Jorge Arturo Estrada García.
“Las elecciones, a veces, son la venganza del ciudadano.
La papeleta es un puñal de papel.”
David Lloyd George.
“En política todas las victorias son efímeras,
y todas las derrotas son provisionales.”
Manuel Fraga Iribarne.
La jornada del seis de junio será una elección entre el desgaste y el desprestigio. Se enfrentan el partido del presidente contra las ruinas de los partidos opositores, que formaron una coalición que ha logrado consolidarse en algunas zonas del país. La mayor fortaleza de Morena es López Obrador, sus mayores debilidades son el desgaste de un presidente que no genera buenos resultados y el deterioro de la marca Morena por la colección de impresentables que se han vuelto protagonistas. La democracia mexicana, siempre tan precaria, atraviesa momentos difíciles.
Aunque la renovación del congreso federal está en las boletas, la multitud de elecciones simultáneas en 30 entidades del país le dan un carácter de interés local que las vuelve más interesantes y competidas. Hay 15 gubernaturas en juego y cientos de presidencias municipales lo que hace que la participación del electorado aumente. En Coahuila, se refleja la polarización del país y los votos de castigo se reparten en contra de varios partidos, aquí si van el PRI contra el PAN y Morena disputando, en algunos lugares.
Habrá elecciones cerradas en Torreón y en la capital de Coahuila, si los votos no llegan a quien los necesita para ganar con mayor claridad. En Saltillo, Chema Fraustro requiere que los votos de las personas que tradicionalmente votan por el PAN no se vayan con Armando Guadiana. En la perla lagunera, el escenario es entre tres: Marcelo Torres Cofiño, Román Alberto Cepeda y Luis Fernando Salazar, están muy parejos. Nadie quiere claudicar.
El ambiente político está caldeado. Los hechos y sus repercusiones se han sucedido de manera trepidante. Asesinatos políticos, órdenes de aprehensión, desafueros, retiros de candidaturas, candidatos “Juanitos”, publicaciones extranjeras atizando el fuego, el Instituto Estatal Electoral atacado, la Suprema Corte puesta a prueba con la intención de extensión de mandato de su magistrado presidente. La Línea 12 del Metro de la CdMx colapsó y murieron 26 y 70 más quedaron lesionados, entre los responsables de la tragedia están los favoritos del presidente: Marcelo Ebrard y Claudia Sheinbaum.
Adicionalmente, los gringos están señalando que un tercio del territorio nacional es tierra de la delincuencia organizada, también que los sindicatos cetemistas hacen elecciones tramposas en las armadoras y ya son vigilados desde Washington, además Kamala Harris tiene visita programada a México el 7 de junio. Tal vez, en medio de protestas electorales en varios frentes.
Para completar el cuadro, algunos expertos avizoran la amenaza de un tercer rebrote que podría estar surgiendo en Baja California y Quintana Roo Actualmente se ha acelerado el proceso de inmunización, con 29 millones de vacunados, pero la mayoría con solamente una dosis y con la permanente escasez de vacunas.
Definitivamente el rumbo del país estará en juego. Al presidente, cuando siente presión, le gusta doblar las apuestas y forzar las partidas, es terco, no le gusta perder y tiene buena memoria, ahora desde palacio nacional tiene brazos largos y ya encontró el caminito para sincronizar a la Fiscalía General de la República y a la Unidad de Inteligencia Financiera. Obrador está molesto y nervioso y a la ofensiva.
La fortaleza del proyecto de la 4T está siendo puesta a prueba. La marca Morena ya es mala y el ascendiente del presidente Andrés Manuel sobre los mexicanos ya no es el mismo de hace tres años, además está rodeado por un grupo de impresentables pretendiendo parecer moralizadores de la patria, pero con sus pecados a flor de piel. Sin embargo, parece tener la fuerza suficiente para ganar la mayoría en la cámara de diputados sumando a sus aliados. Eso le mete interés al proceso electoral.
¿La autoridad moral con la que se invistió el presidente, bastará para apoderarse de la mayoría de las gubernaturas en juego? El desgaste por sus magros resultados en casi tres años de gobierno, seguramente pesará en el ánimo de los votantes bisagras o volátiles. Aunque parece que no tanto, por el momento.
Sin embargo, la caída sólo significaría impedirle llegar a la mayoría calificada. Según el algoritmo de proyecciones de encuestas, Oraculus, se registra que Morena alcanzaría 143 victorias de las 300 diputaciones de mayoría en juego, el PAN 44, el Verde 37, el PT 36, el PRI 23, el PRD 14 y Movimiento ciudadano sólo 2. El PRI caería a un ridículo quinto lugar con 23 triunfos, ¿Cuántos de ellos aportaría Coahuila, “el estado más priísta del país”? Lo veremos.
Estamos en un duelo que enfrenta al desgaste contra desprestigio. Las crisis agobian ya a muchos sectores sociales, en el corto plazo no hay escenarios optimistas. Hay demasiada polarización y violencia en el ambiente. Los mexicanos somos fatalistas, en un año han fallecido cientos de miles más que, en situaciones normales, no deberían haber muerto y a nadie parece importarle.
A veces las elecciones sirven para legitimar dictaduras o dictablandas, en México tenemos más de 100 años presenciándolo, salvo en algunos procesos excepcionales. Será interesante ver como amanece México el próximo 7 de junio.
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