Algún día la ciencia puede llegar a tener la vida del hombre
en sus manos y, haciendo estallar el mundo
la especie humana puede incurrir en un suicidio colectivo.
Henry Brooks Adams.
El poder no es un medio, Winston. No se establece una dictadura para salvaguardar una revolución; se hace la revolución para establecer una dictadura. […] El objetivo del poder es el poder.
George Orwell.
En nombre de la tolerancia, tendríamos que reivindicar
el derecho a no tolerar a los intolerantes.
Karl Popper
Jorge Arturo Estrada García.
En la era del Sálvese el que Pueda, es año de vacunas y elecciones. El 2021 y sus acontecimientos marcarán el destino del país, y de Coahuila, en el corto y el mediano plazo. Los grupos en el poder buscarán, en medio de la tragedia, ganar las elecciones que los acerquen a sus objetivos. Tanto de grupo, como personales. El poder es el poder, y siempre se pretende aumentarlo. La carrera ya comenzó y se dará a la par de la estrategia nacional de vacunación. Gobernar es comunicar, las victorias serán para quien lo haga mejor. Por lo pronto, el presidente no quiere soltar el micrófono, mucho menos guardar silencio. Ya lo estableció así, en todos los tonos.
En mayor o menor grado, los partidos políticos mexicanos están desprestigiados. El Prian, ha sido condenado a las derrotas en serie por los votos de castigo, que anteriormente se repartían en diversas alternancias y que luego cayeron en favor de Morena a raudales. El discurso político en el país se ha cargado de rencores, generados por viejos y nuevos agravios. El país se ha divido claramente, entre los partidarios y los detractores de la Cuarta Transformación. En medio, no hay nada.
En este contexto, en Coahuila, el PRI local va con organización, con estructura, con unidad y con sus mejores piezas en cada lugar a la competencia del súper domingo de junio; así arrasó con carro completo en octubre del año pasado, ante la debilidad estructural de sus adversarios. La marca Morena no gana por sí sola, quedó demostrado en esa elección. Sin embargo, AMLO ya aprendió la lección y no permitirá que eso vuelva a sucederle. Esto vuelve particularmente interesante este nuevo proceso electoral.
Morena, fiel a sus raíces, competirá en la entidad con los que ganen los pleitos internos y logren, en varios casos, agandallarse las candidaturas. Finalmente, para eso ingresaron al partido del presidente. Desafortunadamente para el electorado, algunos de sus mejores cuadros no alcanzarán la nominación. El sistema de encuestas y de sorteos opacos, de este partido, se parece más al dedazo y a las triquiñuelas de antaño, que a un ejercicio democrático del “No somos iguales”. Sin embargo, contarán con el presidente Andrés Manuel López Obrador como su interlocutor principal.
Por su parte, los panistas coahuilenses perdieron la brújula luego de la cadena buenos resultados obtenidos recientemente, de la mano de la unidad Democrática de Coahuila. Ganaron todas las ciudades importantes del estado, a excepción de la capital en un par de elecciones consecutivas, también lograron la mayoría en el Congreso local en la legislatura anterior. Eran los eternos cacha votos de castigo que se le aplican al tricolor local, pero no evolucionaron. La mayoría de sus candidatos no saben hacer campañas ganadoras y el partido no está en condiciones de apoyarlos. La comunicación no es su fuerte y las calcas y los utilitarios no ganan votos, aunque sí justifican el dejar sin dinero a muchos candidatos.
Sin embargo, estos triunfos generaron hondas divisiones y cacicazgos regionales que no han sido debidamente atendidas. Estas fracturas debilitaron la competitividad como partido y evitaron la renovación de cuadros y ahora, ante los nuevos escenarios parecen destinados a ser marginados hasta el tercer lugar en Coahuila, con triunfos escasos.
Saltillo y Ramos Arizpe son el mejor ejemplo de esto. La Familia Feliz de Rosendo Villarreal domina la capital de Coahuila desde los años 90s, pero ganaron la capital, él y sus sobrinos, sólo en tres ocasiones en más de 25 años. Ahora competirán con Juan Pablo Valdés o Tere Romo, personajes secundarios de ese grupito. En Ramos, la situación es similar y el cacicazgo de la antes próspera ciudad está en manos de Ernesto Saro Boardman, luego de que él y su pupilo Ricardo Aguirre ganaron, lo demás fueron solamente derrotas.
Por cierto, el Richie se volvió priista y lo mismo ese municipio. A partir de entonces, el progreso del municipio más próspero de la entidad se canceló. El Ricky Ricón, no cumplió en convertir a Ramos en el San Pedro Garza García, de Coahuila y lo dejó más parecido a un Apodaca más deteriorado.
El PRI confía recuperar Torreón y Monclova, mantener Saltillo y Ramos Arizpe y ganar al menos cuatro de siete diputaciones federales, junto a algunos municipios pequeños. Los tres partidos mueven sus piezas locales con miras al asalto del Palacio Rosa dentro de un par de años. Los principales personajes ya tienen en marcha sus proyectos.
En Saltillo el gobernador Miguel Riquelme logró conjuntar a todos los grupos políticos, vigentes en la entidad. Así, Chema Fraustro irá por la presidencia municipal de la capital, Jericó Abramo Masso va por el distrito 4 federal, y Jaime Bueno por el 7. Lo que parecía una tormenta con ruptura terminó por concretar un grupo compacto de priistas, por lo menos en este momento.
