José Luis Rodríguez Flores.
A través de la historia se crearon diferencias marcadas entre magos varones y femeninas o hechiceras, referente a la mayoría de varones que eran alquimistas o magos, se han considerado personas superdotadas, sabios y científicos que contaban o cuentan con poderes asombrosos y sobrenaturales, ejemplo evidente citaré al famoso mago galés Merlín, vivió en el siglo VI, estimado en el ciclo “artúrico” consejero y vidente del reinado del Rey Arturo valga la redundancia, aunque para algunos Merlín nació de un demonio, para otros fue hijo no reconocido de uno de los reyes de Britania de Aurelius Ambrosius, hermano mayor de Uther Pendragon; inclusive según la tradición mencionado por el poeta Robert de Boron, sería gracias al Mago Merlín que Arturo pudo sacar de la piedra, la célebre Espada Excalibur, clavada en la piedra por Hércules y a la sazón convertirse en Rey de Britania.
Al contrario, la mayoría de mujeres que intentaban trascender o trascendieron con conocimientos avanzados o magias y misticismo, salvo contadas excepciones se les consideraba brujas e iban a la hoguera; ejemplo indiscutible la célebre Jeanne d´Arc, Juana de Arco o Doncella de Orleáns, condenada por los clérigos de practicar herejía, y por órdenes del Duque Juan de Bedfor enviada a la hoguera, quemada viva en Ruan el 4 de mayo 1431, después rehabilitada por la iglesia católica y canonizada, Santa el 16 de mayo 1920 en la Basílica de San Pedro, por el pontífice Benedicto XV y su festividad celebrada el 30 de mayo; por ende a las mujeres místicas, con visiones sobrenaturales se les consideraba brujas y eran enviadas a la hoguera como el caso citado y este sentir por la mal llamada Santa Inquisición me- dieval europea instituida en Languedoc al sur de Francia en 1184; al contrario como un mal gesto de machismo la mayoría de hombres llamados magos dedicados a la magia trascendieron en la historia como hombres sabios.
Todavía en el siglo XX se le respetaba al más grande mago británico Aleister Crowley conocido con los sobrenombres de Frater Perturbado y La Gran Bestia, máximo sacerdote del Ordo Templo Orientis y creador de la Abadía de Thelema en Cefalú Sicilia; inclusive -según la tradición- intervendría de forma precisa en algunas decisiones tomadas por el Ministro Sir Winston Churchil y supuestamente influirían para ganar Inglaterra y los aliados la segunda guerra mundial… Destacar que también ha habido a través de la historia algunas mujeres valiosas que pudieron trascender y no ser consideradas brujas, sino por el contrario son respetadas en la historia como grandes personajes místicos o contemplativas como la mexicana Sor Juana Inés de la Cruz, calificada la décima musa, y cito a la germana Hildegarda de Bingen considerada santa, compositora, filósofa, escritora, científica, naturalista, médica, mística, líder monacal y profetisa.
El historiador mexicano Alfredo López Austin inventarió una serie de magos y brujos prehispánicos específicamente refiriéndose a los 40 brujos del mundo Nahua: Los Tlatlacatecolos u “hombres Tecolotes”, practicaban hechicería en contra de los hombres, por falta de espacio no mencionaré a todos ni a lo que se dedicaban cada uno: 1.- Tepa Mizani El que sangra sobre la gente. 2.- Tlatzini. 3.- Flamatocani 4.- Caltechtlatlacuani. “Los hombres con poder sobrenatural” 14.- Nahualli. 15.- Teutlipan Moquetzani. Los dominadores de los meteoros. 16.- Teciuhtlazqui: El que vence al granizo. Ocolizehecatlazqui: arroja vientos y nubes. Los Tlaziuhque. El que busca o mira las cosas. “Los Titici” Eran una suerte de médicos que combatían las enfermedades con magia, y otros muchos más.
El ex presidente Francisco I. Madero, prócer de la democracia; considerado como un gnóstico o creyente de las corrientes del espiritismo; fue duramente criticado por alguna prensa y por sus contrarios. Amigo lector usted cree en magos y que pueden existir y perjudicar o beneficiar a la gente; o es desconfiado, escéptico y no cree en hechicería y cree que son patrañas.
joseluisrf1@hotmail.com
