El senado aprueba el despojo
de las tierras y el agua
Les bastaron 55 minutos a los legisladores del PRI, PAN y Partido Verde, despojar a los campesinos
de sus tierras y a todos los mexicanos, de sus
derechos sobre el agua. ¡Que ratas! |
Augusto Hugo Peña Delgadillo.
PRI, PAN y el Partido Verde aprobaron sin cortapisas el despojo de tierras y el agua para favorecer a trasnacionales y a grandes empresarios mexicanos; les bastaron 55 minutos para entregar los recursos y riquezas nacionales a unos cuantos mexicanos y extranjeros, cosa que equiparo con traición a la patria, porque todo a nivel gobierno -en el de Peña Nieto- se trata de despojar al pueblo de sus bienes, recursos y riquezas, con un solo fin, hacer de la macroeconomía una gran fortaleza, suponiendo que el progreso de los ricos traerá bienestar a las clases de abajo.
Ese mismo discurso usó el neoliberalismo de Carlos Salinas para convencer a los legisladores; se dijo que cuando los grandes empresarios estén prósperos, coadyuvarán con las medianas y pequeñas empresas a desarrollarse y progresar, y con ello, crear más fuentes de empleo, cuestión que resultó contrario a lo prometido. México cada día tiene menos empleos y menos dignos, ya hay 32 millones de mexicanos, quienes por esas mismas causas, habitan en la informalidad fiscal, haciendo de la Secretaría de Hacienda, una agencia de limosneros que tienen que recurrir a préstamos del exterior y a emitir CETES a la diestra y a la siniestra para completar el gasto público.
Peña Nieto, Videgaray, Pedro Joaquín Coldwell y los legisladores del PRI, PAN y el Verde lo saben y sin embargo persisten en su cometido de privatizar los energéticos, de hacer viable la confiscación de tierras para que las trasnacionales se enriquezcan a nuestra costa y entregar nuestro máximo recurso, el agua, a empresas extranjeras, como ya se hizo en Veracruz, donde las aguas del estado se privatizaron a favor de una empresa de judíos israelíes. No entiende nuestro gobierno cuáles son los conceptos de soberanía y seguridad nacional, y si lo saben, se hacen de oídos sordos y no escuchan el clamor de la gente, esto me hace pensar que nuestros gobernantes actúan como malandrines con el único fin de posicionar a sus partidos y continuar manejando nuestro destino, el que a todas luces es incierto, aunque el de ellos, quienes nos gobiernan, son a la par de las trasnacionales, los beneficiarios del saqueo descomunal que hacen de nuestros recursos y tierras.
Tengo la impresión bien fundada que Peña Nieto llegó a la presidencia no a gobernarnos sino a despojarnos, no tengo otra lectura de su procaz proceder y por ello considero que los mexicanos tenemos que hacer algo para acotar -en lo que quepa, pacífica y legalmente- las acciones entreguistas y privatizadoras que este desgobierno está llevando a cabo. ¿Qué hacer? Lo ignoro pero algo habrá que hacer para parar estas acciones entreguistas que tienen tufo de traición a la patria. México es un país rico pero tiene un gobierno nefasto que ha provocado una desigualdad inusual e injusta, porque menos del 5% de los mexicanos privilegiados de este sistema de depredación sistemática, gozan del 85% de los recursos y las riquezas nacionales, y el otro 95% ni pan ni circo. ¡Ya basta!... O, ¿usted qué opina, apreciable lector?
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