Sócrates A. Campos Lemus.
A FINALIZAR EL GOBIERNO DE LUIS ECHEVERRÍA, LLEGABA A DESAYUNAR AL CLUB DE GOLF, Campestre Churubusco, Juan Aguirre, hermano de Manuel Bernardo Aguirre, secretario de Agricultura y donde Juan estaba encargado de la administración del ingenio San Cristóbal, donde comentaba que laboraba el hijo de Don Julio, Julio Scherer, hoy, Consejero Jurídico del Presidente López Obrador.
Juan comentaba al Dr. Gustavo Baz y a Don Luis Gómez Zepeda que existía un grupito de gentes cercanas al presidente que pretendían incriminar al Julio chico en un inmenso fraude que se venía arrastrando desde tiempo atrás y les solicitaba su opinión. Por supuesto que ambos dijeron que se opondrían a utilizar o incriminar a un hijo de un gran periodista en una truculencia tal solamente para dar satisfacción a un grupito de pillos que querían halagar al presidente. Por fortuna no se avanzó en tal intriga que seguramente desataría un enorme escándalo en esa época, ahí supe pues de Julio y en realidad me cae muy bien desde entonces, aclarando que jamás he tenido la oportunidad de platicar con él y es por tal motivo que conociendo la trayectoria de su familia como gente decente y noble, pues creo que efectivamente cuando él dice en una entrevista con Carmen Aristegui que deben callar a los periodistas para que no hagan preguntas al presidente que le comprometa y genere conflicto con el INE, en verdad lo hace de buena fe y no con un sentido como el que le pretenden imponer muchos fifís y sicarios de la información para joder al presidente y a Julio. Después, en alguna charla con Juan Bustillos, mi Director en Impactó, me decía que estaba en comunicación atenta con Julio y que este incluso le daba un trato de hermano y esto le sorprendía porque jamás habían tenido un trato personalizado, pero comenzaron a platicar, al parecer, con una gran calidad y franqueza, estando convencido de que efectivamente tenía una enorme comunicación y confianza con el presidente y trataba de ser un buen conducto para limar asperezas con los medios y comunicadores en vez de alentar las confrontaciones y le creo, le creía totalmente a mi estimado y recordado hermano Juan.
Y la verdad que en los tiempos de secas como que los ánimos se vienen expandiendo y toman rumbos que a lo mejor llegan a las protestas, éstos tiempos calientes me recuerdan a los inicios del 68 donde los calores aumentaban la irritación en los transportes, en las escuelas, en las reuniones, y todos sabían que existían festejos para las olimpiadas donde en realidad se reservaban para los turistas y se explotaba a los ciudadanos para que pagaran los enormes gastos incluso con obras públicas como la entonces carretera a Puebla donde la pagaríamos solamente hasta la liquidación del préstamo pero ya , los gobierno siguen cobrando y jodiendo a todos los que transitamos por ahí y hemos pagado por años este “servicio” al igual que se aseguraba que se cobraría la Tenencia de uso de Vehículos solamente para pagar las deudas de la olimpiada y seguimos pagando, como pendejos, todos los mexicanos porque les creemos a los ratas y gobernantes. Además de lo que no nos habíamos dado cuenta que existían dos perversidades en el equipo de desgobierno de Díaz Ordaz, uno era la intervención de los gringos en el criterio de la Guerra Fría para tratar de aprovechar los disturbios generados y apoyados por ellos a un grupo de paramilitares ligados en la CIA, desde el presidente a otros importantes funcionarios del gobierno, y por el otro, dar el famoso golpe militar para apoyar la política generada por los norteamericanos, y también, en otro sentido y que genera mayores conflictos y problemas, intrigas y traiciones es que ya se vislumbraba la SUCESIÒN POLÍTICA ADELANTADA, como hoy se habla abiertamente en México de la sucesión adelantada de Claudia, Marcelo y Monreal, y esto provocó muchos conflictos y traiciones que dejaron a un grupito ganador en la presidencia a costillas de la gran matanza de Tlatelolco.
Y sería bueno que el presidente investigara que en esa época también se utilizaban a los “intelectuales de izquierda, orgánicos, que fueron los exitosos y ricachones de la época porque desde gobernación y la secretaría de la Presidencia recibían sus subsidios y les daban las instrucciones para distraer la atención y que la gente culpara de los disturbios y matanzas a los jóvenes, pero no se tocara a los grandes políticos inmiscuidos como se puede leer fácilmente en muchas de las obras grandiosa y pagadas que escribieron muchos intelectuales que, ahora, dicen, andan cerca de AMLO”, que no se equivoque el presidente, desde Díaz Ordaz y sobre todo desde Echeverría se cooptó a muchos intelectuales de izquierda y se les legalizó su propio partido comunista así que no me explico, cómo, ahora, se sorprende de la postura de algunos destacados comunistas que son voceros de la derecha cuando en realidad siempre lo fueron, porque eran y son grandes oportunistas y ambiciosos del poder.
Si desde esa época, cuando la rebeldía de Don Julio Scherer daba ejemplo de valor, muchos “izquierdistas ligados a Echeverría, Corona del Rosal, que incluso tenía de secretario general a un destacado miembro de la izquierda que era el conducto para las tranzas y otros más andaban dando el calzón y los traseros a los hombres del poder, y ahí quedaron, muchos y muchas… sin duda alguna, algunos viejos y prostituidos hacen exactamente como las prostitutas viejas, de viejas, les da por dar consejos y claro descarrilan al buen hombre en su buena fe y le hacen cometer muchos errores. Esos, también dejaron convicciones por publicaciones y ganancias y siguen mamando del engaño global a los mexicanos, pero así es la ambición y la traición…pero, el tempo, es la madre de la verdad, y ya llegó el tiempo para conocerla. Que no se hagan bolas ni como el tío Lolo.