por Iván Nájera Agüero.
Durante el mes pasado salieron varias notas sobre el tema del agua. Una mencionaba el desabasto en distintas colonias que llevaban bastantes días; otra, donde los vecinos abrían la llave y en vez de salir agua, era aire lo que salía al tiempo que el medidor avanzaba; una más señalaba a México como uno de los principales lugares donde se consume agua embotellada, ya que los gobiernos no han sido capaces de garantizar el acceso al recurso.
Por su parte, en declaraciones de habitantes de las diferentes colonias afectadas en la ciudad de Torreón, mencionan que es muy complicado tener el servicio de agua potable, por lo que la mayoría cuenta con bomba para “jalar” el líquido, ya que, si lo no tienen este tipo de bomba, es muy difícil obtener el preciado líquido vital. Y lo que tienen que hacer para tener agua para lo esencial como para usar el baño y los quehaceres de la casa, tienen que estar por las noches llenando en botes, con lo que uno tiene y en lo que uno puede, para no quedar sin nada al día siguiente. En palabras de los vecinos es que, la verdad, para tomar uno compra purificada, pero para todo lo demás es indispensable el agua.
Lo que normalmente hace el gobierno municipal, no importa el color que era a cargo y en el municipio que sea, es que sugieren instalar hidros, bombas, etc., como gusten llamarlos, construir cisternas o bien adquirir tanques de almacenamiento, lo que representa una inversión extra, en algunos casos muy importante, pero el problema en muchas ocasiones es que seguirán pagando por un servicio que, aparte de ser costoso, no es eficiente.
Lo interesante de este caso, es de la gran inversión que se hizo para meter tuberías nuevas en varios sectores del poniente de la ciudad, gran parte del poniente de la ciudad, contiguo al sector Alianza es considerada parte alta y ahí los niveles de presión de agua son bajos, aunado a que no hay viviendas con hidroneumáticos y así terminar con el problema de la falta de agua, pero preocupa bastante ya que no fueron suficiente las nuevas tuberías y los funcionarios del Simas deben explicar por qué no hay agua, si es que al momento de que se publique esta columna aún no lo hacen.
Esperemos no se repitan las imágenes que se dan todos los años cuando se sufre la falta de agua, bloqueos de calles, avenidas y hasta bulevares, donde las familias afectadas, exijan mediante ese tipo de presión, que les llegue el agua a sus hogares ya sea por las tuberías o que les manden pipas.
En el mes de mayo el Gobierno Federal en coordinación con las autoridades estatales de Coahuila y de Durango, asociaciones civiles y expertos en la materia, realizaron un foro para encontrar soluciones permanentes para abatir el desabasto y mejorar la calidad del agua en la Región Lagunera, así como garantizar la recarga de los mantos acuíferos. La actividad se realizó en el Auditorio de la Universidad Iberoamericana de Torreón, esperemos que dentro de las soluciones se vea que hay un verdadero compromiso de invertir, modernizar y ampliar la infraestructura, para el beneficio de todos, gobierno, sector empresarial, ciudadanía, etc.
Hay que recordar que, al final, si se garantiza el servicio a todas las zonas y la tarifa es justa, la gente lo retribuye, con un consumo más responsable y pagando a tiempo.
Para tomar en cuenta:
En momentos de oscuridad y confusión podemos no ver más allá de unos pasos adelante. Pero no importa. Eso es lo que necesitamos avanzar. Poco a poco se irá iluminando el camino que nos sacará de la confusión.
Si no estás confuso, no estás prestando atención. ¿Estás prestando atención?
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