Fidencio Treviño Maldonado.
Antes las selvas, ahora los desiertos.
Lo que sucede en México no pasa en ninguna latitud del planeta, nuestro país es surrealista, así nos lo endoso André Breton allá en los años 20s del siglo pasado, es decir difícil de entender a nuestra Clase Política que vive envuelta en sueños oníricos y promesas desveladas. Las musas son propiedad de los músicos y poetas, los paisajes son el placer y paraísos de los pintores, mientras los deportes extremos son para secretar la adrenalina, sin embargo, la discapacidad, descoordinación e indolencia parecen ser derechos reservados de nuestros gobernantes y aunque la población esta hasta la coronilla de la anacrónica formula de mentir en cada promesa, siempre está el sueño de que si se van a cumplir; GRAVE Error
El país de las formulas, de las comisiones, de reformas y sin embargo la población hastiada de promesas y declaraciones, de pleitos de lavanderos y cuentachiles en las tribunas más altas de la República, mientras el debate está en los 30 o más millones de miserables que luchan por sobrevivir un día si y otro también y no sólo en el sur, centro o norte, sino en particular en Coahuila y sus desarraigados en su propia tierra, los pepenadores de orégano, talladores de lechuguilla, los quemadores de candelilla y los peones de los nuevos amos que han convertido el desierto en un vergel. Nada que celebrar del llamado “Día Mundial del Agua” el mes de marzo y en el Valle del Hundido y Valle de las Calaveras, del municipio de Cuatrociénegas, en donde emporios, imperios y consorcios como LALA Y SORIANA han llevado a cabo cientos de pozos para extraer tetra billones de metros cúbicos de agua para saciar la sed de sus ganancias en grandes hatos de vacas de engorda y bovinos productores de leche y, hasta el poderoso grupo de Carlos Slim tiene acaparadas miles de hectáreas.
Antes fueron nuestras selvas y bosques que sin lástima alguna se destruyeron ( Aúna la fecha Se siguen talando ), ahora son nuestros desiertos los que con bombas succionadoras, extraen toda el agua de los mantos acuíferos de esa área protegida ¿Protegida por quién y de qué? porque lo que se ve no se cuestiona y lo que antes fue de Cuatrociénegas incluyendo una parte del Municipio de Ocampo, los humedales que fueron orgullo y oasis de estos municipios desaparecieron por arte de unos cuantos «Consorcios » muy fuertes, que al ver que sus fuentes de agua en la Laguna se agotaban, pues lo más fácil y con el permiso de SEMARNAT, la SAGARPA, la Comisión Nacional de Aguas, y que entre otras instituciones mandadas por funcionarios corruptos y haciéndose los occisos ( Pendejos ) otorgaron permisos para hacer pozos y extraer agua a destajo. Ahora parece que desde Monterrey, Nuevo León por medio de un Juzgado, un Juez otorga (Otro más) un amparo para los defensores de los recursos del acuífero de Cuatrociénegas y que los lecheros y recuas que les acompañan dejen de extraer agua. PRONATURA parece que despertó o le picaron las costillas y ahora está interesada también en la protección del Valle de Cuatrociénegas y como siempre, un poco tarde al menos lo intenta, aunque como están las cosas y un ejemplo lo es el Pozo de la Becerra que lleva años sin que nadie pueda mojarse en sus aguas, pues como dice la canción «lo que antes fue ya no será » y ahí están papeles, peticiones ante la comisión Nacional del agua, estudios sobre la destrucción de ese ecosistema, demandas y amparos todos trasnochados viviendo el cuento eterno de nuestro México surrealista y que entre quimeras y sueños fallidos seguirán siendo sólo eso, ya que se antepone el poderoso sello del dinero.
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