Oliverio Ascascius.
“Mierda son y en mierda se convertirán”.
Soy perverso, cruel, mercenario;
soy soplón, intrigoso, hago daño.
soy ostentoso y misántropo,
capaz de matar por dinero.
Soy bocón, pedante, ruin, poca cosa.
Soy tenebroso, abusivo y vulgar;
soy malo, vanidoso y soberbio.
Soy cínico, implacable,
y en el fondo cobarde.
Soy infeliz, perro guardián
de amos y oro.
Actúo ciegamente, como tonto, demente.
He matado y violado
he robado y golpeado.
Soy instrumento del poder
y sostén de bestias más ruines que yo.
Aparento ser muchas cosas,
inclusive normal, pero soy sucio y maldito;
hocicón y con ínfulas de primer ministro.
Soy un tonto gorila, cualquiera lo sabe;
sólo sé matar y abrir la carne,
sólo sé herir y callar,
sólo sé obedecer y ser despreciable.
Así soy yo, sabandija altanera y quisquillosa,
ruín y prepotente.
¿Podrá ser perdonado
un ser tan abyecto como yo?
Repito: ¿Podrá ser perdonado
un ser tan abyecto como yo?
-La pregunta se hizo humo y nadie le respondió-
Quiso arrepentirse, pero ya era muy tarde.
Ahora solo era mierda,
un pedazo de mierda
olvidado en la calle.