Carlos Padilla Muñoz.
EN la década de los 90s. el ingeniero Mario Enrique Vázquez Ávila, creador del Plan Meva, sentenció que la lucha o guerra en la Laguna y en otras partes de México y el mundo, ya no sería por el oro, sería ahora por el agua.
También sentenció que la Comarca Lagunera tenía agua solo para unos 50 años, ahora a los treinta años de estos vaticinios, esta región de Coahuila y Durango, está siendo víctima de la sequía y la falta de agua.

Ningún gobierno, ni federal ni estatal, quiso llevar a cabo el Plan Meva, que consiste en traer agua de los ríos Piaxtla y San Lorenzo, que nacen en la Sierra Madre en el estado de Durango, que derivan en el estado de Sinaloa, millones de metros cúbicos van a dar al mar, en el desperdicio más inefable, cuando la Laguna está muriendo de sed.
Ahora con Andrés Manuel López Obrador, en otra de sus ocurrencias, en lugar de llevar a cabo este proyecto de desviar dichos ríos, Piaxtla y San Lorenzo hacia la Presa Lázaro Cárdenas, para captar cinco millones de metros cúbicos, con lo que se podría asegurar que la Laguna siguiera siendo la Cuenca Lechera más importante de México, sin agotar los mantos acuíferos.
AMLO optó por llevar a cabo el Proyecto de Agua Saludable para la Comarca Lagunera, con una inversión inicial de 12 mil millones de pesos, aunque hasta el momento ya llevan gastados 25 mil millones de pesos, y la obra se encuentra a un 50%.
Este proyecto consiste en derivar agua de la Presa Francisco Zarco, 3,000 litros por segundo, para abastecer a los municipios de Torreón, Matamoros, Viesca, San Pedro y Francisco I. Madero en suelo de Coahuila y Gómez Palacio, Lerdo, Tlahualilo y Mapimí en Durango.
Hasta el momento la tubería que viene desde la Planta Purificadora en el ejido de San Jacinto, solo ha traído 300 litros por segundo para Torreón, Gómez y Lerdo, de los 3,000 litros por segundo que estaba proyectado.
La derivación de agua de la Presa Francisco Zarco modificó la agricultura en esta región, ya que se dejó menos agua rodada del río Nazas y sus canales revestidos, menos de la mitad, ante la protesta de los ejidatarios de los diversos municipios, quienes denunciaron que estaban matando la agricultura en la Laguna.
La Cuenca Lechera, llámese Lala, no ha resentido tanto la escasez de agua, porque tiene la mayoría de los pozos de agua en el medio rural, lo que ha conseguido al comprarles a precio de hambre a los ejidatarios su agua. Se habla que Lala ha comprado concesiones y pozos en 100 mil pesos, cuando su precio llega a costar hasta dos millones y medio.
Se habla que en la Laguna hay más de 15 mil pozos de agua, algunos regulados por Conagua, algunos otros funcionando en forma ilegal o pirata.
Este negocio del agua se ha convertido en el huachicoleo, en el que no son ajenos algunos grupos de la maña, los Módulos de Riego, se han convertido en negocios millonarios que son controlados por dirigentes ejidatarios y algunos empresarios.
Así, se puede asegurar que el Proyecto de Agua Saludable ha sido un fracaso, ya que el Gobierno federal reportó que se han gastado más de 25 mil millones de pesos, solo llegan migajas en Torreón, Gómez y Lerdo y que esto no ha sido la solución para la escasez de agua para la Laguna.
En Torreón SIMAS, el organismo intermunicipal reporta que los nuevos pozos que se perforan son de hasta 600 y 700 metros de profundidad, o sea seis o siete cuadras de distancia, casi un kilómetro.
Pero esto no es lo más grave, el agua extraída, ya no resulta potable al cien por ciento para el consumo humano, conteniendo metales pesados como azufre, cadmio, arsénico, plomo y otros.
Ahorita el mayor problema de la ciudad de Torreón, la urbe más importante de la Laguna, es la falta de agua, por encima de la inseguridad y otros servicios. El alcalde Román Alberto Cepeda ha manifestado que el Proyecto de Agua Saludable para la Laguna, no ha funcionado al cien por ciento y que Torreón, recibe entre cien y 300 litros por segundo, cuando lo proyectado es de mil litros por segundo.
Aparte, dentro del Proyecto de Agua Saludable, que inauguró el ex mandatario federal tres veces, sin estar terminada la obra, se encuentra la reposición de la vetusta tubería que en algunas partes data de más de cien años, sobre todo en el centro histórico de Torreón, Gómez y Lerdo.
Solamente en Torreón, se habla de una inversión de más de 3 mil 500 millones de pesos. Cuando se inyecta agua a presión en el sistema de tubería en el Centro histórico y en algunas colonias antiguas en el poniente del municipio.
Los trabajos de este proyecto continúan a cuenta gotas, después de la última visita de la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum, quien ratificó el compromiso del Gobierno Federal para terminar el proyecto al cien por ciento.
En la década de los 80s., una empresa francesa se interesó en llevar a cabo el Plan Meva, que consistía desviar una parte de los ríos Piaxtla y San Lorenzo, desde la Sierra Madre de Durango, mediante la gravedad y complicadas obras hidráulicas. En algunas partes por la geografía del terreno, se harían hidroeléctricas para producir electricidad, la que se podría vender a la Comisión Federal de Electricidad, a lo que el gobierno federal no accedió en aquel entonces.
Varios presidentes de México conocieron de este proyecto, desde la década de los 70s. y aunque algunos de los mandatarios se interesaron por la obra, ninguno lo llevo a cabo, cuando la obra costaba la décima parte de ahora.