“Nada hay verdad ni mentira”

0
368

Fernando Rangel de León.

 “La Mañanera”, es una forma de difusión de la administración de la 4T, por la que el Presidente del país, informa en la televisión a nivel nacional todos los días de lunes a viernes, los planes, proyectos, obras, servicios y todo el quehacer del gobierno de México; porque quiere que de todo se entere la sociedad; pues es un convencido de que la República, es una res (cosa) pública, es decir, de todos, y él tiene el deber de hacer del conocimiento lo que está haciendo con el poder público que le fue prestado en las urnas.

Pero también el Presidente, en las mañaneras, hace uso del derecho de réplica a los articulistas de los periódicos y comentaristas de televisión, y de todos los medios que magnifican sus desaciertos, con muy malas intenciones, y minimizan sus aciertos para que la gente no se entere de los avances del gobierno de México; desmintiéndoles, aclarándoles y corrigiéndoles; lo cual les disgustó mucho a ellos.

Pero como eran muchas las que el gobierno considera mentiras, las de los medios; el Ejecutivo, añadió en sus mañaneras una sección denominada “Quien es quien en las mentiras de la semana”; lo que disgustó aun todavía más a los articulistas y comentaristas, que se sintieron aludidos como mentirosos.

AMLO, para justificar lo que podría llamarse “mentirólogo” (medición de las mentiras), afirmó que los articulistas y comentaristas y los medios no pueden poseer el monopolio de la verdad; lo cual es cierto; pues todos tenemos el derecho humano de conocer lo que existe afuera de nuestras cabezas, en la realidad objetiva, para saber, y reflejarla en nuestras mentes, en nuestros pensamientos y en nuestras ideas; de ahí que debemos de informarnos lo más que se pueda por distintos medios, para luego formarnos un criterio.

Esta discusión entre qué es la verdad y qué es la mentira, nos hizo recordar la parte del poema de Ramón de Campoamor, que dice: “Y es que en el mundo traidor/ nada hay verdad ni mentira/  todo es según el color/ del cristal con que se mira”; que inspiró al gobierno de España a utilizar esta metáfora o recurso retórico, cuando se trataba de interpretar alguna ley o reglamento; y a lo que se denominó Ley Campoamor.

Creemos que el mejor método para analizar lo que es verdad y lo que es mentira, es no tener prejuicios, es decir, no juzgar nunca previamente a nadie sin tener prueba alguna.