El pez por su boca muere

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José Guadalupe Robledo Guerrero.

Al presidente Andrés Manuel López Obrador le cae como anillo al dedo aquel sabio refrán popular que dice: “El pez por su boca muere”, y mejor se le acomoda por el apodo que le endilgaron en la política, “El Peje”, por ser oriundo de Tabasco, en cuyos ríos tropicales se reproduce este pez.

AMLO se ha ganado en la mañanera la mayor parte de las críticas que cotidianamente le hacen no sólo sus malquerientes, sino también los ciudadanos que quieren que el país transite por mejores caminos, y los cuestionamientos son para que corrija sus errores, debido a que no acepta ninguna equivocación.

Qué necesidad tiene el presidente que desautorice, critique, enfrente y se pelee con la clase media, los universitarios, los científicos, los padres de los niños con cáncer, los trabajadores de la salud que exigen insumos, las feministas, periodistas, etcétera, y por el contrario, insista en su infalibilidad, mientras defiende a los suyos, porque según él, son honestos en un 90 por ciento y eficientes en el 10 por ciento restante.

Para qué seguir repitiendo lo que tantas veces se ha dicho, si todos los días hay algo nuevo; por ejemplo, el viernes pasado AMLO dio dos perlas más a sus críticos. La primera es cuando señaló en Xochimilco algo que no venía al caso, porque el tema del evento era el programa de su gobierno Jóvenes construyendo el futuro, al afirmar que detener a los criminales no es lo principal para su gobierno. “deteniendo a capos no se resuelve el problema”, pontificó el presidente.

Con esta declaración presidencial, se clarifica que para el crimen organizado no sólo es aquello de “abrazos no balazos”, sino que tampoco hay intenciones gubernamentales para detener a los facinerosos. Estas palabras convalidan lo que repetidamente se ha sugerido: que entre su gobierno y el crimen organizado hay un pacto.

La segunda perla, es la acusación de corruptos que les hizo a los 31 científicos que su Fiscal Alejandro Gertz Manero quiere encarcelar, acusándolos de operaciones con recursos de procedencia ilícita y delincuencia organizada, debido a que según AMLO son un sector privilegiado, que gozan de viáticos, comidas en lujosos restaurantes, choferes, ayudantes, viajes a congresos en otros países, etcétera.

Esto lo dijo el presidente, olvidando que horas antes había señalado que él no tenía nada que ver con la persecución de los científicos acusados. “Yo no le he dado una sola orden al Fiscal”, recalcó AMLO, sin tomar en cuenta que nadie se lo cree, y que el Rector de la UNAM, Enrique Graue, y el Coordinador parlamentario de Morena, Ricardo Monreal, se solidarizaron con los científicos perseguidos y calificaron su persecución como “un despropósito”, junto con infinidad de voces del mundo universitario, cultural, científico, político y periodístico.

No hay duda pues, que el pez por su boca muere, y más aún cuando reacciona con filias y fobias, resentimientos y venganzas, olvidando que es el presidente de todos los mexicanos.

Política aldeana

Ayer sábado en Torreón, la Universidad Autónoma de Coahuila le otorgó al Doctor Adolfo Orive Bellinger el grado de Maestro Ad Vitam. Adolfo es para su generación un personaje histórico, considerado un luchador y organizador social, cuya preocupación fue ayudar a la gente a ser sujeto de su vida, es decir de su historia. Fundó uniones de crédito, uniones de ejidos, la Universidad Campesina en Los Altos de Chiapas. Sus logros académicos son envidiables: Ingeniero civil por la UNAM, Doctor en Economía por la Universidad de París, pos doctorado en Economía Keynesiana por la Universidad de Cambridge, y Doctor en ciencias políticas y sociales por la UNAM. Ha sido diputado federal y diputado local, profesor en varias universidades de México, columnista en Excélsior. Autor de seis libros y se le reconoció como ideólogo de “Línea de Masas”. Fue Consejero del presidente en el programa Solidaridad y Secretario Técnico en el gabinete del presidente Carlos Salinas de Gortari. A sus 81 años de edad, Adolfo Orive Bellinger recibió esta distinción de la UAdeC de manos del Rector Salvador Hernández Vélez, quien le hizo justicia a su larga trayectoria en la lucha al lado de los sectores desposeídos. ¡Felicidades! Adolfo, te lo mereces. Recibe desde este modesto espacio mi reconocimiento y respeto. Más vale tarde que nunca.

Pregunta huérfana

Según el controvertido Samuel García, gobernador electo de Nuevo León, Aldo Fasci Zuazua repetirá en la Secretaria de Seguridad Pública del vecino estado y “no permitirá que grupos delictuosos entren a Nuevo León”.

¿No será mejor decir que sacará a los delincuentes de Nuevo León, porque ya están dentro del Estado?