Luis Fernando Hernández González.
Cuando la autoridad electoral del país tiene una relación de diálogo con fuerzas políticas del país, los directivos de Morena de forma inmediata buscan generar controversia y descalificación por estas acciones, por el solo hecho de acudir el presidente del INE Lorenzo Córdova, quien defendió de manera categórica su diálogo entre autoridades y las fuerzas políticas del país, pues dijo, discutir es de demócratas, mientras que descalificar y satanizar el diálogo es de personas cerradas en el cual se ubican mentalidades retrogradas y autoritarias.
Fue en el trascurso de días pasados cuando el mismo presidente Andrés Manuel López obrador, en su respuesta a estos hechos, el viernes pasado criticó que Córdova se haya reunido con los diputados federales del PAN y del PRD, el consejero reviró:
“Lo raro, imprudente y condenable habría sido que como titular del órgano del Estado encargado de proteger la democracia me hubiera negado a reunirme, agregando que, en el INE, expuso, interactuar permanentemente con todos los actores políticos es nuestro derecho y nuestra obligación, el escuchar a las distintas organizaciones sus actores para el fortalecimiento de la vida democrática que demanda la nación.
Además, el presidente del INE, comentó que ha decidió aceptar todas las invitaciones para participar en reuniones con las fuerzas políticas, para construir la agenda legislativa y discutir los asuntos públicos, además de con funcionarios y legisladores a todos los niveles que le convoquen a sus reuniones, para dialogar y discutir en un ambiente en el que se fomente el análisis que de sentido a una superior democracia, enfatizó.
A efecto de clarificar más su posición comentó Lorenzo Córdova: Te imaginas una autoridad electoral que no interactuara respetuosa, pública y abiertamente con partidos legisladores, funcionarios de todos los gobiernos, autoridades del Poder Judicial y de otros autónomos en donde se ubica.
No obstante, a lo acontecido, sin ningún escrúpulo que denote algo de institucionalidad gubernamental, fue el propio secretario de Gobernación, quien en una reunión con legisladores del Morena, se junta en la antigua sede del senado de Xicoténcatl, para comunicar el mensaje del presidente bajo el cual pide a sus integrantes “no perder el tiempo en estériles batallas internas”, ya que se requiere una bancada fuerte, con la autoridad moral, para impulsar y concretar la reforma eléctrica y las demás iniciativas del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Al inaugurar la octava reunión parlamentaria de Morena en el Senado, advirtió: “Si nosotros no somos capaces de mantenernos unidos, tampoco vamos a ser capaces de ejercer la autoridad moral que obligue a la oposición a cumplir los acuerdos”. La plenaria tuvo un ambiente de tensión; incluso, el funcionario fue testigo del choque verbal entre el coordinador Ricardo Monreal y el senador José Antonio Álvarez Lima.
Por otra parte, imaginemos este tipo de situaciones en el que autoridades emanadas del PRI o del PAN, de periodos pasados, cuando las voces exigían la sana distancia entre autoridades de gobierno y partidos políticos afines, que hubiesen realizado este tipo de confluencias, los integrantes de izquierda y sus satélites generaría todo tipo de protestas y mezquindades para señalar a la autoridad.
En esta misma reunión, el secretario de Gobernación alertó, sin embargo, de la posibilidad de que nos derrotaran en esta tarea, o peor, si nos traicionamos a nosotros mismos y votamos en contra o nos ausentamos de las sesiones. Apuntado también que “no tenemos pretexto para que la frivolidad o la ambición pudieran romper la unidad”.
Ante tales aseveraciones de inmediato, el coordinador Monreal le respondió y le pidió “prudencia, tolerancia. No le exageremos”, porque, resaltó, “nadie está en deslealtad con el presidente de la República.
Señalando en este espacio que ésta, es la condición del cómo se mueven las aguas al interior de Morena, situación que no conduce a ninguna clara y verídica construcción de democracia,
De este proceder, los ciudadanos qué podemos esperar de la política cuando vemos estas cosas en este partido hegemónico y autoritario, arrogante y soberbio en sus dirigentes y mandatario de la nación, entonces, pues cuando podremos esperar para ejercicios políticamente avanzados que se definan por la elección en los cargos públicos, sufragio inclusivo, participación ciudadana, libertad de elección, procesos claros y justos, libertad de expresión, información alternativa y libertad de asociación, al ver cómo los integrantes del partido en el gobierno federal actúan de esta manera, debiendo ser un claro ejemplo de participación para edificar una mejor democracia..
De otra forma, lo vemos cuando se fomenta la animadversión que encona la expresión del malestar social, promueve los sentimientos de polarización y los impulsos expresivos de identidades de grupos excluyentes, favorable por su dinámica divisora y rupturista al avance de gobiernos autoritarios apoyados por el electorado del país, que debiendo ser de razón jurídica-institucional y democrática se arropan en el agravio y en el sentimiento de venganza social y política
Al ser esta combinación de neopopulismo, descontento social y anti-política, condición que solo presenta a largo plazo una guía necesaria de renovación razonada y conciencia de política pluralista ante los ciudadanos, que en nada contribuye para la reconstrucción de la esfera pública y del Estado de derecho.
La pregunta es ¿cómo los ciudadanos debemos de participar para defender e impulsar la democracia de este México que es de todos?