De esta forma, Fernando de las Fuentes fue convencido de renunciar a su reelección como legislador y le dieron la Secretaría de Gobierno, lo que le abrió el paso a Jericó. Manolo se quedó contento porque Abramo no será su sucesor; aunque Bueno, su gallo tampoco lo será. Además, como movimiento estratégico adicional, Enrique Martínez Y Morales, fue resucitado como funcionario público estatal y ocupará la silla que dejó Jericó en Ordenamiento Territorial. Los exgobernadores saltillenses, Enrique Martínez, Humberto Moreira y Rubén Moreira también quedaron satisfechos con las soluciones generadas desde el Palacio Rosa, se sintieron escuchados y respetados. Serán unos meses, de tregua y unidad, luego se desatarán las ambiciones personales.
Eduardo Olmos, ya se instaló como puntero, y Manolo Jiménez con un año más de alcalde persistirá en su proyecto. Ambos, seguirán sin sobresaltos electorales sus carreras hacia la candidatura tricolor por la gubernatura. Las victorias de Armando Guadiana, en particular, y de Morena, en general, complicarían el panorama para dentro de dos años. También, acecha la posibilidad de que el PRI Coahuila estuviera forzado a lanzar a una mujer como su candidata al Palacio Rosa. En el México bizarro, nada se desecha, casi todo es posible.
Por el PAN, Marcelo Torres Cofiño, es un candidato fuerte que busca retener Torreón. Aunque, no la tiene fácil contra Luis Fernando Salazar por Morena y Carlos Román Cepeda por el fortalecido PRI lagunero. El trabajo de Samuel Rodríguez y de Lalo Olmos los llevaron a recuperar La Laguna el año pasado.
Jorge Zermeño es la carta fuerte del panismo para aspirar al Palacio Rosa, Marcelo busca acercarse, pero está obligado a ganar en junio. En Morena, Armando Guadiana y Reyes Flores Hurtado tomaron ventaja; además, hay varios prospectos que trabajan para consolidar sus aspiraciones: Luis Fernando, Javier Guerrero y Claudio Bres.
Este proceso de elecciones municipales coahuilenses se dará en el marco de una disputada batalla electoral en la que el protagonista ya es Andrés Manuel López Obrador. El presidente está nervioso, por ningún motivo quiere perder su mayoría calificada en la Cámara de Diputados y su pasaporte para cambiar la constitución en los artículos que le estorben en sus proyectos de transformación o de ajustar, recortar y reencauzar presupuestos según sus necesidades.
Él, ya está inmerso en una disputa con el Instituto Nacional Electoral acerca del papel de su mañanera en la temporada electoral. No quiere perder su poderoso foro, en donde cada día pontifica, marca agenda y externa sus filias y sus fobias, contra nuevos y viejos enemigos; ya sean reales o imaginarios. Ya sea con verdades o con mentiras.
Lo, cierto es que el gobierno federal ha tenido escasos logros. El desarrollo está estancado y no hay planes viables para ello; el desempleo aumenta; los cierres de empresas y negocios crecen cada día, hay un millón de empleos perdidos en el 2020. La pandemia lo arrasó todo, el sistema de salud siempre precario ya colapsó, la clase media siempre en riesgo ya abultó en 10 millones las cifras de la pobreza. Baja California, Chihuahua y Tabasco, fueron los únicos estados que generaron empleos nuevos en el 2020
En este escenario, el gobierno de López Obrador va registrando un millón y medio de contagios, con más de 150 mil muertos reconocidos, más los ocultos, Él, ya fracasó en el combate a la pandemia y lo sabe perfectamente. Por lo tanto, ha encontrado en la aplicación de las vacunas su mejor carta para enfrentar las elecciones de este año y está dispuesto a jugarla, a como dé lugar.
Los Servidores de la Nación, los que hacen las listas para el reparto de dinero y becas, han sido integrados a las brigadas de vacunación, junto a las enfermeras que las aplican y los guardias nacionales que las resguardan. Ellos serán los encargados de avisar y reunir a los aspirantes a vacunas para que se les apliquen. “El gobierno de la Cuarta Transformación te vacuna gratis, los vulnerables y pobres van primero y tú has sido escogido,” así se construye una narrativa muy poderosa. Eso sucederá en cada rincón del país, aunque sea con vacunas chinas y rusas. Se trata de hacerlo pronto para intentar detener a la incontrolable pandemia que se reactivó con enorme violencia en varias regiones del país.
Esas brigadas de empleados de la Secretaría del Bienestar reactivarán sus contactos en los barrios y colonias, con lo que Morena y sus candidatos tendrán mejor estructura terrestre que la que tuvieron en Coahuila el año pasado, cuando las dirigencias dejaron solos a los candidatos, ni recursos les entregaron para hacer campaña.
Por aire, el morenismo, tendrá las arengas del presidente tabasqueño quien con su oratoria incendiaria insistirá en clasificarnos como chairos y fifíes, liberales y conservadores, ricos y pobres, absueltos y corruptos. AMLO sabe que gobernar es comunicar y no soltará el micrófono mientras sea el inquilino principal del Palacio Nacional. Hasta está dispuesto a hacer el AMLObook o el Esperanza-app para evitar que las empresas dueñas de las principales redes sociales, le suspendan sus cuentas. Cuando veas las redes de tu vecino (Donald Trump) cortar, ponte a construir las tuyas. Igual que China y Venezuela.
Aunque en Coahuila los bonos del primer mandatario han ido en descenso en los últimos meses, en el súper domingo todo puede suceder. En medio de la enorme tragedia que atraviesa México, una de las peores de la historia, en unos meses estaremos en campañas. Luego, vendrán los tiempos de contar los votos y más muertos. La vacunación podría alargarse todo el año. Lo mismo la tragedia.
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