José Guadalupe Robledo Guerrero.
A finales de enero pasado, el rector de la UAC, Salvador Hernández Vélez, asistió al Congreso estatal “invitado” por los diputados para que respondiera a las observaciones que le ha realizado la Auditoría Superior del Estado, cuyo titular es Armando Plata Sandoval, acerca de cientos de millones de pesos gastados que no ha logrado comprobar la UAC.
Sin embargo, esa reunión fue entre políticos, son reuniones ociosas, por tal motivo el rector espero unos días para decir su escueta “verdad”. Fue hasta la conferencia que vino a dar la morenista Tatiana Clouthier sobre la transparencia en la 4T, donde Hernández Vélez aprovechó su condición de anfitrión y su derecho al micrófono para acuñar una mentirosa frase a las que recurren los políticos aldeanos que padecemos.
Lo dicho por el rector no tiene desperdicio, sin rubor alguno aseguró: “En la Universidad Autónoma de Coahuila no somos rateros”, en respuesta a las múltiples evidencias que existen.
Lo dicho por el rector, genera una pregunta toral: ¿Entonces quiénes han sido los saqueadores de la UAC los últimos 40 años? Seguramente no habrá respuesta, porque Hernández Vélez cree que lo hicieron rector para tapar la corrupción en la UAC, de la misma forma en que legitimó la mega deuda en el 2011 cuando era diputado local y Presidente de la Comisión de la Cuenta Pública.
Lo cierto es que los saqueadores han sido los rectores y sus funcionarios favoritos, universitarios de cuello blanco, que a decir verdad se llevaron las migajas que les dejaron los gobernadores anteriores, que según se dice son los que parten y reparten, por eso se quedan con la mayor parte. En arca abierta…
También es verdad que se habla mucho sobre un supuesto pleito que existe entre Hernández Vélez y Armando Plata, quien ha aprovechado el “dejar hacer, dejar pasar” que ha instaurado el rector en la UAC, para meter a la nómina universitaria a su amiga íntima, a su yerno, a uno de sus hijos y a sobrinos. A tal grado que ya la Contralora Ludivina asegura que dentro de poco será la tesorera de la universidad.
Otros arguyen que el actual rector no las tiene todas consigo, pues existe malestar en el alto mando estatal, porque Hernández Vélez no ha dado los resultados que se esperaban. Inmerso en múltiples conflictos se anda entreteniendo con su jardín botánico de Viesca y con las dobles plazas en lugar de correr a los cientos de aviadores.
De ser cierto lo anterior, ahora entendemos los constantes rumores universitarios…
