RUMBO A LA GUBERNATURA

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José Guadalupe Robledo Guerrero.

No sé si andan en precampaña o en plena campaña los cuatro cuasi candidatos que se disputarán el próximo 4 de junio el gobierno de Coahuila, lo cierto es que desde ahora ya se intuye que el proceso electoral será intenso y polarizador, derivado principalmente de la demagogia de los aspirantes que promueven verbalmente “el cambio”, “la transformación”, “la lucha contra la corrupción” y todas esas palabras vacías que les ha heredado la chachalaca que habita en el palacio nacional.

Hasta hoy no hay duda que el mejor posicionado en la contienda es Manolo Jiménez Salinas, pues ha logrado mantenerse fuera de la alharaca de los fanáticos, gracias a la disciplina partidista. Manolo no ha cesado en su propuesta de llamar a la unidad, de mantener a nuestro estado en la ruta del progreso y desarrollo, de garantizar que continué la seguridad pública, y en buscar el voto de los coahuilenses en total integración con la ciudadanía.

Por su parte, Armando Guadiana Tijerina, está en el proceso de mantener el voto de Morena, el de la “izquierda”, que según se dice fue dividido por la candidatura de Ricardo Mejía y de Evaristo Lenin Pérez. Guadiana está luchando contra las tribus de Morena que a la usanza de los “izquierdistas” nunca respetan el resultado de los acuerdos cuando no les favorece. Para los seguidores de Mejía, el hombre del bigote y el sombrero terminará en tercer lugar, pero hay quienes creen que será el segundo.

Ricardo Mejía, Manolo Jiménez, Armando Guadiana

El guerrerense-torreonense Ricardo Mejía, el tercero en discordia, no cambió su discurso, sigue vociferando sus pequeños rencores, acusando sin ton ni son a aquellos que no comparten su oportunista visión de ver a Coahuila como un nicho para anidar la polarización y otros males sociales, y en aras de despertar al tigre del atraso político y la ignorancia, continúa convocando a un cambio que nadie sabe qué es, aunque lo seguro es que las elecciones son para cambiar al gobernador, porque terminará su periodo constitucional.

En otro lado del espectro se encuentra Evaristo Lenin Pérez, un conocido mercader de la política que sabe que no tiene ninguna posibilidad de ganar. Quizás por eso, hasta hoy nadie puede ubicar al dueño de la UDC, ni sabe de qué lado terminará.

Se insiste en que Guadiana tiene el total apoyo de AMLO, pero del único respaldo seguro es el de Ricardo Monreal y Mario Delgado, a quien Ricardo Mejía y sus simpatizantes le han enderezado todas las baterías en su contra, las mentadas de madre son parte de este show. Pero así es la política en la 4T, qué podíamos esperar.

Según la columna Bajo reserva de El Universal del sábado 28 de enero, se dice que “en las oficinas de seguridad en avenida Constituyentes, el grupo de Mejía Berdeja sigue firme y actuando, incluso hay quien asegura que desde Coahuila, don Ricardo sigue operando”. Así de confusa está la situación. Ni siquiera sabemos qué intereses representa Ricardo Mejía, aunque ya hay indicios de por dónde anda.

De todos modos, el sentir que se palpa en Coahuila, es que Manolo Jiménez Salinas es el puntero en las preferencias electorales, porque lo ven serio, lo consideran trabajador, y hasta ahora no lo persigue ningún latrocinio de cuando fue alcalde de Saltillo, pues la hizo bien y cuidó su prestigio. Los demás gritos son derivados de la demagogia, los rencores de la aldea, las ansias de venganza y el protagonismo.

Por eso es menester, que las voces autorizadas de la sociedad: Cámaras patronales, iglesias, centrales sindicales, organizaciones populares, etc., expresen su sentir, sus propuestas y aspiraciones, para que los que quieran gobernar Coahuila se guíen y sepan que es lo que queremos para nuestro estado. Y si no, allí que le sigan.

Política aldeana

Algunos choferes de taxis de las mafiosas centrales priistas, ya comenzaron su prédica en favor de Ricardo Mejía, tal y como lo hicieron en la ciudad de México antes de las elecciones de 2018 en donde ganó la presidencia AMLO. Uno de estos taxistas le informó a una usuaria que en una concentración del exsubsecretario de Seguridad se habían reunido 50 mil personas y con Manolo solo habían asistido mil. ¡Ni la burla perdonan! Más respeto pa’l pasaje.

Preguntas huérfanas

¿Expulsará Morena a quienes están en contra de su candidato Guadiana?

¿Se atreverá el INE a negarle el registro a Mejía Berdeja por actos anticipados de campaña?