una tan sublime labor.

Y tal vez dirá usted, amable lector, ¿Entonces, qué hacer? ¿Ni hombres, ni mujeres jóvenes? ¡Pues claro que sí se necesita la sangre joven, las ideas frescas, los bríos de la juventud! Pero no como pretexto… ¿Por qué no se ponen los diferentes partidos a preparar a sus cuadros con jóvenes que destaquen por su razonamiento y por su compromiso con la nación? Y vaya que los hay…

El proteccionismo no nos arrojará sino niños malcriados, groseros, pagados de sí mismos; niñas LADIES , como una que ha aparecido en las redes sociales con una pregunta: ¿Es ella una diputada muy buena, o una muy buena diputada? Como los padres sobreprotectores que no dejamos que los hijos crezcan, porque se pueden tropezar. ¿Y luego, cómo van a crecer?

La equidad se debe de dar en la verdadera oportunidad de preparación a todos los jóvenes, a todas las señoritas, a todos los mexicanos que lo deseen, proporcionándoles tanto los espacios como los medios más elementales para que se formen como la patria los necesita y como los mexicanos los necesitamos. Que todo lo que hace falta es dejar que aprendan a desarrollarse. Con jóvenes y con señoritas preparados y comprometidos, seguro haremos ¡Que viva México!