Rufino Rodríguez Garza.
En las coordenadas 25° grados, 73’ minutos y 48’’ segundos latitud y 102° grados, 86’ minutos, 90’’ segundos longitud, se localizan las nueve Lomas de Cleto, ubicadas en la vastedad del desierto coahuilense.
Este sitio está ubicado en el municipio de San Pedro de las Colonias, la altitud de este lomerío es de 1090 M. sobre el nivel del mar. Estas Lomas están rodeadas de arenales y en cuestión de flora prevalece el matorral bajo, abundan las albardas y el nopal cegador. Aunque sé de la existencia de peyotes, no caminé lo suficiente para poder localizar alguno de ellos. En cuestión de cactus solo vi poca “ganchuda” y “mancacaballo”. El zacate aunque lo hay no se observa a simple vista, espera la lluvia y como buen oportunista éste brotara como por arte de magia.
Los caminos de acceso son malos, más bien parecen veredas, aunque es lugar para pastoreo no me tocó ver ganado alguno.
La roca es dura para el grabado, pero aun así los nativos dejaron sus indescifrables mensajes.
Estilo
Es característico de estos lugares del poniente de Coahuila que los motivos sean mayormente abstractos unos, y otros geométricos.
El parecido con los grabados de El Sol y San Rafael es muy semejante: curbiformes, circulares, líneas quebradas y las cuentas a base de puntos no los hay más que en el interior de triángulos y círculos
también se observan círculos radiados que suponemos son representaciones solares. En la carretera 40 en el tramo de La Cuchilla y Paila se localiza El Sol y San Rafael dónde hay presencia de abundantes petrograbados y en el caso de San Rafael también pinturas.
Al igual que en las Lomas de Cleto aquí los motivos también son abstractos y geométricos, y fuera de elementos humanos antropomorfos o pies y manos, todo lo demás constituyen los grabados que hacen todo un estilo, el estilo “Laguna”.
Advertimos muchas diferencias con grabados de otros sitios, por ejemplo, en Cleto y los lugares de la carretera 40 no hay grabados naturistas como en otros lugares de General Cepeda y Ramos Arizpe, no se observan huellas, astas, bisontes, borregos, insectos, aves, peces, redes, armas, lanzas, proyectiles, propulsores, arcos y flechas, raspadores, etcétera.
Pero no porque en estos lugares no conocían está fauna, sino porque aún no sabemos interpretar estos grabados que están en Cleto, San Rafael o el Sol. Aquí priva el geometrismo y los grabados abstractos.
Día a día van saliendo a la luz nuevas manifestaciones, buscando referencias encontré un buen apunte del amigo Sergio Quiroz Rendón, en el que nos habla de los cerritos que llamamos “De Cleto”. Aquí nos comparte Sergio la variedad de los petrograbados: soles, manos, pies, redes y algunos otros motivos.
El amigo Sergio nos habla de grabados superficiales y profundos; en mi vuelta al sitio solo observe grabados superficiales y ninguno profundo; aclaro que no revisé la totalidad de las locaciones donde pudiera darse el caso de profundidad en los dibujos. La dureza de la roca hace imposible el grabado de profundidad.
Nos habla de los posibles grabadores y nos menciona a los Irritilas, pero yo agregaría también a los Laguneros, Salineros y otros grupos que por aquí buscaban el diario sustento. También pudieron ser grupos más antiguos, pues los grupos antes mencionados ya se encontraban al momento del contacto con los europeos y los grabados con suerte ya estaban allí. Sobre estos cerritos no hay muchas referencias por lo que el aporte del amigo Sergio Quiroz es de suma importancia.
En lo personal solo pude constatar lo dicho por Sergio, pues el 15 de abril del 2022 me di el lujo de llegar a estas lomas que guardan los intraducibles mensajes de nuestros antepasados. Desde mi personal punto de vista creo que son sitios ceremoniales.