José C. Serrano Cuevas.
El Diccionario esencial de la lengua española define el vocablo gerontocracia como el gobierno o dominio ejercido por los ancianos.
Durante centurias la humanidad ha vivido con la peregrina idea de que la aristocracia de la inteligencia mora entre las mujeres y hombres provectos, quienes por la experiencia acumulada, difícilmente yerran en sus juicios. Esto es relativo, porque depende de las circunstancias en las que ocurran ciertos hechos.
La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, recientemente, ha dado la nota discordante al reconvenir públicamente a Santiago Nieto Castillo, titular de la Unidad de Investigación Financiera (UIF), porque dio a conocer a los medios de información la primicia de una investigación sobre la triangulación de dos mil millones de pesos sustraidos de las arcas de la Secretaría de Gobernación (Segob) hacia empresas de Genaro García Luna.
En su reclamo, la ministra en retiro dijo que pedirá a Nieto Castillo que “antes de revelar información a la prensa se la entregue a ella”. La señora quiere saber en qué época ocurrió el desfalco y qué cuentas se transfirieron.
Todo parece indicar que este hecho criminal ocurrió en el sexenio de Felipe Calderón Hinojosa, quien colocó al frente de la Segob a cinco diferentes secretarios. En el orden de aparición desfilaron: Francisco Javier Ramírez Acuña, Juan Camilo Mouriño Terrazo, Fernando Gómez Mont, Francisco Blake Mora y Alejandro Poiré Romero.
La Segob tiene frente a sí el compromiso de colaborar con la UIF para descifrar este complejo enigma. Aún es tiempo para que el equipo de Sánchez Cordero conozca el terreno en el que se instalaron con los ojos cerrados. El aprendizaje de lo desconocido fluye entre avances y retrocesos. ¡No más disparates!
Como dicen los entendidos, en otro orden de ideas, el 1 de agosto de este año, la prensa publicó la noticia de que un juez federal rechazó otorgarle un amparo al fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, contra el programa Hoy No Circula, porque el modelo de su automóvil no está en la lista de unidades que pueden obtener la calcomanía 0 (cero).
El Abogado de la Nación armó su escandalito por una nimiedad, no obstante que tenía frente a sus ojos una ola gigantesca de criminalidad provocada por la Delincuencia Organizada, que está obligado a combatir en sus cinco dimensiones: política, empresarial, judicial, social y sicariato.
El multicitado Santiago Nieto Castillo ha sido reiterativo en su dicho de ingresar a la Fiscalía General de la República una denuncia penal en contra de cinco ex colaboradores cercanos al ex secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna:
Luis Cárdenas Palomino, mano derecha del hoy interno en un penal de Dallas, Texas; Ramón Eduardo Pequeño García, ex titular de la División de Inteligencia de la Policía Federal (PF); Maribel Cervantes Guerrero, quien lo acompañó desde el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen), en la Agencia Federal de Investigación (AFI) y en la Secretaría de Seguridad Pública (SSP); Facundo Rosas Rosas, ex subsecretario de Prevención, Vinculación y Derechos Humanos de la SSP, y Omar García Harfuch, ex titular de la División de Investigación de la (PF).
Es hora de que Gertz Manero asuma la responsabilidad que su alta investidura le exige. La ciudadanía quiere saber en un tiempo razonablemente breve, qué acciones emprenderán los agentes del Ministerio Público de la Federación y los elementos de la Policía Federal Ministerial, ante la gravedad de los ilícitos cometidos por los amigos de García Luna. Eso es más relevante que el disparate de litigar por una insignificancia.
