Juan Antonio Estrada Soto.
Hace apenas unos días se presentó el Segundo Informe del Gobernador del Estado de Coahuila Ing. Miguel Ángel Riqueme Solís. Un Informe lleno de éxitos en su gestión gubernamental tanto a nivel económico, como de empleo, de inversión tanto extranjera como nacional, exitosa también en el ámbito laboral, ya que se mantienen alta la generación de empleo con la llegada de importantes empresas a todas las regiones del estado; han llegado empresas a la región de La Laguna, al sureste, al centro y no se diga a la región norte, pese al entorno negativo que prevalece en el país por las políticas públicas erróneas del presidente Andrés Manuel López Obrador.
El rotundo éxito que ha tenido el Gobernador Riquelme, ha sido sin lugar a dudas en materia de Seguridad Pública, ya que para todos es conocido que en este rubro el Ejecutivo estatal ha tenido especial atención y ha puesto todo el empeño en que ésto se dé de una manera muy especial, porque uno de los pilares para presentar buenos números en otros rubros ha sido precisamente la seguridad de los coahuilenses. Ha entregado a los cuerpos de seguridad el mayor y mejor equipamiento en patrullas, en uniformes y en armamento, pero no solo ha apoyado a los cuerpos de seguridad estatales, también los municipios se han visto apoyados por el Gobernador, ya que se han entregado los equipamientos a la mayor parte de los municipios del Estado.
Pero no podía faltar el prietito en el arroz, ya que el mismo día de la presentación de su Informe, se presentó un evento muy desafortunado en el que un grupo delincuencial ingresó al Estado por la parte norte, para ser más precisos en Villa Unión y desató el terror entre la población de este apacible pueblo que es vecino de los Estados Unidos; por cierto uno de los detenidos manifestó que para no ser detectados por las policías estatales, ingresaron y pasaron al estado desde el vecino país del norte, y la pregunta obligada es saber por qué sus autoridades -que presumen de tener tecnología de punta- no se percataron de esta incursión, ya que era muy escandaloso el número de camionetas que traían los facinerosos.
Con lo que no contaba este grupo delincuencial llamado cártel de noreste, era con la respuesta oportuna y contundente que ordenó el Ing. Riquelme en su calidad de Gobernador del Estado, respuesta que dejó 19 delincuentes abatidos por los agentes del orden, 10 posibles sicarios aprehendidos y 26 detenidos por halconeo que arrojó esta contundente respuesta del Estado, que generó todo tipo de reacciones a nivel Federal, ya que el propio Presidente de la República reconoció que la actuación del Gobernador fue oportuna y contundente, pues no tuvo más remedio que reconocer públicamente la buena acción en Coahuila de sus autoridades encabezadas por el Gobernador Riquelme para contener la agresión de los delincuentes al pueblo de Villa Unión y a todo el Estado de Coahuila.
Y como las comparaciones son odiosas para la gente del norte del Estado y para todos los coahuilenses, se nos vino a la mente lo sucedido en Allende y la forma tan diferente y temerosa que tuvieron las autoridades en ese momento. Así que amigos lectores ahora nos queda una sensación positiva para decir: ¿ahora si tenemos Gobernador, o usted que cree?
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